Job 7:16

Desvanezco; no he de vivir para siempre; déjame, pues mis días son vanidad.

Job 10:1

Mi alma está hastiada de mi vida: Daré yo rienda suelta a mi queja sobre mí, hablaré en la amargura de mi alma.

Job 6:9

y que agradara a Dios destruirme; que desatara su mano, y acabara conmigo!

Job 9:21

Bien que yo fuese íntegro, no conocería mi alma: Despreciaría mi vida.

Job 10:20

¿No son pocos mis días? Cesa, pues, y déjame, para que me conforte un poco.

Job 14:6

Apártate de él, y que descanse hasta que, cual jornalero, haya cumplido su día.

Salmos 39:13

Déjame, y tomaré fuerzas, antes que vaya y perezca.

Génesis 27:46

Y dijo Rebeca a Isaac: Fastidio tengo de mi vida a causa de las hijas de Het. Si Jacob toma esposa de las hijas de Het, como éstas, de las hijas de esta tierra, ¿para qué quiero la vida?

1 Reyes 19:4

Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó debajo de un enebro; y deseando morirse, dijo: Baste ya, oh Jehová, quítame la vida; pues no soy yo mejor que mis padres.

Job 3:20-22

¿Para qué se da luz al trabajado, y vida al amargado de alma,

Salmos 39:10

Quita de sobre mí tu plaga; bajo los golpes de tu mano estoy consumido.

Salmos 62:9

Por cierto, vanidad son los hijos de los hombres, mentira los hombres de renombre; pesándolos a todos juntos en la balanza, pesarán menos que la vanidad.

Salmos 78:33

Por tanto, consumió sus días en vanidad, y sus años en tribulación.

Salmos 144:4

El hombre es semejante a la vanidad: Sus días son como la sombra que pasa.

Eclesiastés 6:11-12

Ciertamente las muchas palabras multiplican la vanidad. ¿Qué más tiene el hombre?

Jonás 4:3

Ahora pues, oh Jehová, te ruego que me quites la vida; porque mejor me es la muerte que la vida.

Jonás 4:8

Y aconteció que al salir el sol, preparó Dios un recio viento solano; y el sol hirió a Jonás en la cabeza, y desmayaba; y deseaba la muerte, diciendo: Mejor sería para mí la muerte que la vida.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)