'Entonces' en la Biblia
- 1.Gé 2:21-Gé 38:18
- 2.Gé 38:22-Éx 16:6
- 3.Éx 16:15-Números 14:5
- 4.Números 14:10-Josué 5:14
- 5.Josué 6:5-Rut 1:6
- 6.Rut 2:8-1 Samuel 30:22
- 7.1 Samuel 31:4-1 Reyes 1:49
- 8.1 Reyes 2:13-2 Reyes 5:13
- 9.2 Reyes 5:14-2 Crónicas 7:8
- 10.2 Crónicas 7:14-Job 13:20
- 11.Job 14:15-Jeremías 37:6
- 12.Jeremías 37:21-Mateo 9:1
- 13.Mateo 9:6-Mateo 27:26
- 14.Mateo 27:27-Lucas 14:4
- 15.Lucas 14:9-Juan 9:25
- 16.Juan 10:31-Hechos 10:21
- 17.Hechos 10:23-Apocalipsis 16:18
Entonces llamarás, y yo te responderé, a la obra de tus manos desearás.
Porque entonces te deleitarás en el Omnipotente, y alzarás a Dios tu rostro.
Entonces la vio él, y la tasó; la preparó y también la inquirió.
Cuando esperaba el bien, entonces me vino el mal; y cuando esperaba la luz, vino la oscuridad.
Entonces Eliú hijo de Baraquel, buzita, de la familia de Ram, se enojó con furor contra Job; se enojó con furor, por cuanto se justificaba a sí mismo más que a Dios.
entonces revela al oído de los hombres, y les sella su instrucción;
Entonces respondió el SEÑOR a Job desde el torbellino, y dijo:
Entonces hablará a ellos con su furor, y con su ira los conturbará.
Detén asimismo a tu siervo de las soberbias; que no se enseñoreen de mí; entonces seré perfecto, y estaré limpio de gran rebelión.
Entonces dije: He aquí, vengo; en el envoltorio del libro está escrito de mí:
Entonces te agradarán los sacrificios de justicia, el holocausto u ofrenda del todo quemada; entonces ofrecerán sobre tu altar becerros.
Entonces serán vueltos atrás mis enemigos el día que yo clamare a ti; en esto conozco que Dios es por mí.
Entonces dirá el hombre: Ciertamente hay fruto para el justo; ciertamente hay Dios que juzga en la tierra.
Entonces la tierra dará su fruto; nos bendecirá Dios, el Dios nuestro.
Se han aumentado más que los cabellos de mi cabeza los que me aborrecen sin causa; se han fortalecido mis enemigos, los que me destruyen sin por qué; entonces devolví lo que no hurté.
Hasta que venga al santuario de Dios, entonces entenderé la postrimería de ellos.
Si los mataba, entonces le buscaban; y se convertían, y buscaban a Dios de mañana.
Entonces despertó el Señor a la manera del que ha dormido, como un valiente que grita a causa del vino:
Entonces hablaste en visión a tu santo, y dijiste: Yo he puesto el socorro sobre uno que es valiente; he ensalzado un escogido de mi pueblo.
entonces visitaré con vara su rebelión, y con azotes sus iniquidades.
Firme es tu trono desde entonces; tú eres eternalmente.
Regocíjese el campo, y todo lo que en él está; entonces exultarán todos los árboles del bosque,
Entonces temerán los gentiles el Nombre del SEÑOR, y todos los reyes de la tierra tu gloria;
Entonces creyeron a sus palabras, y cantaron su alabanza.
Entonces se puso Finees, y juzgó; y se detuvo la mortandad.
Entonces invoqué el Nombre del SEÑOR, diciendo: Libra ahora, oh SEÑOR, mi alma.
Entonces no sería yo avergonzado, cuando mirara en todos tus mandamientos.
vivos nos habrían entonces tragado, cuando se encendió su furor contra nosotros.
Entonces nos habrían inundado las aguas; sobre nuestra alma hubiera pasado el torrente;
hubieran entonces pasado sobre nuestra alma las aguas soberbias.
Entonces nuestra boca se llenará de risa, y nuestra lengua de alabanza; entonces dirán entre los gentiles: Grandes cosas ha hecho el SEÑOR con éstos.
Entonces me llamarán, y no responderé; me buscarán de mañana, y no me hallarán;
entonces entenderás el temor del SEÑOR, y hallarás el conocimiento de Dios.
Entonces entenderás justicia, juicio, y equidad, y todo buen camino.
Entonces andarás por tu camino confiadamente, y tu pie no tropezará.
El SEÑOR me poseyó en el principio de su camino, desde entonces, antes de sus obras.
Entonces dije yo en mi corazón: Como sucederá al loco me sucederá también a mí. ¿Para qué pues he trabajado hasta ahora por hacerme más sabio? Y dije en mi corazón, que también esto era vanidad.
Entonces vi también que los impíos sepultados vinieron aún en memoria; mas los que frecuentaban el lugar santo, fueron luego puestos en olvido en la ciudad donde con rectitud habían obrado. Esto también es vanidad.
Entonces dije yo: Mejor es la sabiduría que la fortaleza; aunque la ciencia del pobre sea menospreciada, y no sean escuchadas sus palabras.
Si se embotare el hierro, y su filo no fuere amolado, hay que añadir entonces más fuerza; pero excede la bondad de la sabiduría.
y restituiré tus jueces como al principio, y tus consejeros como de primero; entonces te llamarán Ciudad de justicia, Ciudad fiel.
Entonces os avergonzarán los árboles que amasteis, y os afrentarán los bosques que escogisteis.
Y bramará sobre él en aquel día como bramido del mar; entonces mirará hacia la tierra, y he aquí tinieblas de tribulación; y en sus cielos se oscurecerá la luz.
Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; que siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, el SEÑOR de los ejércitos.
Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí.
Entonces dijo: Anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis.
Entonces dijo el SEÑOR a Isaías: Sal ahora al encuentro de Acaz, tú, y Sear-jasub tu hijo, al extremo del conducto de la pesquera de arriba, en el camino de la heredad del Lavador,
Dijo entonces Isaías: Oíd ahora, casa de David. ¿No os basta ser molestos a los hombres, sino que también lo seáis a mi Dios?
Entonces él será por santuario; y a las dos casas de Israel por piedra para tropezar, y por tropezadero para caer; por lazo, y por red al morador de Jerusalén.
Entonces pasarán por esta tierra fatigados y hambrientos. Y acontecerá que teniendo hambre, se enojarán y maldecirán a su rey y a su Dios. Y levantando el rostro en alto,
entonces levantarás esta parábola sobre el rey de Babilonia, y dirás: ¡Cómo cesó el opresor, cómo cesó la ciudad codiciosa del oro!
Y acaecerá, que cuando Moab pareciere que está cansado sobre los lugares altos, entonces vendrá a su Santuario a orar, y no podrá.
Porque antes de la siega, cuando el fruto fuere perfecto, y pasada la flor, los frutos fueren maduros, entonces podará con podaderas las ramitas; y cortará y quitará las ramas.
Entonces serás humillada; hablarás desde la tierra, y tu habla saldrá del polvo; y será tu voz de la tierra, como voz de espiritista; y tu habla susurrará desde el polvo.
Entonces los humildes crecerán en alegría en el SEÑOR; y los pobres de los hombres se gozarán en el Santo de Israel.
Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él; para que no echéis a la mano derecha, y para que no echéis a la mano izquierda.
Entonces profanarás la cobertura de tus esculturas de plata, y la protección de tu vaciadizo de oro; las apartarás como trapo de menstruo; ¡Sal fuera! les dirás.
Entonces dará lluvia a tu sementera, cuando sembrares la tierra; y pan del fruto de la tierra; y será fértil y grueso; y tus ganados en aquel tiempo serán apacentados en anchas dehesas.
Entonces caerá el Assur por espada no de varón; y espada, no de hombre lo consumirá; y huirá de la presencia de la espada, y sus jóvenes desmayarán.
No se cegarán entonces los ojos de los que ven, y los oídos de los oyentes oirán atentos.
Entonces los ojos de los ciegos serán abiertos; y los oídos de los sordos se abrirán.
Entonces el cojo saltará como un ciervo; y alabará la lengua del mudo; porque aguas serán cavadas en el desierto, y arroyos en la soledad.
Entonces dijeron Eliacim, Sebna y Joa a Rabsaces: Te rogamos que hables a tus siervos en lengua de Asiria, porque nosotros la entendemos; y no hables con nosotros en lengua judaica, oyéndolo el pueblo que está sobre el muro.
Entonces Eliacim hijo de Hilcías mayordomo, y Sebna escriba, y Joa hijo de Asaf escritor de crónicas, vinieron a Ezequías rotos sus vestidos; y le contaron las palabras de Rabsaces.
Entonces Isaías hijo de Amoz, envió a decir a Ezequías: El SEÑOR Dios de Israel dice así: Acerca de lo que me rogaste sobre Senaquerib rey de Asiria,
Entonces Senaquerib rey de Asiria partiéndose se fue, y se tornó, e hizo su morada en Nínive.
Entonces volvió Ezequías su rostro a la pared, e hizo oración al SEÑOR.
Entonces vino palabra del SEÑOR a Isaías, diciendo:
Entonces Isaías profeta vino al rey Ezequías, y le dijo: ¿Qué dicen estos hombres, y de dónde han venido a ti? Y Ezequías respondió: De tierra muy lejos han venido a mí, de Babilonia.
Dijo entonces: ¿Qué han visto en tu casa? Y dijo Ezequías: Todo lo que hay en mi casa han visto; y ninguna cosa hay en mis tesoros, que no les haya mostrado.
Entonces dijo Isaías a Ezequías: Oye palabra del SEÑOR de los ejércitos:
Escuchadme, islas, y esfuércense los pueblos; acérquense, y entonces hablen; estemos juntamente a juicio.
Publicad, y haced llegar, y entren todos en consulta. ¿Quién hizo oír esto desde el principio, y desde entonces lo tiene dicho, sino yo, el SEÑOR? Y no hay más Dios que yo; Dios justo y Salvador, no hay más que yo.
¡Deseo que miraras tú a mis mandamientos! Fuera entonces tu paz como un río, y tu justicia como las ondas del mar.
Entonces nacerá tu luz, como el alba; y tu sanidad reverdecerá presto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria del SEÑOR te recogerá.
Entonces invocarás, y oirás al SEÑOR; clamarás, y dirá él: Heme aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el extender el dedo, y hablar vanidad:
Entonces te deleitarás en el SEÑOR: y yo te haré subir sobre las alturas de la tierra, y te haré comer la heredad de Jacob tu padre, porque la boca del SEÑOR ha hablado.
Entonces verás, y resplandecerás; y se maravillará y ensanchará tu corazón, que se haya vuelto a ti la multitud del mar, que la fortaleza de los gentiles haya venido a ti.
Y será que cuando dijereis: ¿Por qué hizo el SEÑOR Dios nuestro con nosotros todas estas cosas? Entonces les dirás: De la manera que me dejasteis a mí, y servisteis a dioses ajenos en vuestra tierra, así serviréis a extraños en tierra ajena.
Y el SEÑOR me lo hizo saber, y lo conocí; entonces me hiciste ver sus obras.
Entonces fui al Eufrates, y cavé, y tomé el cinto del lugar donde lo había escondido; y he aquí que el cinto se había podrido; para ninguna cosa era bueno.
Entonces les has de decir: Así dijo el SEÑOR: He aquí que yo lleno de embriaguez a todos los moradores de esta tierra, y a los reyes que están sentados por David sobre su trono, y a los sacerdotes y los profetas, y todos a los moradores de Jerusalén;
Me dijo entonces el SEÑOR: En falso profetizan los profetas en mi nombre; no los envié, ni les mandé, ni les hablé; visión mentirosa, adivinación, vanidad, y engaño de su corazón os profetizan.
Entonces les dirás: Porque vuestros padres me dejaron, dice el SEÑOR, y anduvieron en pos de dioses ajenos, y los sirvieron, y a ellos se encorvaron, y me dejaron a mí, y no guardaron mi ley;
¿Por ventura reinarás porque te cercas de cedro? ¿Por ventura no comió y bebió tu padre, e hizo juicio y justicia, y entonces le fue bien?
El juzgó la causa del pobre y del menesteroso, y entonces estuvo bien. ¿No es esto conocerme a mí? Dijo el SEÑOR.
A todos tus pastores pacerá el viento, y tus enamorados irán en cautiverio; entonces te avergonzarás y te confundirás a causa de toda tu malicia.
Entonces hablaron los sacerdotes y los profetas a los príncipes y a todo el pueblo, diciendo: En pena de muerte ha incurrido este hombre; porque profetizó contra esta ciudad, como vosotros habéis oído con vuestros oídos.
Entonces se levantaron algunos de los ancianos de la tierra, y hablaron a toda la congregación del pueblo, diciendo:
Entonces dijo Jeremías profeta a Hananías profeta: Ahora oye, Hananías; el SEÑOR no te envió, y tú hiciste a este pueblo confiar en mentira.
Entonces me invocaréis, y andaréis en mis caminos y oraréis a mí, y yo os oiré;
Entonces la virgen se alegrará en la danza, los jóvenes y los viejos juntamente; y su lloro tornaré en gozo, y los consolaré, y los alegraré de su dolor.
Y entonces el ejército del rey de Babilonia tenía cercada a Jerusalén; y el profeta Jeremías estaba preso en el patio de la guarda que estaba en la casa del rey de Judá.
Y vino a mí Hanameel, hijo de mi tío, conforme a la palabra del SEÑOR, al patio de la guarda, y me dijo: Compra ahora mi heredad que está en Anatot, en tierra de Benjamín, porque tuyo es el derecho de la herencia, y a ti compete la redención; cómprala para ti. Entonces conocí que era palabra del SEÑOR.
Y tomé entonces a Jaazanías hijo de Jeremías, hijo de Habasinías, y a sus hermanos, y a todos sus hijos, y a toda la familia de los recabitas;
Entonces enviaron todos los príncipes a Jehudí hijo de Netanías, hijo de Selemías, hijo de Cusi, para que dijera a Baruc: Toma el rollo en que leíste a oídos del pueblo, y ven. Y Baruc, hijo de Nerías, tomó el rollo en su mano, y vino a ellos.
Entonces dijeron los príncipes a Baruc: Ve, y escóndete, tú y Jeremías, y nadie sepa dónde estáis.
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- 1.Gé 2:21-Gé 38:18
- 2.Gé 38:22-Éx 16:6
- 3.Éx 16:15-Números 14:5
- 4.Números 14:10-Josué 5:14
- 5.Josué 6:5-Rut 1:6
- 6.Rut 2:8-1 Samuel 30:22
- 7.1 Samuel 31:4-1 Reyes 1:49
- 8.1 Reyes 2:13-2 Reyes 5:13
- 9.2 Reyes 5:14-2 Crónicas 7:8
- 10.2 Crónicas 7:14-Job 13:20
- 11.Job 14:15-Jeremías 37:6
- 12.Jeremías 37:21-Mateo 9:1
- 13.Mateo 9:6-Mateo 27:26
- 14.Mateo 27:27-Lucas 14:4
- 15.Lucas 14:9-Juan 9:25
- 16.Juan 10:31-Hechos 10:21
- 17.Hechos 10:23-Apocalipsis 16:18