'Unos' en la Biblia
Y había allí seis tinajas de piedra, puestas para ser usadas en el rito de la purificación de los Judíos; en cada una cabían dos o tres cántaros (unos 100 litros).
" ¿Cómo pueden creer, cuando reciben gloria (honor) los unos de los otros, y no buscan la gloria que viene del Dios único?
``Hagan que la gente se siente," dijo Jesús. Y había mucha hierba en aquel lugar; así que se sentaron. El número de los hombres era de unos cinco mil.
Cuando habían remado unos cuatro o cinco kilómetros, vieron a Jesús caminando sobre el mar y que se acercaba a la barca, y se asustaron.
Y había mucha murmuración entre la gente acerca de El. Unos decían: ``El es bueno." Otros decían: ``No, al contrario, extravía a la gente."
``El es," decían unos. ``No, pero se parece a él," decían otros. El decía: ``Yo soy."
Entonces buscaban a Jesús, y estando ellos en el templo, se decían unos a otros: `` ¿Qué les parece? ¿Que vendrá a la fiesta o no?"
Entonces María, tomando unos 300 gramos de perfume de nardo puro que costaba mucho, ungió los pies de Jesús, y se los secó con los cabellos, y la casa se llenó con la fragancia del perfume.
Entonces los Fariseos se decían unos a otros: `` ¿Ven que ustedes no consiguen nada? Miren, {todo} el mundo se ha ido tras El."
Había unos Griegos entre los que subían a adorar en la fiesta;
"Pues si Yo, el Señor y el Maestro, les lavé los pies, ustedes también deben lavarse los pies unos a otros.
Los discípulos se miraban unos a otros, y estaban perplejos {sin saber} de quién hablaba.
"Un mandamiento nuevo les doy: `que se amen los unos a los otros;' que como Yo los he amado, así también se amen los unos a los otros.
"En esto conocerán todos que son Mis discípulos, si se tienen amor los unos a los otros."
"Este es Mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, así como Yo los he amado.
"Esto les mando: que se amen los unos a los otros.
Entonces {algunos} de Sus discípulos se decían unos a otros: `` ¿Qué es esto que nos dice: `Un poco {más,} y no Me verán, y de nuevo un poco, y Me verán' y `Porque Yo voy al Padre'?"
Por tanto, se dijeron unos a otros: ``No la rompamos; sino echemos suertes sobre ella, {para ver} de quién será;" para que se cumpliera la Escritura: ``REPARTIERON ENTRE SI MIS VESTIDOS, Y SOBRE MI ROPA ECHARON SUERTES."
Pero los otros discípulos vinieron en la barca, porque no estaban lejos de tierra, sino a unos 100 metros, arrastrando la red {llena} de peces.