47 Versículos de la Biblia sobre el amor de Dios por nosotros
Versículos Más Relevantes
En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió á su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él.
En esto consiste el amor: no que nosotros hayamos amado á Dios, sino que él nos amó á nosotros, y ha enviado á su Hijo en propiciación por nuestros pecados.
Conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo, para vida eterna.
Mas Dios encarece su caridad para con nosotros, porque siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
El que no ama, no conoce á Dios; porque Dios es amor.
MIRAD cuál amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios: por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoce á él.
Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que vive en amor, vive en Dios, y Dios en él.
Y conocer el amor de Cristo, que excede á todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.
Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando esto: Que si uno murió por todos, luego todos son muertos;
Y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios está derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos es dado.
Este es mi mandamiento: Que os améis los unos á los otros, como yo os he amado.
No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
Carísimos, amémonos unos á otros; porque el amor es de Dios. Cualquiera que ama, es nacido de Dios, y conoce á Dios.
Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de obra y en verdad.
Y nosotros tenemos este mandamiento de él: Que el que ama á Dios, ame también á su hermano.
Ni lo alto, ni lo bajo, ni ninguna criatura nos podrá apartar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
En esto es perfecto el amor con nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio; pues como él es, así somos nosotros en este mundo.
En esto hemos conocido el amor, porque él puso su vida por nosotros: también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
Pues el mismo Padre os ama, porque vosotros me amasteis, y habéis creído que yo salí de Dios.
Mas el que guarda su palabra, la caridad de Dios está verdaderamente perfecta en él: por esto sabemos que estamos en él.
Mas la gracia de nuestro Señor fué más abundante con la fe y amor que es en Cristo Jesús.
Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos á otros: como os he amado, que también os améis los unos á los otros.
Podáis bien comprender con todos los santos cuál sea la anchura y la longura y la profundidad y la altura,
Porque este es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son penosos.
Si alguno dice, Yo amo á Dios, y aborrece á su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama á su hermano al cual ha visto, ¿cómo puede amar á Dios á quien no ha visto?
Porque como la altura de los cielos sobre la tierra, Engrandeció su misericordia sobre los que le temen.
Y el Señor enderece vuestros corazones en el amor de Dios, y en la paciencia de Cristo.
Y á vosotros multiplique el Señor, y haga abundar el amor entre vosotros, y para con todos, como es también de nosotros para con vosotros;
A todos los que estáis en Roma, amados de Dios, llamados santos: Gracia y paz tengáis de Dios nuestro Padre, y del Señor Jesucristo.
De día mandará Jehová su misericordia, Y de noche su canción será conmigo, Y oración al Dios de mi vida.
Un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todas las cosas, y por todas las cosas, y en todos vosotros.
Y este es amor, que andemos según sus mandamientos. Este es el mandamiento: Que andéis en él, como vosotros habéis oído desde el principio.
En amor no hay temor; mas el perfecto amor echa fuera el temor: porque el temor tiene pena. De donde el que teme, no está perfecto en el amor.
Yo os he amado, dice Jehová: y dijisteis: ¿En qué nos amaste? ¿No era Esaú hermano de Jacob, dice Jehová, y amé á Jacob,
Según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él en amor;
Y sobre todas estas cosas vestíos de caridad, la cual es el vínculo de la perfección.
Nadie tiene mayor amor que este, que ponga alguno su vida por sus amigos.
Que habite Cristo por la fe en vuestros corazones; para que, arraigados y fundados en amor,
En esto son manifiestos los hijos de Dios, y los hijos del diablo: cualquiera que no hace justicia, y que no ama á su hermano, no es de Dios.
Ninguno vió jamás á Dios. Si nos amamos unos á otros, Dios está en nosotros, y su amor es perfecto en nosotros:
Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó á sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio á Dios en olor suave.
Artículos Relacionados
- Actitud hacia la gente de Dios
- Amar a los demás
- Amor
- Amor, naturaleza de
- Conociendo a Dios, Efectos de
- Dios acompañandoos
- Dios, el amor de
- El amor a los demás
- El amor de Cristo
- El amor de Dios
- El amor de Dios en Cristo
- El amor ágape
- El amor, el uno para el otro
- El pecado, Dios remedio para
- Estar en el amor
- Expiación
- Gracia, y Jesucristo
- Jesucristo, el amor de
- La Expiación, en NT
- La misión de Jesucristo
- Objetivo en el amor
- Santidad, los creyentes en crecimiento
- Amar
- Amar a los compañeros cristianos
- Amar a los niños
- Amar a todos
- Amarse unos a otros
- Amarte a uno mismo
- Aquellos que aman a Dios
- Caminar en el amor
- Conocer a Dios
- El amor a Cristo
- El amor como fruto del espíritu
- El amor de Dios
- El amor de los hermanos
- El amor de un padre
- El amor fraternal
- El amor incondicional
- El amor verdadero
- El amor y la familia
- El amor y la fortaleza
- El amor y las relaciones
- El cumplimiento de las órdenes de Cristo
- El mundo
- El padre
- La amistad y el amor
- La esperanza y el amor
- La fortaleza y el amor
- La necesidad de amar a Dios
- La obediencia
- La trinidad
- Los amadores
- Los mandamientos
- No amar a Dios
- Ser amado
- Ser buen padre
- Ser único