9 El ungüento y el incienso alegran el corazón; así la dulzura del amigo con el consejo del alma.
10 No dejes a tu amigo, ni al amigo de tu padre; ni entres en casa de tu hermano el día de tu aflicción. Mejor es el vecino cerca que el hermano lejano.
22 Aunque majes al loco en un mortero entre granos de trigo a pisón majados, no se quitará de él su locura.
27 y abundancia de leche de las cabras para tu mantenimiento, y para mantenimiento de tu casa, y para sustento de tus criadas.