20 Versículo de la Biblia sobre las enfermedades mentales
Versículos Más Relevantes
Por nada estéis afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de Dios. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús.
Y se extendió su fama por toda Siria; y traían a El todos los que estaban enfermos, afectados con diversas enfermedades y dolores, endemoniados, epilépticos y paralíticos; y El los sanaba.
Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
No temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia.
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tenéis tribulación; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Cuando llegaron a la multitud, se le acercó un hombre, que arrodillándose delante de El, dijo: Señor, ten misericordia de mi hijo, porque es epiléptico y sufre terriblemente, porque muchas veces cae en el fuego y muchas en el agua. Y lo traje a tus discípulos y ellos no pudieron curarlo.Leer más.
Respondiendo Jesús, dijo: ¿Oh generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo estaré con vosotros? ¿Hasta cuándo os tendré que soportar? Traédmelo acá. Y Jesús lo reprendió y el demonio salió de él, y el muchacho quedó curado desde aquel momento. Entonces los discípulos, llegándose a Jesús en privado, dijeron: ¿Por qué nosotros no pudimos expulsarlo? Y El les dijo*: Por vuestra poca fe; porque en verdad os digo que si tenéis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: ``Pásate de aquí allá", y se pasará; y nada os será imposible.
Y El me ha dicho: Te basta mi gracia, pues mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, muy gustosamente me gloriaré más bien en mis debilidades, para que el poder de Cristo more en mí.
Te herirá el SEÑOR con locura, con ceguera y con turbación de corazón;
Sucedía que cuando el espíritu {malo} de parte de Dios venía a Saúl, David tomaba el arpa, {la} tocaba con su mano, y Saúl se calmaba y se ponía bien, y el espíritu malo se apartaba de él.
El Espíritu del SEÑOR se apartó de Saúl, y un espíritu malo de parte del SEÑOR le atormentaba.
Y vino un espíritu malo {de parte} del SEÑOR sobre Saúl; y estaba él sentado en su casa con su lanza en la mano mientras David tocaba {el arpa}.
estoy encorvado y abatido en gran manera, {y} ando sombrío todo el día.
El SEÑOR lo sostendrá en su lecho de enfermo; en su enfermedad, restaurarás su salud.
Ahora yo, Nabucodonosor, alabo, ensalzo y glorifico al Rey del cielo, porque sus obras son todas verdaderas y justos sus caminos; El puede humillar a los que caminan con soberbia.
Estoy entumecido y abatido en gran manera; gimo a causa de la agitación de mi corazón.
¿Ay de mí, por mi quebranto! Mi herida es incurable. Mas yo me dije: De cierto esta es una enfermedad, y debo soportarla.
El que engendra un necio, para su tristeza {lo engendra,} y el padre del necio no tiene alegría.
Y aconteció al día siguiente que un espíritu malo {de parte} de Dios se apoderó de Saúl, y éste deliraba en medio de la casa, mientras David tocaba {el arpa} con su mano como de costumbre. Saúl {tenía} la lanza en la mano,
salvo que el Espíritu Santo solemnemente me da testimonio en cada ciudad, diciendo que me esperan cadenas y aflicciones.