Parallel Verses
Reina Valera 1909
Bendito tú, oh Jehová: Enséñame tus estatutos.
La Biblia de las Américas
Bendito tú, oh SEÑOR; enséñame tus estatutos.
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Bendito tú, oh SEÑOR, enséñame tus estatutos.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Bendito Tú, oh SEÑOR; Enséñame Tus estatutos.
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Bendito tú, oh SEÑOR, enséñame tus estatutos.
Spanish: Reina Valera Gómez
Bendito tú, oh Jehová; enséñame tus estatutos.
New American Standard Bible
Blessed are You, O LORD; Teach me Your statutes.
Referencias Cruzadas
Salmos 119:64
De tu misericordia, oh Jehová, está llena la tierra: Enséñame tus estatutos.
Salmos 119:108
Ruégote, oh Jehová, te sean agradables los sacrificios voluntarios de mi boca; Y enséñame tus juicios.
Salmos 119:124
Haz con tu siervo según tu misericordia, Y enséñame tus estatutos.
Salmos 25:4-5
Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas.
Salmos 86:11
Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdad: Consolida mi corazón para que tema tu nombre.
Salmos 119:26-27
Mis caminos te conté, y me has respondido: Enséñame tus estatutos.
Salmos 119:33
HE. Enséñame, oh Jehová, el camino de tus estatutos, Y guardarélo hasta el fin.
Salmos 119:66
Enséñame bondad de sentido y sabiduría; Porque tus mandamientos he creído.
Salmos 119:68
Bueno eres tú, y bienhechor: Enséñame tus estatutos.
Salmos 119:71-72
Bueno me es haber sido humillado, Para que aprenda tus estatutos.
Salmos 143:10
Enséñame á hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios: Tu buen espíritu me guíe á tierra de rectitud.
Lucas 24:45
Entonces les abrió el sentido, para que entendiesen las Escrituras;
Juan 14:26
Mas el Consolador, el Espíritu Santo, al cual el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todas las cosas que os he dicho.
1 Timoteo 1:11
Según el evangelio de la gloria del Dios bendito, el cual á mí me ha sido encargado.
1 Timoteo 6:15
La cual á su tiempo mostrará el Bienaventurado y solo Poderoso, Rey de reyes, y Señor de señores;
1 Juan 2:27
Pero la unción que vosotros habéis recibido de él, mora en vosotros, y no tenéis necesidad que ninguno os enseñe; mas como la unción misma os enseña de todas cosas, y es verdadera, y no es mentira, así como os ha enseñado, perseveraréis en él.