'Tú' en la Biblia
de veinte años arriba, todos {los que pueden} salir a la guerra en Israel, tú y Aarón los contaréis por sus ejércitos.
Bajo las órdenes de Aarón y de sus hijos {estará} todo el ministerio de los hijos de los gersonitas, en relación con todas sus cargas y todo su trabajo; y tú les asignarás como responsabilidad todas sus cargas.
``Y el sacerdote hará que ella pronuncie juramento, y dirá a la mujer: `Si ningún hombre se ha acostado contigo, y si no te has desviado a la inmundicia, {estando} sujeta a tu marido, sé inmune a esta agua de amargura que trae maldición;
pero si te has desviado, {estando} sujeta a tu marido, y te has corrompido, y otro hombre que no es tu marido se ha llegado a ti',
(entonces el sacerdote hará que la mujer jure con el juramento de maldición, y el sacerdote dirá a la mujer): `El SEÑOR te haga maldición y juramento entre tu pueblo, haciendo el SEÑOR que tu muslo se enjute y tu vientre se hinche;
y esta agua que trae maldición entrará en tus entrañas, y hará que tu vientre se hinche y tu muslo se enjute.' Y la mujer dirá: `Amén, amén.'
Tomarán entonces un novillo con su ofrenda de cereal, flor de harina mezclada con aceite; y tú tomarás otro novillo como ofrenda por el pecado.
Y después de eso, los levitas podrán entrar para ministrar en la tienda de reunión, tú los purificarás y los presentarás como ofrenda mecida;
Después dijo {Moisés:} Te ruego que no nos dejes, puesto que tú sabes dónde debemos acampar en el desierto, y serás como ojos para nosotros.
Y sucedía que cuando el arca se ponía en marcha, Moisés decía: ¿Levántate, oh SEÑOR! y sean dispersados tus enemigos, huyan de tu presencia los que te aborrecen.
Entonces Moisés dijo al SEÑOR: ¿Por qué has tratado tan mal a tu siervo? ¿Y por qué no he hallado gracia ante tus ojos para que hayas puesto la carga de todo este pueblo sobre mí?
¿Acaso concebí yo a todo este pueblo? ¿Fui yo quien lo dio a luz para que me dijeras: ``Llévalo en tu seno, como la nodriza lleva al niño de pecho, a la tierra que yo juré a sus padres"?
Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: Reúneme a setenta hombres de los ancianos de Israel, a quienes tú conozcas como los ancianos del pueblo y a sus oficiales, y tráelos a la tienda de reunión y que permanezcan allí contigo.
Entonces descenderé y hablaré contigo allí, y tomaré del Espíritu que está sobre ti y {lo} pondré sobre ellos, y llevarán contigo la carga del pueblo para que no {la} lleves tú solo.
Pero Moisés dijo: El pueblo, en medio del cual estoy, {llega a} seiscientos mil de a pie; y tú has dicho: ``Les daré carne a fin de que coman, por todo un mes."
Tú mismo envía hombres a fin de que reconozcan la tierra de Canaán, que voy a dar a los hijos de Israel; enviarás un hombre de cada una de las tribus de sus padres, cada uno de ellos jefe entre ellos.
Pero Moisés respondió al SEÑOR: Entonces lo oirán los egipcios, pues tú sacaste a este pueblo de en medio de ellos con tu poder,
y se lo dirán a los habitantes de esta tierra. Estos han oído que tú, oh SEÑOR, estás en medio de tu pueblo, porque tú, oh SEÑOR, eres visto cara a cara cuando tu nube está sobre ellos; y tú vas delante de ellos de día en una columna de nube, y de noche en una columna de fuego.
Pero si tú destruyes a este pueblo como a un solo hombre, entonces las naciones que han oído de tu fama, dirán:
Pero ahora, yo te ruego que sea engrandecido el poder del Señor, tal como tú lo has declarado, diciendo:
Perdona, te ruego, la iniquidad de este pueblo conforme a la grandeza de tu misericordia, así como has perdonado a este pueblo desde Egipto hasta aquí.
Entonces el SEÑOR dijo: {Los} he perdonado según tu palabra;
``Tú prepararás vino para la libación, un cuarto de un hin con el holocausto o para el sacrificio, por cada cordero.
Por tanto, tú y toda tu compañía os habéis juntado contra el SEÑOR; pues en cuanto a Aarón, ¿quién es él para que murmuréis contra él?
En verdad, tú no nos has traído a una tierra que mana leche y miel, ni nos has dado herencia de campos y viñas. ¿Les sacarías los ojos a estos hombres? ¡No iremos!
Y dijo Moisés a Coré: Tú y toda tu compañía presentaos mañana delante del SEÑOR; tú, ellos y Aarón.
Cada uno de vosotros tome su incensario y ponga incienso en él, y cada uno de vosotros traiga su incensario delante del SEÑOR, doscientos cincuenta incensarios; tú también, y Aarón, cada uno {traiga} su incensario.
Y Moisés le dijo a Aarón: Toma tu incensario y pon en él fuego del altar, y echa incienso {en él;} tráelo entonces pronto a la congregación y haz expiación por ellos, porque la ira ha salido de parte del SEÑOR. ¡La plaga ha comenzado!
Entonces el SEÑOR dijo a Aarón: Tú y tus hijos, y tu casa paterna contigo, llevaréis la culpa en relación con el santuario; y tú y tus hijos contigo llevaréis la culpa en relación con vuestro sacerdocio.
Mas también a tus hermanos, la tribu de Leví, la tribu de tu padre, haz que se acerquen para que se junten contigo y te sirvan, mientras que tú y tus hijos contigo estéis delante de la tienda del testimonio.
Y atenderán a lo que tú ordenes y a las obligaciones de toda la tienda, pero no se acercarán a los utensilios del santuario y del altar, para que no mueran, tanto ellos como vosotros.
Pero tú y tus hijos contigo atenderéis a vuestro sacerdocio en todo lo concerniente al altar y a {lo que está} dentro del velo, y ministraréis. Os doy el sacerdocio como un regalo para servir, pero el extraño que se acerque morirá.
Esto también {será} para ti: la ofrenda de sus dádivas, todas las ofrendas mecidas de los hijos de Israel; las he dado a ti, a tus hijos y a tus hijas contigo, como porción perpetua. Todo el que esté limpio en tu casa podrá comerla.
Los primeros frutos maduros de todo lo que hay en su tierra, que traigan al SEÑOR, serán tuyos. Todo el que esté limpio en tu casa podrá comer de ello.
En cuanto a su redención, de un mes los redimirás, según tu valuación, por cinco siclos en plata, según el siclo del santuario que es de veinte geras.
Todas las ofrendas de lo que es santo, que los hijos de Israel ofrezcan al SEÑOR, las he dado a ti, a tus hijos y a tus hijas contigo, como porción perpetua; es un pacto permanente delante del SEÑOR para ti y para tu descendencia contigo.
Entonces el SEÑOR dijo a Aarón: No tendrás heredad en su tierra, ni tendrás posesión entre ellos; yo soy tu porción y tu herencia entre los hijos de Israel.
Toma la vara y reúne a la congregación, tú y tu hermano Aarón, y hablad a la peña a la vista de ellos, para que {la peña} dé su agua. Así sacarás para ellos agua de la peña, y beban la congregación y sus animales.
Moisés envió mensajeros desde Cades al rey de Edom, {diciendo:} Así ha dicho tu hermano Israel: ``Tú sabes todas las dificultades que nos han sobrevenido;
``Pero cuando clamamos al SEÑOR, El oyó nuestra voz y envió un ángel y nos sacó de Egipto. Ahora, mira, estamos en Cades, un pueblo de la frontera de tu territorio.
``Permítenos, por favor, pasar por tu tierra. No pasaremos por campo {labrado} ni por viñedo; ni siquiera beberemos agua de pozo. Iremos por el camino real, sin volver a la derecha ni a la izquierda hasta que crucemos tu territorio."
Pero, Edom le respondió: Tú no pasarás por mi {tierra;} para que no salga yo con espada a tu encuentro.
Entonces los hijos de Israel le contestaron: Iremos por el camino {principal,} y si yo y mi ganado bebemos de tu agua, entonces {te} pagaré su precio. Solamente déjame pasar a pie, nada {más}.
Pero él dijo: Tú no pasarás. Y Edom salió a su encuentro con mucha gente y con mano fuerte.
Déjame pasar por tu tierra. No nos desviaremos, ni por campos ni por viñedos, ni beberemos agua de pozo. Iremos por el camino real hasta que hayamos cruzado tus fronteras.
Pero el SEÑOR dijo a Moisés: No le tengas miedo porque lo he entregado en tu mano, y a todo su pueblo y a su tierra; y harás con él como hiciste con Sehón, rey de los amorreos, el que habitaba en Hesbón.
Ven ahora, te ruego, y maldíceme a este pueblo porque es demasiado poderoso para mí; quizá pueda derrotarlos y echarlos de la tierra. Porque yo sé que a quien tú bendices es bendecido, y a quien tú maldices es maldecido.
Y el asna dijo a Balaam: ¿No soy yo tu asna, y sobre mí has cabalgado toda tu vida hasta hoy? ¿He tenido la costumbre de portarme así contigo? Y él dijo: No.
y el ángel del SEÑOR le dijo: ¿Por qué has golpeado a tu asna estas tres veces? Mira, yo he salido como adversario, porque tu camino me era contrario;
Y Balaam dijo al ángel del SEÑOR: He pecado, pues no sabía que tú estabas en el camino para enfrentarte a mí. Pero ahora, si te desagrada, me volveré.
Entonces Balaam dijo a Balac: Ponte junto a tu holocausto, y yo iré; quizá el SEÑOR venga a mi encuentro, y lo que me manifieste te lo haré saber. Y se fue a un cerro pelado.
Y él dijo a Balac: Ponte aquí junto a tu holocausto, mientras voy allá a encontrarme {con el S{EÑOR.}}
Ahora pues, huye a tu lugar. Yo dije que te colmaría de honores, pero mira, el SEÑOR te ha privado de honores.
Ahora, mira, me voy a mi pueblo; {pero} ven, {y} te advertiré lo que este pueblo hará a tu pueblo en los días venideros.
Después vio al ceneo, y continuó su profecía, y dijo: Perdurable es tu morada, y en la peña está puesto tu nido.
Y cuando la hayas visto, tú también te reunirás a tu pueblo, como se reunió tu hermano Aarón.
Y el SEÑOR dijo a Moisés: Toma a Josué, hijo de Nun, hombre en quien está el Espíritu, y pon tu mano sobre él;
Y pondrás sobre él parte de tu dignidad a fin de que {le} obedezca toda la congregación de los hijos de Israel.
Toma venganza completa sobre los madianitas por los hijos de Israel; después serás reunido a tu pueblo.
Cuenta el botín que fue tomado tanto de hombres como de animales; tú con el sacerdote Eleazar, y los jefes de {las casas} paternas de la congregación,