Mateo 9:18

Hablándoles Él estas cosas, he aquí vino un principal y le adoró, diciendo: Mi hija ahora estará muerta; mas ven y pon tu mano sobre ella, y vivirá.

Mateo 8:2

Y he aquí vino un leproso y le adoraba, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.

Marcos 5:22-43

Y he aquí, vino uno de los príncipes de la sinagoga llamado Jairo, y luego que le vio, se postró a sus pies,

Lucas 8:41-56

Y he aquí un varón llamado Jairo, que era príncipe de la sinagoga, vino, y postrándose a los pies de Jesús, le rogaba que entrase en su casa;

Mateo 9:24

les dijo: Apartaos, que la muchacha no está muerta, sino duerme. Y se burlaban de Él.

2 Reyes 5:11

Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su mano, y tocará el lugar, y sanará la lepra.

Mateo 8:8-9

Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; mas solamente di la palabra, y mi siervo sanará.

Mateo 14:33

Entonces los que estaban en la barca vinieron y le adoraron, diciendo: Verdaderamente tú eres el Hijo de Dios.

Mateo 15:25

Entonces ella vino y le adoró, diciendo: ¡Señor, socórreme!

Mateo 17:14

Y cuando llegaron a la multitud, vino a Él un hombre, y cayendo de rodillas delante de Él, dijo:

Mateo 20:20

Entonces vino a Él la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, adorándole y pidiéndole algo.

Mateo 28:17

Y cuando le vieron, le adoraron, mas unos dudaban.

Lucas 7:2

Y el siervo de un centurión, a quien éste tenía en estima, estaba enfermo y a punto de morir.

Lucas 13:14

Pero el príncipe de la sinagoga respondió indignado porque Jesús había sanado en sábado, y dijo a la gente: Seis días hay en que se debe trabajar; en éstos, pues, venid y sed sanados, y no en día de sábado.

Lucas 17:15-16

Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz;

Lucas 18:18

Y le preguntó un príncipe, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?

Juan 4:47-49

Éste, cuando oyó que Jesús venía de Judea a Galilea, vino a Él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, porque estaba a punto de morir.

Juan 11:21-22

Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.

Juan 11:25

Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.

Juan 11:32

Y cuando María llegó a donde estaba Jesús, al verle, se postró a sus pies, diciéndole: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.

Hechos 10:25-26

Y cuando Pedro entraba, Cornelio salió a recibirle; y postrándose a sus pies, le adoró.

Hechos 13:15

Y después de la lectura de la ley y de los profetas, los príncipes de la sinagoga enviaron a ellos, diciendo: Varones hermanos, si tenéis alguna palabra de exhortación para el pueblo, hablad.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)