'Sus' en la Biblia
y sujetándole todas las cosas debajo de sus pies, y poniéndolo por cabeza sobre todas las cosas a la Iglesia,
el cual en las otras generaciones no se dio a conocer a los hijos de los hombres como ahora es revelado a sus santos apóstoles y profetas en Espíritu:
El que hurtaba, no hurte más; antes trabaje, obrando con sus manos lo que es bueno, para que tenga de qué dar al que padeciere necesidad.
Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor.
Así que, como la Iglesia está sujeta al Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo.
Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.
porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos.