'Uno' en la Biblia
Juan les respondió, diciendo: Yo bautizo en agua, {pero} entre vosotros está Uno a quien no conocéis.
Uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron {a Jesús} era Andrés, hermano de Simón Pedro.
Porque en este {caso} el dicho es verdadero: ``Uno es el que siembra y otro el que siega."
Felipe le respondió: Doscientos denarios de pan no les bastarán para que cada uno reciba un pedazo.
Uno de sus discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro, dijo* a Jesús:
Jesús les respondió: ¿No os escogí yo a vosotros, los doce, y {sin embargo} uno de vosotros es un diablo?
Y El se refería a Judas, {hijo} de Simón Iscariote, porque éste, uno de los doce, le iba a entregar.
Nicodemo, el que había venido a Jesús antes, y que era uno de ellos, les dijo*:
Pero al oír ellos {esto,} se fueron retirando uno a uno comenzando por los de mayor edad, y dejaron solo {a Jesús} y a la mujer que estaba en medio.
Pero yo no busco mi gloria; hay Uno que {la} busca, y juzga.
Pero uno de ellos, Caifás, que era sumo sacerdote ese año, les dijo: Vosotros no sabéis nada,
y no sólo por la nación, sino también para reunir en uno a los hijos de Dios que están esparcidos.
Y le hicieron una cena allí, y Marta servía; pero Lázaro era uno de los que estaban {a la mesa} con El.
Y Judas Iscariote, uno de sus discípulos, el que le iba a entregar, dijo*:
Habiendo dicho Jesús esto, se angustió en espíritu, y testificó y dijo: En verdad, en verdad os digo que uno de vosotros me entregará.
Uno de sus discípulos, el que Jesús amaba, estaba {a la mesa} reclinado en el pecho de Jesús.
Nadie tiene un amor mayor que éste: que uno dé su vida por sus amigos.
Mirad, la hora viene, y {ya} ha llegado, en que seréis esparcidos, cada uno por su lado, y me dejaréis solo; y {sin embargo} no estoy solo, porque el Padre está conmigo.
Ya no estoy en el mundo, {pero} ellos sí están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, guárdalos en tu nombre, el {nombre} que me has dado, para que sean uno, así como nosotros.
para que todos sean uno. Como tú, oh Padre, {estás} en mí y yo en ti, que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste.
La gloria que me diste les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno:
Entonces la criada que cuidaba la puerta dijo* a Pedro: ¿No eres tú también {uno} de los discípulos de este hombre? {Y} él dijo*: No lo soy.
Cuando dijo esto, uno de los alguaciles que estaba cerca, dio una bofetada a Jesús, diciendo: ¿Así respondes al sumo sacerdote?
Simón Pedro estaba de pie, calentándose; entonces le dijeron: ¿No eres tú también {uno} de sus discípulos? El lo negó y dijo: No lo soy.
Uno de los siervos del sumo sacerdote, que era pariente de aquel a quien Pedro le había cortado la oreja, dijo*: ¿No te vi yo en el huerto con El?
Pero es costumbre entre vosotros que os suelte a uno en la Pascua. ¿Queréis, pues, que os suelte al Rey de los judíos?
donde le crucificaron, y con El a otros dos, uno a cada lado y Jesús en medio.
pero uno de los soldados le traspasó el costado con una lanza, y al momento salió sangre y agua.
y vio* dos ángeles vestidos de blanco, sentados donde había estado el cuerpo de Jesús, uno a la cabecera y otro a los pies.
Tomás, uno de los doce, llamado el Dídimo, no estaba con ellos cuando Jesús vino.