'Te' en la Biblia
- 1.Gé 3:10-Gé 33:10
- 2.Gé 33:11-Éx 32:21
- 3.Éx 32:34-Deuteronomio 6:15
- 4.Deuteronomio 6:17-Deuteronomio 19:14
- 5.Deuteronomio 20:1-Josué 2:14
- 6.Josué 7:10-1 Samuel 15:17
- 7.1 Samuel 15:18-2 Samuel 20:9
- 8.2 Samuel 20:21-2 Reyes 4:29
- 9.2 Reyes 5:6-Ester 7:2
- 10.Ester 9:12-Salmos 41:11
- 11.Salmos 42:5-Salmos 118:25
- 12.Salmos 118:28-Cantares 1:9
- 13.Cantares 6:13-Isaías 58:1
- 14.Isaías 58:7-Jeremías 33:3
- 15.Jeremías 34:3-Ezequiel 16:57
- 16.Ezequiel 16:61-Oseas 8:2
- 17.Oseas 9:1-Mateo 25:21
- 18.Mateo 25:23-Juan 1:50
- 19.Juan 3:3-1 Corintios 7:28
- 20.1 Corintios 8:10-Apocalipsis 21:9
Debéis guardar diligentemente los mandamientos del SEÑOR vuestro Dios, y sus testimonios y estatutos que te ha mandado.
Y harás lo que es justo y bueno a los ojos del SEÑOR, para que te vaya bien, y para que entres y tomes posesión de la buena tierra que el SEÑOR juró {que daría} a tus padres,
Cuando en el futuro tu hijo te pregunte, diciendo: `` ¿Qué {significan} los testimonios y los estatutos y los decretos que el SEÑOR nuestro Dios os ha mandado?",
Cuando el SEÑOR tu Dios te haya introducido en la tierra donde vas a entrar para poseerla y haya echado de delante de ti a muchas naciones: los hititas, los gergeseos, los amorreos, los cananeos, los ferezeos, los heveos y los jebuseos, siete naciones más grandes y más poderosas que tú,
y cuando el SEÑOR tu Dios los haya entregado delante de ti, y los hayas derrotado, los destruirás por completo. No harás alianza con ellos ni te apiadarás de ellos.
Porque ellos apartarán a tus hijos de seguirme para servir a otros dioses; entonces la ira del SEÑOR se encenderá contra ti, y El pronto te destruirá.
Porque tú eres pueblo santo para el SEÑOR tu Dios; el SEÑOR tu Dios te ha escogido para ser pueblo suyo de entre todos los pueblos que están sobre la faz de la tierra.
Guarda, por tanto, el mandamiento y los estatutos y los decretos que yo te mando hoy, para cumplirlos.
Y te amará, te bendecirá y te multiplicará; también bendecirá el fruto de tu vientre y el fruto de tu tierra, tu cereal, tu mosto, tu aceite, el aumento de tu ganado y las crías de tu rebaño en la tierra que El juró a tus padres que te daría.
Y el SEÑOR apartará de ti toda enfermedad; y no pondrá sobre ti ninguna de las enfermedades malignas de Egipto que has conocido, sino que las pondrá sobre los que te odian.
Y destruirás a todos los pueblos que el SEÑOR tu Dios te entregue; tu ojo no tendrá piedad de ellos; tampoco servirás a sus dioses, porque esto {sería} un tropiezo para ti.
las grandes pruebas que tus ojos vieron, las señales y maravillas, y la mano poderosa y el brazo extendido con el cual el SEÑOR tu Dios te sacó. Así el SEÑOR tu Dios hará con todos los pueblos a los cuales temes.
No te espantes de ellos, porque el SEÑOR tu Dios está en medio de ti, Dios grande y temible.
Y te acordarás de todo el camino por donde el SEÑOR tu Dios te ha traído por el desierto {durante} estos cuarenta años, para humillarte, probándote, a fin de saber lo que había en tu corazón, si guardarías o no sus mandamientos.
Y te humilló, y te dejó tener hambre, y te alimentó con el maná que no conocías, ni tus padres habían conocido, para hacerte entender que el hombre no sólo vive de pan, sino que vive de todo lo que procede de la boca del SEÑOR.
Por tanto, debes comprender en tu corazón que el SEÑOR tu Dios te estaba disciplinando así como un hombre disciplina a su hijo.
Porque el SEÑOR tu Dios te trae a una tierra buena, a una tierra de corrientes de aguas, de fuentes y manantiales que fluyen por valles y colinas;
una tierra donde comerás el pan sin escasez, donde nada te faltará; una tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes puedes sacar cobre.
Cuando hayas comido y te hayas saciado, bendecirás al SEÑOR tu Dios por la buena tierra que El te ha dado.
Cuídate de no olvidar al SEÑOR tu Dios dejando de guardar sus mandamientos, sus ordenanzas y sus estatutos que yo te ordeno hoy;
no sea que cuando hayas comido y te hayas saciado, y hayas construido buenas casas y habitado {en ellas,}
entonces tu corazón se enorgullezca, y te olvides del SEÑOR tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto de la casa de servidumbre.
El te condujo a través del inmenso y terrible desierto, {con sus} serpientes abrasadoras y escorpiones, tierra sedienta donde no había agua; El sacó para ti agua de la roca de pedernal.
En el desierto te alimentó con el maná que tus padres no habían conocido, para humillarte y probarte, y para finalmente hacerte bien.
Mas acuérdate del SEÑOR tu Dios, porque El es el que te da poder para hacer riquezas, a fin de confirmar su pacto, el cual juró a tus padres como en este día.
Y sucederá que si alguna vez te olvidas del SEÑOR tu Dios, y vas en pos de otros dioses, y los sirves y los adoras, yo testifico contra vosotros hoy, que ciertamente pereceréis.
Comprende, pues, hoy, que es el SEÑOR tu Dios el que pasa delante de ti como fuego consumidor. El los destruirá y los humillará delante de ti, para que los expulses y los destruyas rápidamente, tal como el SEÑOR te ha dicho.
Comprende, pues, que no {es} por tu justicia {que} el SEÑOR tu Dios te da esta buena tierra para poseerla, pues eres un pueblo de dura cerviz.
{y} que guardes los mandamientos del SEÑOR y sus estatutos que yo te ordeno hoy para tu bien?
Temerás al SEÑOR tu Dios; le servirás, te allegarás a El y {sólo} en su nombre jurarás.
{Cuando} tus padres descendieron a Egipto {eran} setenta personas, y ahora el SEÑOR tu Dios te ha hecho tan numeroso como las estrellas del cielo.
Y El dará hierba en tus campos para tu ganado, y comerás y te saciarás.
Y enseñadlas a vuestros hijos, hablando de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes.
Y acontecerá, que cuando el SEÑOR tu Dios te lleve a la tierra donde entras para poseerla, pondrás la bendición sobre el monte Gerizim y la maldición sobre el monte Ebal.
Estos son los estatutos y los decretos que observaréis cuidadosamente en la tierra que el SEÑOR, el Dios de tus padres, te ha dado para que la poseas todos los días que viváis sobre su suelo.
sino en el lugar que el SEÑOR escoja en una de tus tribus, allí ofrecerás tus holocaustos, y allí harás todo lo que yo te mando.
Sin embargo, podrás matar y comer carne dentro de todas tus puertas, conforme a tu deseo, según la bendición que el SEÑOR tu Dios te ha dado; el inmundo y el limpio podrán comerla, como {si fuera} de gacela o de ciervo.
No te es permitido comer dentro de tus ciudades el diezmo de tu grano, de tu mosto, o de tu aceite, ni de los primogénitos de tus vacas o de tus ovejas, ni ninguna de las ofrendas votivas que prometas, ni tus ofrendas voluntarias, ni la ofrenda alzada de tu mano,
sino que lo comerás en presencia del SEÑOR tu Dios en el lugar que el SEÑOR tu Dios escoja, tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y tu sierva, y el levita que vive dentro de tus puertas; y te alegrarás en presencia del SEÑOR tu Dios de toda la obra de tus manos.
Cuando el SEÑOR tu Dios haya extendido tus fronteras como te ha prometido, y tú digas: ``Comeré carne", porque deseas comer carne, {entonces} podrás comer carne, toda la que desees.
Si el lugar que el SEÑOR tu Dios escoge para poner su nombre está muy lejos de ti, entonces podrás matar de tus vacas y de tus ovejas que el SEÑOR te ha dado, como te he ordenado, y podrás comer dentro de tus ciudades todo lo que desees.
No la comerás, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, porque estarás haciendo lo que es justo delante del SEÑOR.
Escucha con cuidado todas estas palabras que te mando, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti para siempre, porque estarás haciendo lo que es bueno y justo delante del SEÑOR tu Dios.
Cuidarás de hacer todo lo que te mando; nada le añadirás ni le quitarás.
Si se levanta en medio de ti un profeta o soñador de sueños, y te anuncia una señal o un prodigio,
y la señal o el prodigio se cumple, acerca del cual él te había hablado, diciendo: ``Vamos en pos de otros dioses (a los cuales no has conocido) y sirvámosles",
no darás oído a las palabras de ese profeta o de ese soñador de sueños; porque el SEÑOR tu Dios te está probando para ver si amas al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma.
Pero a ese profeta o a ese soñador de sueños se le dará muerte, por cuanto ha aconsejado rebelión contra el SEÑOR tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto y te redimió de casa de servidumbre, para apartarte del camino en el cual el SEÑOR tu Dios te mandó andar. Así quitarás el mal de en medio de ti.
Si tu hermano, el hijo de tu madre, o tu hijo, o tu hija, o la mujer que amas, o tu amigo entrañable, te incita en secreto, diciendo: ``Vamos y sirvamos a otros dioses" (a quienes ni tú ni tus padres habéis conocido,
de los dioses de los pueblos que te rodean, cerca o lejos de ti, de un término de la tierra al otro),
Lo apedrearás hasta la muerte porque él trató de apartarte del SEÑOR tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre.
Si oyes decir {que} en alguna de las ciudades que el SEÑOR tu Dios te da para habitar,
Y nada de lo dedicado al anatema quedará en tu mano, para que el SEÑOR se aparte del ardor de su ira y sea misericordioso contigo, tenga compasión de ti y te multiplique, tal como El juró a tus padres,
porque escuchas la voz del SEÑOR tu Dios, guardando todos sus mandamientos que yo te ordeno hoy, haciendo lo que es justo ante los ojos del SEÑOR tu Dios.
Porque eres pueblo santo para el SEÑOR tu Dios; y el SEÑOR te ha escogido para que le seas un pueblo de su exclusiva posesión de entre los pueblos que están sobre la faz de la tierra.
Mas si el camino es tan largo para ti, que seas incapaz de llevar {el diezmo} por estar lejos el lugar donde el SEÑOR tu Dios escoja para poner allí su nombre, cuando el SEÑOR tu Dios te haya bendecido,
Y podrás gastar el dinero en todo lo que tu corazón apetezca: en vacas u ovejas, en vino o sidra, o en cualquier {otra} cosa que tu corazón desee; allí comerás en presencia del SEÑOR tu Dios, y te alegrarás tú y tu casa.
Y vendrá el levita, que no tiene parte ni herencia contigo, y el forastero, el huérfano y la viuda que habitan en tus ciudades, y comerán y se saciarán, para que el SEÑOR tu Dios te bendiga en toda obra que tu mano haga.
Y no habrá menesteroso entre vosotros, ya que el SEÑOR de cierto te bendecirá en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da por heredad para poseerla,
si sólo escuchas fielmente la voz del SEÑOR tu Dios, para guardar cuidadosamente todo este mandamiento que te ordeno hoy.
Pues el SEÑOR tu Dios te bendecirá como te ha prometido, y tú prestarás a muchas naciones, pero tú no tomarás prestado; y tendrás dominio sobre muchas naciones, pero ellas no tendrán dominio sobre ti.
Si hay un menesteroso contigo, uno de tus hermanos, en cualquiera de tus ciudades en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da, no endurecerás tu corazón, ni cerrarás tu mano a tu hermano pobre,
Cuídate de que no haya pensamiento perverso en tu corazón, diciendo: ``El séptimo año, el año de remisión, está cerca", y mires con malos ojos a tu hermano pobre, y no le des nada; porque él podrá clamar al SEÑOR contra ti, y esto te será pecado.
Con generosidad le darás, y no te dolerá el corazón cuando le des, ya que el SEÑOR tu Dios te bendecirá por esto en todo tu trabajo y en todo lo que emprendas.
Porque nunca faltarán pobres en tu tierra; por eso te ordeno, diciendo: ``Con liberalidad abrirás tu mano a tu hermano, al necesitado y al pobre en tu tierra."
Si un hermano tuyo, hebreo o hebrea, te es vendido, te servirá por seis años, pero al séptimo año lo pondrás en libertad.
Le abastecerás liberalmente de tu rebaño, de tu era y de tu lagar; le darás conforme te haya bendecido el SEÑOR tu Dios.
Y te acordarás que fuiste esclavo en la tierra de Egipto, y que el SEÑOR tu Dios te redimió; por eso te ordeno esto hoy.
Y sucederá que si él te dice: ``No me iré de tu lado", porque te ama a ti y a tu casa, pues le va bien contigo,
No te parezca duro cuando lo dejes en libertad, porque te ha dado seis años {con el} doble del servicio de un jornalero; y el SEÑOR tu Dios te bendecirá en todo lo que hagas.
Observarás el mes de Abib y celebrarás la Pascua al SEÑOR tu Dios, porque en el mes de Abib el SEÑOR tu Dios te sacó de Egipto de noche.
No podrás sacrificar la Pascua en ninguna de las ciudades que el SEÑOR tu Dios te da,
Entonces celebrarás la fiesta de las semanas al SEÑOR tu Dios con el tributo de una ofrenda voluntaria de tu mano, la cual darás según el SEÑOR tu Dios te haya bendecido.
Y te alegrarás delante del SEÑOR tu Dios, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, el levita que {habita} en tus ciudades, y el forastero, el huérfano y la viuda que están en medio de ti, en el lugar donde el SEÑOR tu Dios escoja para poner allí su nombre.
Y te acordarás de que tú fuiste esclavo en Egipto; cuídate de guardar estos estatutos.
Y te alegrarás en tu fiesta, tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y tu sierva, el levita y el forastero, el huérfano y la viuda que están en tus ciudades.
Siete días celebrarás fiesta al SEÑOR tu Dios en el lugar que escoja el SEÑOR; porque el SEÑOR tu Dios te bendecirá en todos tus productos y en toda la obra de tus manos; por tanto, estarás realmente alegre.
Cada hombre dará lo que pueda, de acuerdo con la bendición que el SEÑOR tu Dios te haya dado.
Nombrarás para ti jueces y oficiales en todas las ciudades que el SEÑOR tu Dios te da, según tus tribus, y ellos juzgarán al pueblo con justo juicio.
La justicia, {y sólo} la justicia buscarás, para que vivas y poseas la tierra que el SEÑOR tu Dios te da.
Si se encuentra en medio de ti, en cualquiera de las ciudades que el SEÑOR tu Dios te da, un hombre o una mujer que hace lo malo ante los ojos del SEÑOR tu Dios, violando su pacto,
y si te lo dicen y has oído {hablar} de ello, harás una investigación minuciosa. Y he aquí, si es verdad y es cierto el hecho que esta abominación ha sido cometida en Israel,
Si un caso es demasiado difícil para que puedas juzgar, {como} entre una clase de homicidio y otra, entre una clase de pleito y otra, o entre una clase de asalto y otra, siendo casos de litigio en tus puertas, te levantarás y subirás al lugar que el SEÑOR tu Dios escoja,
y vendrás al sacerdote levita o al juez que {oficie} en aquellos días, e inquirirás {de ellos}, y ellos te declararán el fallo del caso.
Y harás conforme a los términos de la sentencia que te declaren desde aquel lugar que el SEÑOR escoja; y cuidarás de observar todo lo que ellos te enseñen.
Según los términos de la ley que ellos te enseñen, y según la sentencia que te declaren, así harás; no te apartarás a la derecha ni a la izquierda de la palabra que ellos te declaren.
Cuando entres en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da, y la poseas y habites en ella, y digas: ``Pondré un rey sobre mí, como todas las naciones que me rodean",
Además, {el rey} no tendrá muchos caballos, ni hará que el pueblo vuelva a Egipto para tener muchos caballos, pues el SEÑOR te ha dicho: ``Jamás volveréis por ese camino."
Cuando entres en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da, no aprenderás a hacer las cosas abominables de esas naciones.
Porque esas naciones que vas a desalojar escuchan a los que practican hechicería y a los adivinos, pero a ti el SEÑOR tu Dios no te lo ha permitido.
Un profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te levantará el SEÑOR tu Dios; a él oiréis.
Cuando el SEÑOR tu Dios destruya las naciones cuya tierra el SEÑOR tu Dios te da, y las desalojes, y habites en sus ciudades y en sus casas,
te reservarás tres ciudades en medio de tu tierra que el SEÑOR tu Dios te da en posesión.
Prepararás los caminos, y dividirás en tres partes el territorio de tu tierra que el SEÑOR tu Dios te dé en posesión, para que huya allí todo homicida.
Por tanto, te mando, diciendo: Reservarás para ti tres ciudades.
Y si el SEÑOR tu Dios ensancha tu territorio, como ha jurado a tus padres, y te da toda la tierra que ha prometido dar a tus padres
(si guardas cuidadosamente todos estos mandamientos que te mando hoy, de amar al SEÑOR tu Dios y de andar siempre en sus caminos), entonces te añadirás tres ciudades más, además de estas tres.
Para que no se derrame sangre inocente en medio de tu tierra que el SEÑOR tu Dios te da por heredad, y no seas culpable de derramar sangre.
No tendrás piedad de él; mas limpiarás de Israel la sangre del inocente, para que te vaya bien.
No moverás los linderos de tu prójimo, fijados por los antepasados, en la herencia que recibirás en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da en posesión.
Resutados de la Búsqueda continuados...
- 1.Gé 3:10-Gé 33:10
- 2.Gé 33:11-Éx 32:21
- 3.Éx 32:34-Deuteronomio 6:15
- 4.Deuteronomio 6:17-Deuteronomio 19:14
- 5.Deuteronomio 20:1-Josué 2:14
- 6.Josué 7:10-1 Samuel 15:17
- 7.1 Samuel 15:18-2 Samuel 20:9
- 8.2 Samuel 20:21-2 Reyes 4:29
- 9.2 Reyes 5:6-Ester 7:2
- 10.Ester 9:12-Salmos 41:11
- 11.Salmos 42:5-Salmos 118:25
- 12.Salmos 118:28-Cantares 1:9
- 13.Cantares 6:13-Isaías 58:1
- 14.Isaías 58:7-Jeremías 33:3
- 15.Jeremías 34:3-Ezequiel 16:57
- 16.Ezequiel 16:61-Oseas 8:2
- 17.Oseas 9:1-Mateo 25:21
- 18.Mateo 25:23-Juan 1:50
- 19.Juan 3:3-1 Corintios 7:28
- 20.1 Corintios 8:10-Apocalipsis 21:9