'También' en la Biblia
Así que, por cuanto los hijos participan de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo,
porque en cuanto él mismo padeció y fue tentado, es poderoso para socorrer también a los que son tentados.
Fiel al que lo constituyó sobre toda su casa, como también lo fue Moisés.
Porque también a nosotros nos ha sido anunciado como a ellos; mas no les aprovechó el oír la palabra a los que la oyeron sin mezclar fe.
Porque el que ha entrado en su Reposo, también él ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas.
que se pueda compadecer de los ignorantes y errados, porque él también está rodeado de flaqueza;
por causa de la cual debe, así también por sí mismo, como por el pueblo, ofrecer por los pecados.
Así también el Cristo no se glorificó a sí mismo haciéndose Sumo Sacerdote, sino el que le dijo: Tú eres mi Hijo, yo te he engendrado hoy:
Como también dice en otro lugar: Tú eres Sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec.
al cual asimismo dio Abraham la décima parte de todo, primeramente él se interpreta Rey de justicia; y luego también Rey de Salem, que es, Rey de paz;
Que ciertamente los que de los hijos de Leví toman el sacerdocio, tienen mandamiento de tomar del pueblo los diezmos según la Ley, es a saber, de sus hermanos aunque también ellos hayan salido de los lomos de Abraham.
y, (por decir, así) en Abraham pagó diezmos también el mismo Leví, que recibe los diezmos;
Pues traspasado el sacerdocio, necesario es que se haga también traspasamiento de la Ley.
por lo cual puede también salvar eternamente a los que por él se allegan a Dios, viviendo siempre para rogar por ellos.
Porque todo sumo sacerdote es puesto para ofrecer presentes y sacrificios; por lo cual es necesario que también éste tuviera algo que ofrecer.
Y además de esto roció también con la sangre el Tabernáculo y todos los vasos del ministerio.
así también el Cristo es ofrecido una vez para agotar los pecados de muchos; la segunda vez se manifestará para salud a los que sin pecado lo esperan.
Porque de mis prisiones también os resentisteis conmigo, y el robo de vuestros bienes padecisteis con gozo, conociendo que tenéis en vosotros una mejor sustancia en los cielos, y que permanece.
Por la fe también la misma Sara, (siendo estéril) recibió fuerza para concebir generación; y dio a luz aun fuera del tiempo de la edad, porque creyó ser fiel el que lo había prometido.
Por lo cual también de uno, y ese ya muerto, salieron como las estrellas del cielo en multitud, y como la arena innumerable que está a la orilla del mar.
pensando dentro de sí, que aun de los muertos es Dios poderoso para levantar, por lo cual también le volvió a recibir por figura.
Por la fe también bendijo Isaac a Jacob y a Esaú de lo que habían de ser.
Por tanto nosotros también, teniendo puesta sobre nosotros una tan grande nube de testigos, dejando todo el peso del pecado que nos rodea, corramos por paciencia la carrera que nos es propuesta,
La voz del cual entonces conmovió la tierra; mas ahora ha denunciado, diciendo: Aún una vez, y yo conmoveré no solamente la tierra, sino también el cielo.
Acordaos de los presos como presos juntamente con ellos; y de los afligidos, como también vosotros mismos sois del cuerpo.
Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo por su propia sangre, padeció fuera de la puerta.