18 Versículo de la Biblia sobre Vivir en la luz
Versículos Más Relevantes
Porque en otro tiempo erais tinieblas; mas ahora sois luz en el Señor: andad como hijos de luz,
Sonaban pues las trompetas, y cantaban con la voz todos á una, para alabar y confesar á Jehová: y cuando alzaban la voz con trompetas y címbalos é instrumentos de música, cuando alababan á Jehová, diciendo: Porque es bueno, porque su misericordia es para Y no podían los sacerdotes estar para ministrar, por causa de la nube; porque la gloria de Jehová había henchido la casa de Dios.
Conviéneme obrar las obrar del que me envió, entre tanto que el día dura: la noche viene, cuando nadie puede obrar.
La noche ha pasado, y ha llegado el día: echemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de luz,
Para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin culpa en medio de la nación maligna y perversa, entre los cuales resplandecéis como luminares en el mundo;
Porque todos vosotros sois hijos de luz, é hijos del día; no somos de la noche, ni de las tinieblas. Por tanto, no durmamos como los demás; antes velemos y seamos sobrios.
Mas si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión entre nosotros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.
Mas el que obra verdad, viene á la luz, para que sus obras sean manifestadas que son hechas en Dios.
Porque en otro tiempo erais tinieblas; mas ahora sois luz en el Señor: andad como hijos de luz, (Porque el fruto del Espíritu es en toda bondad, y justicia, y verdad;)
(Porque el fruto del Espíritu es en toda bondad, y justicia, y verdad;)
Respondió Jesús: ¿No tiene el día doce horas? El que anduviere de día, no tropieza, porque ve la luz de este mundo.
El que ama á su hermano, está en luz, y no hay tropiezo en él.
La lámpara del cuerpo es el ojo: así que, si tu ojo fuere sincero, todo tu cuerpo será luminoso:
La luz de los ojos alegra el corazón; Y la buena fama engorda los huesos.
Porque así nos ha mandado el Señor, diciendo: Te he puesto para luz de los Gentiles, Para que seas salud hasta lo postrero de la tierra.
Y confías que eres guía de los ciegos, luz de los que están en tinieblas,
Ciertamente la luz de los impíos será apagada, Y no resplandecerá la centella de su fuego.