Besad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino, cuando se encendiere un poco su furor. Bienaventurados todos los que en Él confían.

para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que le envió.

Tomando entonces Samuel un frasco de aceite, lo derramó sobre su cabeza, y lo besó, y le dijo: ¿No te ha ungido Jehová por príncipe sobre su heredad?

Pero yo he hecho que queden en Israel siete mil, cuyas rodillas no se doblaron ante Baal, y cuyas bocas no lo besaron.

Jehová de los ejércitos, dichoso el hombre que en ti confía.

El entendido en la palabra, hallará el bien; y el que confía en Jehová, es bienaventurado.

Por tanto, Jehová esperará para tener piedad de vosotros, por eso Él será exaltado para tener misericordia de vosotros; porque Jehová es Dios de justicia; bienaventurados todos los que esperan en Él.

Bendito el varón que se fía en Jehová, y cuya confianza es Jehová.

como está escrito: He aquí pongo en Sión piedra de tropiezo, y roca de caída: Y todo aquel que en Él creyere, no será avergonzado.

y decían a las montañas y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de Aquél que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero;

Tú serás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo: solamente en el trono seré yo mayor que tú.

Y lo hizo subir en su segundo carro, y pregonaron delante de él: Doblad la rodilla: y le puso sobre toda la tierra de Egipto.

Porque Jehová conoce el camino de los justos; mas la senda de los malos perecerá.

Entonces hablará a ellos en su furor, y los turbará con su ira.

Yo publicaré el decreto: Jehová me ha dicho: Mi Hijo eres tú; yo te engendré hoy.

Gustad, y ved que es bueno Jehová: Dichoso el hombre que en Él confía.

Bienaventurado el hombre que pone en Jehová su confianza, y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían a la mentira.

No confiéis en los príncipes, ni en hijo de hombre, porque no hay en él salvación.

Tú guardarás en completa paz, a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.

Y ahora añadieron a su pecado, y de su plata se han hecho según su entendimiento, estatuas de fundición, ídolos, toda obra de artífices; acerca de los cuales dicen a los hombres que sacrifican, que besen los becerros.

Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

Porque la Escritura dice: Todo aquel que en Él creyere, no será avergonzado.

para que seamos para alabanza de su gloria, nosotros quienes primero confiamos en Cristo.

en llama de fuego, para cobrar venganza de los que no conocen a Dios, y no obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo;

quienes por Él creéis en Dios, el cual le resucitó de los muertos, y le ha dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios.

Por lo cual también contiene la Escritura: He aquí, pongo en Sión la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa; Y el que creyere en Él, no será avergonzado.

Y el tercer ángel los siguió, diciendo en alta voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente, o en su mano,

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Reina Valera Gómez (© 2010)

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