'Abajo' en la Biblia
del Dios de tu padre, el cual te ayudará, y del Omnipotente, el cual te bendecirá con bendiciones de los cielos de arriba, con bendiciones del abismo que está abajo, con bendiciones de los pechos y del vientre.
No te harás imagen, ni ninguna semejanza de cosa que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
las cuales se unirán por abajo, y asimismo se juntarán por su alto a un gozne; así será con las otras dos que estarán a las dos esquinas.
Y lo has de poner dentro del cerco del altar abajo; y llegará aquella red hasta el medio del altar.
Harás asimismo dos anillos de oro, los cuales pondrás a los dos lados del efod abajo en la parte delantera, delante de su juntura sobre el cinto especial del efod.
las cuales se juntaban por abajo, y asimismo por arriba a un gozne; y así hizo a la una y a la otra en las dos esquinas.
Hicieron además dos anillos de oro, los cuales pusieron en las dos orillas del efod, abajo en la parte delantera, delante de su juntura, sobre el cinto especial del efod.
Asimismo la campiña, y el Jordán, y el término, desde Cineret hasta el mar del llano, el mar Salado, las vertientes abajo del Pisga al oriente.
Aprende pues, hoy, y reflexiona en tu corazón que el SEÑOR es el único Dios arriba en el cielo, y abajo sobre la tierra; no hay otro.
y toda la llanura de este lado del Jordán, al oriente, hasta el mar del llano, las vertientes de las aguas abajo del Pisga.
No harás para ti escultura, ni imagen alguna de cosa que está arriba en los cielos, o abajo en la tierra, o en las aguas debajo de la tierra.
No tomarás en prenda la muela de molino, ni la de abajo ni la de arriba, porque sería prendar la vida.
El extranjero que estará en medio de ti subirá sobre ti muy alto, y tú descenderás muy abajo.
Y a José dijo: Bendita sea del SEÑOR su tierra, por los regalos de los cielos, por el rocío, y por el abismo que abajo yace,
Oyendo esto, ha desmayado nuestro corazón; ni ha quedado más espíritu en alguno por causa de vosotros; porque el SEÑOR vuestro Dios es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra.
Y ella respondió: Dame una bendición; pues que me has dado tierra de secadal, dame también fuentes de aguas. El entonces le dio las fuentes de arriba, y las de abajo.
y torna a descender hacia el mar occidental al término de Jaflet, hasta el término de Bet-horón la de abajo, y hasta Gezer; y sale al mar.
y de allí pasa aquel término a Luz, por el lado de Luz (ésta es Bet-el) hacia el mediodía. Y desciende este término de Atarot-adar al monte que está al mediodía de Bet-horón la de abajo.
Ella entonces le respondió: Dame una bendición; que pues me has dado tierra de secadal, dame también fuentes de aguas. Entonces Caleb le dio las fuentes de arriba y las fuentes de abajo.
Y tomada provisión para el pueblo en sus manos, con sus shofarot, envió a todos los otros israelitas cada uno a su tienda, y retuvo a aquellos trescientos hombres; y tenía el campamento de Madián abajo en el valle.
Y cuando llegó Gedeón, he aquí que un hombre estaba contando a su compañero un sueño, diciendo: He aquí yo soñé un sueño: que veía un pan de cebada que rodaba hasta el campamento de Madián, y llegaba a las tiendas, y las hirió de tal manera que cayeron, y las trastornaba de arriba abajo, y las tiendas cayeron.
Y saliendo los de Israel de Mizpa, siguieron a los filisteos, hiriéndolos hasta que llegaron mas abajo de Bet-car.
Baana hijo de Ahilud, en Taanac y Meguido, y en toda Bet-seán, que es cerca de Saretán, abajo de Jezreel, desde Bet-seán hasta Abel-mehola, y hasta el otro lado de Jocmeam;
El colgadizo de abajo era de cinco codos de ancho, y el de en medio de seis codos de ancho, y el tercero de siete codos de ancho; porque por fuera había hecho disminuciones a la casa en derredor, para no trabar las vigas de las paredes de la Casa.
dijo: SEÑOR Dios de Israel, no hay Dios como tú, ni arriba en los cielos ni abajo en la tierra, que guardas el pacto y la misericordia a tus siervos, los que andan delante de ti de todo su corazón;
Y él les dijo: Echadla abajo. Y ellos la echaron; y parte de su sangre fue salpicada en la pared, y en los caballos; y él la atropelló.
Y lo que hubiere escapado, lo que habrá quedado de la casa de Judá, volverá a echar raíz abajo, y hará fruto arriba.
Y no tomó David el número de los que eran de veinte años abajo, por cuanto el SEÑOR había dicho que él había de multiplicar a Israel como las estrellas del cielo.
Asimismo reedificó a Bet-horón la de arriba, y a Bet-horón la de abajo, ciudades fortificadas, de muros, puertas, y barras;
Este Ezequías tapó los manaderos de las aguas de Gihón la de arriba, y las encaminó abajo al occidente de la ciudad de David. Y fue prosperado Ezequías en todo lo que hizo.
Abajo se secarán sus raíces, y arriba serán cortadas sus ramas.
Su corazón es firme como una piedra, y fuerte como una pieza de la muela de abajo.
El camino de la vida es cuesta arriba al entendido, para apartarse del Seol abajo.
El Seol abajo se espantó de ti; te despertó muertos que en tu venida salieran a recibirte, hizo levantar de sus tronos a todos los príncipes de la tierra, a todos los reyes de los gentiles.
Y visteis las roturas de la ciudad de David, que se multiplicaron; y recogisteis las aguas de la pesquera de abajo.
Y con ellos vendrán abajo unicornios, y toros con becerros; y su tierra se embriagará de sangre, y su polvo se engrasará de grosura.
Y lo que hubiere escapado de la casa de Judá, tornará a echar raíz abajo, y hará fruto arriba.
Alzad a los cielos vuestros ojos, y mirad abajo a la tierra; porque los cielos serán deshechos, como humo; y la tierra se envejecerá, como ropa de vestir; y de la misma manera perecerán sus moradores; pero mi salud será para siempre, y mi justicia no perecerá.
Así dijo el SEÑOR: Si los cielos arriba se pueden medir, y buscarse abajo los fundamentos de la tierra, también yo desecharé toda la simiente de Israel por todo lo que hicieron, dijo el SEÑOR.
Y vi una cosa que parecía como de ámbar, que parecía que había fuego dentro de ella, la cual se veía desde sus lomos para arriba; y desde sus lomos para abajo, vi que parecía como fuego, y que tenía resplandor alrededor
Y miré, y he aquí una semejanza que parecía de fuego; desde donde parecían sus lomos para abajo, era fuego; y desde sus lomos para arriba parecía como un resplandor, como la vista de ámbar.
Y midió la anchura desde la delantera de la puerta de abajo hasta la delantera del atrio interior por fuera, de cien codos hacia el oriente y el norte.
porque estaban en tres pisos, y no tenían columnas como las columnas de los atrios; por tanto, eran más estrechas que las de abajo y las del medio desde la tierra.
Y desde el aro del medio de la tierra hasta el lugar de abajo, dos codos, y la anchura de un codo; y desde el lugar menor hasta el lugar mayor, cuatro codos, y la anchura de un codo.
Y había una pared alrededor de ellos, alrededor de todos cuatro, y chimeneas hechas abajo alrededor de los palacios.
Y yo destruí delante de ellos al amorreo, cuya altura era como la altura de los cedros, y fuerte como un alcornoque; y destruí su fruto arriba, y sus raíces abajo.
Y debajo de él se derretirán los montes, y los valles se hendirán como la cera delante del fuego, como las aguas que corren cuesta abajo.
Y trastornaré el trono de los reinos, y destruiré la fuerza del reino de los gentiles; y trastornaré el carro, y los que en él suben; y vendrán abajo los caballos, y los que en ellos suben, cada cual por la espada de su hermano.
Herodes entonces, viéndose burlado de los sabios, se enojó mucho, y envió, y mató a todos los niños que había en Belén y en todos sus términos, de edad de dos años abajo, conforme al tiempo que había entendido de los sabios.
Y le dice: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; que escrito está: A sus ángeles mandará por ti, y te alzarán en las manos, para que nunca tropieces con tu pie en piedra.
Y estando Pedro en el palacio abajo, vino una de las criadas del sumo sacerdote;
Entonces el velo del Templo se rasgó en dos, de alto abajo.
Y le llevó a Jerusalén, y le puso sobre las almenas del Templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate de aquí abajo;
Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia abajo, escribía en tierra con el dedo.
Y volviéndose a inclinar hacia abajo, escribía en tierra.
Y les decía: Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo.
Y daré prodigios arriba en el cielo, y señales abajo en la tierra, sangre y fuego y vapor de humo;
Y un joven llamado Eutico que estaba sentado en una ventana, tomado de un sueño profundo, como Pablo predicaba largamente, postrado del sueño cayó del tercer piso abajo, y fue alzado muerto.
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