Éxodo 19:18
Y todo el monte de Sinaí humeaba, porque Jehová había descendido sobre él en fuego: y el humo de él subía como el humo de un horno, y todo el monte se estremeció en gran manera.
Salmos 144:5
Oh Jehová, inclina tus cielos y desciende: Toca los montes, y humeen.
Éxodo 24:17
Y el parecer de la gloria de Jehová era como un fuego abrasador en la cumbre del monte, á los ojos de los hijos de Israel.
Jueces 5:5
Los montes se derritieron delante de Jehová, Aqueste Sinaí, delante de Jehová Dios de Israel.
Apocalipsis 15:8
Y fué el templo lleno de humo por la majestad de Dios, y por su potencia; y ninguno podía entrar en el templo, hasta que fuesen consumadas las siete plagas de los siete ángeles.
Génesis 19:28
Y miró hacia Sodoma y Gomorra, y hacia toda la tierra de aquella llanura miró; y he aquí que el humo subía de la tierra como el humo de un horno.
Éxodo 3:2
Y apareciósele el Angel de Jehová en una llama de fuego en medio de una zarza: y él miró, y vió que la zarza ardía en fuego, y la zarza no se consumía.
Salmos 104:32
El cual mira á la tierra, y ella tiembla; Toca los montes, y humean.
Jeremías 4:24
Miré los montes, y he aquí que temblaban, y todos los collados fueron destruídos.
Génesis 15:17
Y sucedió que puesto el sol, y ya obscurecido, dejóse ver un horno humeando, y una antorcha de fuego que pasó por entre los animales divididos.
2 Crónicas 7:1-3
Y COMO Salomón acabó de orar, el fuego descendió de los cielos, y consumió el holocausto y las víctimas; y la gloria de Jehová hinchió la casa.
Salmos 68:7-8
Oh Dios, cuando tú saliste delante de tu pueblo, Cuando anduviste por el desierto, (Selah,)
Isaías 6:4
Y los quiciales de las puestas se estremecieron con la voz del que clamaba, y la casa se hinchió de humo.
Hebreos 12:26
La voz del cual entonces conmovió la tierra; mas ahora ha denunciado, diciendo: Aun una vez, y yo conmoveré no solamente la tierra, mas aun el cielo.
Éxodo 19:13
No le tocará mano, mas será apedreado ó asaeteado; sea animal ó sea hombre, no vivirá. En habiendo sonado largamente la bocina, subirán al monte.
Éxodo 20:18
Todo el pueblo consideraba las voces, y las llamas, y el sonido de la bocina, y el monte que humeaba: y viéndolo el pueblo, temblaron, y pusiéronse de lejos.
Deuteronomio 4:11-12
Y os llegasteis, y os pusisteis al pie del monte; y el monte ardía en fuego hasta en medio de los cielos con tinieblas, nube, y oscuridad.
Deuteronomio 5:22
Estas palabras habló Jehová á toda vuestra congregación en el monte, de en medio del fuego, de la nube y de la oscuridad, á gran voz: y no añadió más. Y escribiólas en dos tablas de piedra, las cuales me dió á mí.
Deuteronomio 33:2
Y dijo: Jehová vino de Sinaí, Y de Seir les esclareció; Resplandeció del monte de Parán, Y vino con diez mil santos: A su diestra la ley de fuego para ellos.
1 Reyes 19:11-12
Y él le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová: mas Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto: mas
Salmos 77:18
Anduvo en derredor el sonido de tus truenos; Los relámpagos alumbraron el mundo; Estremecióse y tembló la tierra.
Salmos 114:7
A la presencia del Señor tiembla la tierra, A la presencia del Dios de Jacob;
Nahúm 1:5-6
Los montes tiemblan de él, y los collados se deslíen; y la tierra se abrasa á su presencia, y el mundo, y todos los que en él habitan.
Zacarías 14:5
Y huiréis al valle de los montes; porque el valle de los montes llegará hasta Hasal; y huiréis de la manera que huisteis por causa del terremoto en los días de Uzzías, rey de Judá: y vendrá Jehová mi Dios, y con él todos los santos.
Mateo 24:7
Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestilencias, y hambres, y terremotos por los lugares.
2 Tesalonicenses 1:8
En llama de fuego, para dar el pago á los que no conocieron á Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo;
Hebreos 12:18
Porque no os habéis llegado al monte que se podía tocar, y al fuego encendido, y al turbión, y á la oscuridad, y á la tempestad,
2 Pedro 3:10
Mas el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella están serán quemadas.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido