'Velad' en la Biblia
Velad pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.
Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del hombre ha de venir.
Entonces Jesús les dice: Mi alma está muy triste hasta la muerte; quedaos aquí, y velad conmigo.
Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está presto, mas la carne débil.
Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuándo será el tiempo.
Velad pues, porque no sabéis cuándo el Señor de la casa vendrá; si a la tarde, o a la medianoche, o al canto del gallo, o a la mañana;
Y las cosas que a vosotros digo, a todos las digo: Velad.
Y les dice: Está muy triste mi alma, hasta la muerte; esperad aquí y velad.
Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad es presto, mas la carne enferma.
Velad pues, orando en todo tiempo, que seáis tenidos por dignos de evitar todas estas cosas que han de venir, y de estar en pie delante del Hijo del hombre.
Por tanto, velad, acordándoos que por tres años de noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada uno de vosotros.
Velad debidamente, y no pequéis; porque algunos no conocen a Dios; para vergüenza vuestra hablo.
Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos.
Con toda oración y súplica orad en todo tiempo en el Espíritu, y así, velad con toda perseverancia y súplica por todos los santos;
Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, templados, y velad en oración.
Sed templados, y velad; porque vuestro adversario el diablo, cual león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;