'Adentro' en la Biblia
Y pondrás el velo debajo de los corchetes, y meterás allí, del velo adentro, el arca del testimonio; y aquel velo os hará separación entre el lugar santo y el lugar santísimo.
Harás también dos anillos de oro, los cuales pondrás a los dos extremos del pectoral, en su orilla que está al lado del efod de la parte de adentro.
Veis que su sangre no fue metida en el santuario de adentro; habíais de comerla en el lugar santo, como yo mandé.
y el SEÑOR dijo a Moisés: Di a Aarón tu hermano, que no entre en todo tiempo en el santuario del velo adentro, delante del asiento de la reconciliación que está sobre el arca, para que no muera; porque yo apareceré en la nube sobre el asiento de la reconciliación.
Después tomará el incensario lleno de brasas de fuego, del altar de delante del SEÑOR, y sus puños llenos del incienso aromático molido, y lo llevará detrás del velo adentro.
Después degollará el macho cabrío del pecado del pueblo y meterá la sangre de él del velo adentro; y hará de su sangre, como hizo de la sangre del novillo, y esparcirá sobre el asiento de la reconciliación y delante del asiento de la reconciliación;
Pero no entrará del velo adentro, ni se acercará al altar, por cuanto hay falta en él; y no ensuciará mi santuario, porque YO SOY el que los santifico.
Mas tú y tus hijos contigo guardaréis vuestro sacerdocio en todo negocio del altar, y del velo adentro, y ministraréis; porque yo he dado en don el servicio de vuestro sacerdocio; y el extraño que se acercare, morirá.
Y todo el pueblo cortó también cada uno su rama y siguió a Abimelec, y {las} pusieron sobre la fortaleza; prendieron fuego a la fortaleza sobre los que estaban {adentro,} y murieron también todos los de la torre de Siquem, como mil hombres y mujeres.
Y David moró en la fortaleza y le puso por nombre la Ciudad de David; y edificó alrededor, desde Milo hacia adentro.
Y la Casa, a saber, el templo adentro, tenía cuarenta codos.
Y el oráculo estaba en la parte de adentro, el cual tenía veinte codos de largo, y otros veinte de ancho, y otros veinte de altura; y lo vistió de oro purísimo; asimismo cubrió el altar de cedro.
Y puso estos querubines en la casa de adentro; los querubines extendían sus alas, de modo que el ala del uno tocaba a la pared, y el ala del otro querubín tocaba a la otra pared, y las otras dos alas se tocaban la una a la otra en la mitad de la Casa.
Y cubrió de oro el solado de la casa, adentro y afuera.
Y estaba asentado sobre doce bueyes; tres miraban al norte, y tres miraban al poniente, y tres miraban al mediodía, y tres miraban al oriente; sobre éstos se apoyaba el mar, y los traseros de ellos estaban hacia la parte de adentro.
asimismo los cántaros, vasos, cuencos, cucharros, e incensarios, de oro purísimo; también de oro los quiciales de las puertas de la Casa de adentro, es a saber del lugar santísimo, y los de las puertas de la casa del templo.
Y David dio a Salomón su hijo la traza del pórtico, y de sus casas, y de sus despensas, y de sus salas, y de sus recámaras de adentro, y del lugar del asiento de la reconciliación.
Y estaba asentado sobre doce bueyes, tres de los cuales miraban al septentrión, y tres al occidente, y tres al mediodía, y tres al oriente; y el mar asentaba sobre ellos, y todas sus partes traseras estaban a la parte de adentro.
Y vino hasta delante de la puerta del rey; porque no era lícito pasar adentro de la puerta del rey con vestido de cilicio.
Todos los siervos del rey, y el pueblo de las provincias del rey saben, que todo varón o mujer que entra al rey al patio de adentro sin ser llamado, por una sola ley ha de morir; salvo aquel a quien el rey extendiere la vara de oro, el cual vivirá; y yo no he sido llamada para entrar al rey estos treinta días.
Y aconteció que al tercer día se vistió Ester su vestido real, y se puso en el patio de adentro de la casa del rey, enfrente del aposento del rey; y estaba el rey sentado en su trono real en el aposento real, enfrente de la puerta del aposento.
Tus labios, como un hilo de grana, y tu habla hermosa; tus sienes, como cachos de granada a la parte adentro de tus guedejas.
Y aquella semejanza extendió la mano, y me tomó por las guedejas de mi cabeza; y el Espíritu me alzó entre el cielo y la tierra, y me llevó en visiones de Dios a Jerusalén, a la entrada de la puerta de adentro que mira hacia el aquilón, donde estaba la habitación de la imagen del celo, la que hacía celar.
Y me metió en el atrio de adentro de la Casa del SEÑOR; y he aquí junto a la entrada del Templo del SEÑOR, entre el portal y el altar, como veinticinco varones, sus espaldas vueltas al Templo del SEÑOR y sus rostros al oriente, y se encorvaban al nacimiento del sol.
Y los querubines estaban a la mano derecha de la Casa cuando este varón entró; y la nube llenaba el atrio de adentro.
``Y sus hijas que están tierra adentro, serán muertas a espada; y sabrán que yo soy el SEÑOR."
Matará a espada a tus hijas que están tierra adentro. Edificará contra ti muros de asedio, levantará contra ti un terraplén y alzará contra ti un escudo grande.
Me metió después en el atrio de más adentro a la puerta del mediodía, y midió la puerta del mediodía conforme a estas medidas dichas.
Y adentro, ganchos de un palmo menor, dispuestos en derredor; y sobre las mesas la carne de las ofrendas.
Y fuera de la puerta interior, en el atrio de adentro que estaba al lado de la puerta del norte, estaban las cámaras de los cantores, las cuales miraban hacia el mediodía; una estaba al lado de la puerta del oriente que miraba hacia el norte.
Frente a los veinte codos que había en el atrio de adentro, y enfrente del solado que había en el atrio exterior, estaban las cámaras, unas enfrente de las otras en tres pisos.
Y delante de las cámaras había un corredor de diez codos de ancho a la parte de adentro, con viaje de un codo; y sus puertas hacia el norte.
Y luego que acabó las medidas de la Casa de adentro, me sacó por el camino de la puerta que miraba hacia el oriente, y lo midió todo alrededor.
Y me alzó el Espíritu, y me metió en el atrio de adentro; y he aquí que la Gloria del SEÑOR llenó la Casa.
Y será que cuando entraren por las puertas del atrio interior, se vestirán de vestimentas de lino; no asentará sobre ellos lana, cuando ministraren en las puertas del atrio de adentro, y en el interior.
Y el día que entrare al Santuario, al atrio de adentro, para ministrar en el Santuario, ofrecerá su pecado, dijo el Señor DIOS.
Y el sacerdote tomará de la sangre del pecado, y pondrá sobre los postes de la Casa, y sobre los cuatro ángulos del patio del altar, y sobre los postes de las puertas del atrio de adentro.
Así dijo el Señor DIOS: La puerta del atrio de adentro que mira al oriente, estará cerrada los seis días de trabajo, y el día del sábado se abrirá: y asimismo se abrirá; el día de la nueva luna.
¿Fariseo ciego! Limpia primero lo de adentro del vaso y del plato, para que lo de afuera también quede limpio.
no hay nada fuera del hombre que al entrar en él pueda contaminarlo; sino que lo que sale de adentro del hombre es lo que contamina al hombre.
Porque de adentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, fornicaciones, robos, homicidios, adulterios,
Todas estas maldades de adentro salen, y contaminan al hombre.
Y Pedro le siguió de lejos hasta adentro del patio del sumo sacerdote; y estaba sentado con los siervos, calentándose al fuego.
Y cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar.
y aquél, respondiendo desde adentro, le dice: ``No me molestes; la puerta ya está cerrada, y mis hijos y yo estamos acostados; no puedo levantarme para darte {nada.}"
Necios, el que hizo lo de afuera, ¿no hizo también lo de adentro?
Pero Pedro se levantó y corrió al sepulcro; e inclinándose para mirar {adentro,} vio* sólo las envolturas de lino; y se fue a su casa, maravillado de lo que había acontecido.
e inclinándose para mirar {adentro}, vio* las envolturas de lino puestas {allí,} pero no entró.
La cual, cuando conoció la voz de Pedro, de gozo no abrió el postigo, sino corriendo adentro, dio la nueva de que Pedro estaba al postigo.
el cual, recibido este mandamiento, los metió en la cárcel de más adentro; y les apretó los pies en el cepo.
Entonces él pidió luz y se precipitó adentro, y temblando, se postró ante Pablo y Silas,