Parallel Verses
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Estoy hundido en cieno profundo, donde no hay pie; soy venido en profundos de aguas, y la corriente me ha anegado.
La Biblia de las Américas
Me he hundido en cieno profundo, y no hay donde hacer pie; he llegado a lo profundo de las aguas, y la corriente me anega.
Reina Valera 1909
Estoy hundido en cieno profundo, donde no hay pie: He venido á abismos de aguas, y la corriente me ha anegado.
La Nueva Biblia de los Hispanos
Me he hundido en cieno profundo, y no hay donde apoyar el pie; He llegado a lo profundo de las aguas, y la corriente me cubre.
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Estoy hundido en cieno profundo, donde no hay pie; soy venido en profundos de aguas, y la corriente me ha anegado.
Spanish: Reina Valera Gómez
Estoy hundido en cieno profundo, donde no puedo sentar pie; he venido a abismos de aguas, y la corriente me ha anegado.
New American Standard Bible
I have sunk in deep mire, and there is no foothold; I have come into deep waters, and a flood overflows me.
Referencias Cruzadas
Salmos 40:2
Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; y puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos.
Génesis 7:17-23
Y el diluvio estuvo cuarenta días sobre la tierra; y las aguas se multiplicaron, y alzaron el arca, y fue alzado de sobre la tierra.
Salmos 32:6
Por esto orará a ti todo misericordioso en el tiempo de poder hallarte; ciertamente en la inundación de las muchas aguas no llegarán éstas a él.
Salmos 88:6-7
Me has puesto en el hoyo profundo, en tinieblas, en honduras.
Jeremías 38:6
Entonces tomaron ellos a Jeremías, y lo hicieron echar en la mazmorra de Malquías hijo de Hamelec, que estaba en el patio de la guarda; y metieron a Jeremías con sogas. Y en la mazmorra no había agua, sino cieno; y se hundió Jeremías en el cieno.
Jeremías 38:22
Y he aquí que todas las mujeres que han quedado en casa del rey de Judá, serán sacadas a los príncipes del rey de Babilonia; y ellas mismas dirán: Te han engañado, y han prevalecido contra ti tus amigos; atollaron en el cieno tus pies, se volvieron atrás.
Ezequiel 27:26-34
En muchas aguas te engolfaron tus remeros; viento solano te quebrantó en medio de los mares.
Mateo 7:25
y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y combatieron aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la peña.
Mateo 26:37-38
Y tomando a Pedro, y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse en gran manera.