11 Versículo de la Biblia sobre Aflicciones severas
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Que en grande prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su bondad.
Echásteme en el profundo, en medio de los mares, Y rodeóme la corriente; Todas tus ondas y tus olas pasaron sobre mí.
Empero ahora me ha fatigado: Has tú asolado toda mi compañía. Tú me has arrugado; testigo es mi flacura, Que se levanta contra mí para testificar en mi rostro. Su furor me destrizó, y me ha sido contrario: Crujió sus dientes contra mí; Contra mí aguzó sus ojos mi enemigo.Leer más.
Abrieron contra mí su boca; Hirieron mis mejillas con afrenta; Contra mí se juntaron todos. Hame entregado Dios al mentiroso, Y en las manos de los impíos me hizo estremecer. Próspero estaba, y desmenuzóme: Y arrebatóme por la cerviz, y despedazóme, Y púsome por blanco suyo. Cercáronme sus flecheros, Partió mis riñones, y no perdonó: Mi hiel derramó por tierra. Quebrantóme de quebranto sobre quebranto; Corrió contra mí como un gigante. Yo cosí saco sobre mi piel, Y cargué mi cabeza de polvo. Mi rostro está enlodado con lloro, Y mis párpados entenebrecidos:
Un abismo llama á otro á la voz de tus canales: Todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí.
Hombres hiciste subir sobre nuestra cabeza; Entramos en fuego y en aguas, Y sacástenos á hartura.
Y yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han venido de grande tribulación, y han lavado sus ropas, y las han blanqueado en la sangre del Cordero.
Empero á vosotros Jehová os tomó, y os ha sacado del horno de hierro, de Egipto, para que le seáis por pueblo de heredad como en este día.
Los que moraban en tinieblas y sombra de muerte, Aprisionados en aflicción y en hierros;
Dísteles á comer pan de lágrimas, Y dísteles á beber lágrimas en gran abundancia.
Porque las saetas del Todopoderoso están en mí, Cuyo veneno bebe mi espíritu; Y terrores de Dios me combaten.
Porque tus saetas descendieron á mí, Y sobre mí ha caído tu mano.