'Oído' en la Biblia
Oído hemos la soberbia de Moab, por extremo soberbio; su soberbia y su arrogancia, y su altivez; mas sus mentiras no serán firmes.
Luego que comenzare á pasar, él os arrebatará; porque de mañana de mañana pasará, de día y de noche; y será que el espanto solamente haga entender lo oído.
Ahora pues, no os burléis, porque no se aprieten más vuestras ataduras: porque consumación y acabamiento sobre toda la tierra he oído del Señor Jehová de los ejércitos.
ACONTECIO pues, que el rey Ezechîas, oído esto, rasgó sus vestidos, y cubierto de saco vino á la casa de Jehová.
Y díjoles Isaías: Diréis así á vuestro señor: Así dice Jehová: No temas por las palabras que has oído, con las cuales me han blasfemado los siervos del rey de Asiria.
Vuelto pues Rabsaces, halló al rey de Asiria que batía á Libna; porque ya había oído que se había apartado de Lachîs.
Inclina, oh Jehová, tu oído, y oye; abre, oh Jehová, tus ojos, y mira: y oye todas las palabras de Sennachêrib, el cual ha enviado á blasfemar al Dios viviente.
¿No has oído decir que de mucho tiempo ha yo lo hice, que de días antiguos lo he formado? Helo hecho venir ahora, y será para destrucción de ciudades fuertes en montones de ruinas.
Ve, y di á Ezechîas: Jehová Dios de David tu padre dice así: Tu oración he oído, y visto tus lágrimas: he aquí que yo añado á tus días quince años.
EN aquel tiempo Merodachbaladán, hijo de Baladán, rey de Babilonia, envió cartas y presentes á Ezechîas; porque había oído que había estado enfermo, y que había convalecido.
¿No sabéis? ¿no habéis oído? ¿nunca os lo han dicho desde el principio? ¿no habéis sido enseñados desde que la tierra se fundó?
¿No has sabido, no has oído que el Dios del siglo es Jehová, el cual crió los términos de la tierra? No se trabaja, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance.
Ahora han sido criadas, no en días pasados; ni antes de este día las habías oído, porque no digas: He aquí que yo lo sabía.
Sí, nunca lo habías oído, ni nunca lo habías conocido; ciertamente no se abrió antes tu oreja; porque sabía que desleal habías de desobedecer, por tanto te llamé rebelde desde el vientre.
El Señor Jehová me dió lengua de sabios, para saber hablar en sazón palabra al cansado; despertará de mañana, despertaráme de mañana oído, para que oiga como los sabios.
El Señor Jehová me abrió el oído, y yo no fuí rebelde, ni me torné atrás.
Empero él rociará muchas gentes: los reyes cerrarán sobre él sus bocas; porque verán lo que nunca les fué contado, y entenderán lo que jamás habían oído.
HE aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni hase agravado su oído para oir:
Y será que antes que clamen, responderé yo; aun estando ellos hablando, yo habré oído.
Resultados de Búsqueda por Versiones
- J2000 (16)
- LBDA (26)
- NBLH (26)
- RV (20)
- SEV (16)
- RV1909 (19)
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (9)
- Éxodo (8)
- Levítico (1)
- Números (4)
- Deuteronomio (11)
- Josué (4)
- 1 Samuel (10)
- 2 Samuel (2)
- 1 Reyes (9)
- 2 Reyes (10)
- 1 Crónicas (3)
- 2 Crónicas (6)
- Nehemías (6)
- Ester (1)
- Job (13)
- Salmos (25)
- Proverbios (10)
- Eclesiastés (1)
- Cantares (1)
- Isaías (19)
- Jeremías (27)
- Lamentaciones (3)
- Ezequiel (1)
- Daniel (4)
- Oseas (1)
- Abdías (1)
- Habacuc (1)
- Sofonías (1)
- Zacarías (1)