'Salario' en la Biblia
Entonces dijo Labán a Jacob: ¿Por ser tú mi hermano, me has de servir de balde? Declárame qué será tu salario.
Y dijo Lea: Dios me ha dado mi salario, por cuanto di mi sierva a mi marido; por eso llamó su nombre Isacar.
Y dijo: Señálame tu salario, que yo lo daré.
Yo pasaré hoy por todas tus ovejas, poniendo aparte toda oveja pintada y manchada, y todo carnero bermejo entre los carneros, y lo pintado y manchado entre las cabras; y esto será mi salario.
Así responderá por mí mi justicia mañana cuando me viniere mi salario delante de ti; todo lo que no fuere pintado ni manchado en las cabras y bermejo en las ovejas mías, se me ha de tener por de hurto.
y vuestro padre me ha mentido, que me ha mudado el salario diez veces; pero Dios no le ha permitido que me hiciera mal.
Si él decía así: Los pintados serán tu salario; entonces todas las ovejas parían pintados; y si decía así: Los cinchados serán tu salario; entonces todas las ovejas parían cinchados.
Así he estado veinte años en tu casa: catorce años te serví por tus dos hijas, y seis años por tu rebaño; y has mudado mi salario diez veces.
Y la hija de Faraón le dijo: Llévate a este niño y críamelo, y yo {te} daré tu salario. Y la mujer tomó al niño y lo crió.
``No oprimirás a tu prójimo, ni {le} robarás. El salario de un jornalero no ha de quedar contigo toda la noche hasta la mañana.
Como con el tomado a salario anualmente hará con él; no se enseñoreará en él con aspereza delante de tus ojos.
No te parezca duro cuando le enviares libre de ti; que doblado del salario de mozo jornalero te sirvió seis años: y Jehová tu Dios te bendecirá en todo cuanto hicieres.
Manda pues ahora que me corten cedros del Líbano; y mis siervos estarán con los tuyos, y yo te daré por tus siervos el salario que tú dijeres; porque tú sabes bien, que ninguno hay entre nosotros que sepa labrar la madera como los sidonios.
Esforzaos pues vosotros, y no descoyunten vuestras manos; que salario hay para vuestra obra.
Y entendí que Dios no lo había enviado, sino que hablaba aquella profecía contra mí, porque Tobías y Sanbalat le habían alquilado por salario.
El salario del justo es vida, la ganancia del impío, castigo.
El impío gana salario engañoso, pero el que siembra justicia {recibe} verdadera recompensa.
El gran Dios cría todas las cosas; y al loco da la paga, y a los transgresores da el salario.
Y acontecerá, que al fin de los setenta años visitará Jehová a Tiro: y volverá a su salario, y otra vez fornicará con todos los reinos de la tierra sobre la faz de la tierra.
He aquí, que el Señor DIOS vendrá con fortaleza; y su brazo se enseñoreará. He aquí que su salario viene con él, y su obra delante de su rostro.
¿Por qué gastáis dinero en lo que no es pan, y vuestro salario en lo que no sacia? Escuchadme atentamente, y comed lo que es bueno, y se deleitará vuestra alma en la abundancia.
¡Ay del que edifica su casa y no en justicia, y sus salas y no en juicio, sirviéndose de su prójimo de balde, y no dándole el salario de su trabajo!
Así dijo el SEÑOR: Reprime tu voz del llanto, y tus ojos de las lágrimas; porque salario hay para tu obra, dice el SEÑOR, y volverán de la tierra del enemigo.
edificando tus altares en cabeza de todo camino, y haciendo tus altares en todas las plazas! Y no fuiste semejante a ramera, menospreciando el salario,
Y haré talar su vid y su higuera, de la que ha dicho: Mi salario me son, que me han dado mis amantes. Y las reduciré a un matorral, y las comerán las bestias del campo.
Porque ellos subieron a Assur, asno montés para sí solo; Efraín con salario alquiló amantes.
No te alegres, oh Israel, gozando como los pueblos, pues has fornicado apartándote de tu Dios; amaste salario de ramera por todas las eras de trigo.
Sembráis mucho, pero recogéis poco; coméis, pero no hay {suficiente} para que os saciéis; bebéis, pero no hay {suficiente} para que os embriaguéis; os vestís, pero nadie se calienta; y el que recibe salario, recibe salario en bolsa rota.
Y les dije: Si os parece bien, dadme mi salario; y si no, dejadlo. Y apreciaron mi salario en treinta piezas de plata.
Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo contra los hechiceros y adúlteros; y contra los que juran mentira, y los que detienen el salario del jornalero, de la viuda, y del huérfano, y los que hacen agravio al extranjero, no teniendo temor de mí, dijo el SEÑOR de los ejércitos.