43 Versículo de la Biblia sobre juzgar las acciones ajenas
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No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados.
Porque con el juicio con que juzguéis, seréis juzgados; y con la medida con que midáis, se os medirá.
¿Y piensas esto, oh hombre, tú que condenas a los que practican tales cosas y haces lo mismo, que escaparás al juicio de Dios?
Pues ¿por qué he de juzgar yo a los de afuera? ¿No juzgáis vosotros a los que están dentro {de la iglesia}?
El que come no menosprecie al que no come, y el que no come no juzgue al que come, porque Dios lo ha aceptado.
Por lo cual no tienes excusa, oh hombre, quienquiera {que seas tú} que juzgas, pues al juzgar a otro, a ti mismo te condenas, porque tú que juzgas practicas las mismas cosas.
``No mostraréis parcialidad en el juicio; lo mismo oiréis al pequeño que al grande. No tendréis temor del hombre, porque el juicio es de Dios. Y el caso que sea muy difícil para vosotros, me {lo} traeréis a mí, y yo lo oiré."
Pero si nos juzgáramos a nosotros mismos, no seríamos juzgados.
{Sólo} hay un dador de la ley y juez, que es poderoso para salvar y para destruir; pero tú, ¿quién eres que juzgas a tu prójimo?
En cambio, el que es espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado por nadie.
En cuanto a mí, es de poca importancia que yo sea juzgado por vosotros, o por {cualquier} tribunal humano; de hecho, ni aun yo me juzgo a mí mismo.
La fe que tú tienes, ten{la} conforme a tu propia convicción delante de Dios. Dichoso el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba.
¿Quién eres tú para juzgar al criado de otro? Para su propio amo está en pie o cae, y en pie se mantendrá, porque poderoso es el Señor para sostenerlo en pie.
Los pecados de algunos hombres son ya evidentes, yendo delante de ellos al juicio; mas a otros, {sus pecados} los siguen.
De modo que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí mismo.
Pues todos los que han pecado sin la ley, sin la ley también perecerán; y todos los que han pecado bajo la ley, por la ley serán juzgados;
¿De ningún modo! Pues de otra manera, ¿cómo juzgaría Dios al mundo?
Y sabemos que el juicio de Dios justamente cae sobre los que practican tales cosas.
Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie delante del trono, y {los} libros fueron abiertos; y otro libro fue abierto, que es {el libro} de la vida, y los muertos fueron juzgados por lo que estaba escrito en los libros, según sus obras.
Porque Dios traerá toda obra a juicio, junto con todo lo oculto, sea bueno o sea malo.
Por tanto, os juzgaré, a cada uno conforme a su conducta, oh casa de Israel --declara el Señor DIOS--. Arrepentíos y apartaos de todas vuestras transgresiones, para que la iniquidad no os sea piedra de tropiezo.
¿O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? Y si el mundo es juzgado por vosotros, ¿no sois competentes para {juzgar} los casos más triviales?
Porque todos nosotros debemos comparecer ante el tribunal de Cristo, para que cada uno sea recompensado por sus hechos estando en el cuerpo, de acuerdo con lo que hizo, sea bueno o sea malo.
Por consiguiente, ya no nos juzguemos los unos a los otros, sino más bien decidid esto: no poner obstáculo o piedra de tropiezo al hermano.
Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado.
El que me rechaza y no recibe mis palabras, tiene quien lo juzgue; la palabra que he hablado, ésa lo juzgará en el día final.
Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos {de vosotros}, sabiendo que recibiremos un juicio más severo.
Por tanto, no juzguéis antes de tiempo, {sino esperad} hasta que el Señor venga, el cual sacará a la luz las cosas ocultas en las tinieblas y también pondrá de manifiesto los designios de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de parte de Dios.
Salmo de Asaf.Dios ocupa su lugar en su congregación; El juzga en medio de los jueces.
Porque ni aun el Padre juzga a nadie, sino que todo juicio se lo ha confiado al Hijo,
Quiero decir, no vuestra conciencia, sino la del otro; pues ¿por qué ha de ser juzgada mi libertad por la conciencia ajena?
Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El.
Como el agua {refleja} el rostro, así el corazón del hombre {refleja} al hombre.
Pero que cada uno examine su propia obra, y entonces tendrá {motivo para} gloriarse solamente con respecto a sí mismo, y no con respecto a otro.
Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O también, tú, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Dios.
Una vez los árboles fueron a ungir un rey sobre ellos, y dijeron al olivo: ``Reina sobre nosotros."
porque El ha establecido un día en el cual juzgará al mundo en justicia, por medio de un Hombre a quien ha designado, habiendo presentado pruebas a todos los hombres al resucitarle de entre los muertos.
Mas tened cuidado, no sea que esta vuestra libertad de alguna manera se convierta en piedra de tropiezo para el débil.
Pero alguno dirá: Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.
Todos los caminos del hombre son limpios ante sus propios ojos, pero el SEÑOR sondea los espíritus.
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