'Dios' en la Biblia
Y sazonarás toda ofrenda de tu presente con sal; y no harás que falte jamás de tu presente la sal de la alianza de tu Dios; en toda ofrenda tuya ofrecerás sal.
Y cuando pecare el príncipe, e hiciere por yerro algo contra alguno de todos los mandamientos del SEÑOR su Dios, sobre cosas que no se han de hacer, y pecare;
Porque yo soy el SEÑOR vuestro Dios, vosotros por tanto os santificaréis, y seréis santos, porque yo soy santo; así que no ensuciéis vuestras almas con ningún reptil que anduviere arrastrándose sobre la tierra.
Porque yo soy el SEÑOR, que os hago subir de la tierra de Egipto para seros por Dios; seréis pues santos, porque yo soy santo.
Habla a los hijos de Israel, y diles: Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Mis derechos pondréis por obra, y mis estatutos guardaréis, andando en ellos. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Y no des de tu simiente para hacerla pasar por el fuego a Moloc; no contamines el nombre de tu Dios: Yo soy el SEÑOR.
Guardad, pues, mi observancia, no haciendo algo de las leyes de las abominaciones que fueron hechas antes de vosotros, y no os ensuciéis en ellas. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Habla a toda la congregación de los hijos de Israel, y diles: Santos seréis, porque santo soy yo el SEÑOR vuestro Dios.
Cada uno temerá a su madre y a su padre, y mis sábados guardaréis. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
No os volveréis a los ídolos, ni haréis para vosotros dioses de fundición. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Y no rebuscarás tu viña, ni recogerás los granos caídos de tu viña; para el pobre y para el extranjero los dejarás. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Y no juraréis en mi nombre con mentira, ni ensuciarás el nombre de tu Dios. Yo soy el SEÑOR.
No maldigas al sordo, y delante del ciego no pongas tropiezo, mas tendrás temor de tu Dios. Yo soy el SEÑOR.
Mas al quinto año comeréis el fruto de él, para que os haga crecer su fruto. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
No os volváis a los encantadores y a los adivinos; no los consultéis ensuciándoos con ellos. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano, y de tu Dios tendrás temor. Yo soy el SEÑOR.
Como a un natural de vosotros tendréis al extranjero que peregrinare entre vosotros; y ámalo como a ti mismo; porque peregrinos fuisteis en la tierra de Egipto. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Balanzas justas, pesas justas, efa justo, e hin justo tendréis. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto.
Santificaos, pues, y sed santos, porque yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Pero a vosotros os he dicho: Vosotros poseeréis la tierra de ellos, y yo os la daré para que la poseáis por heredad, tierra que fluye leche y miel. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios, que os he apartado de los pueblos.
Santos serán a su Dios, y no ensuciarán el nombre de su Dios; porque los fuegos del SEÑOR, el pan de su Dios ofrecen; por tanto serán santos.
Mujer ramera o infame no tomarán; ni tomarán mujer repudiada de su marido; porque el sacerdote es santo a su Dios.
Y lo santificarás, porque el pan de tu Dios ofrece; santo será a ti, porque santo soy yo el SEÑOR vuestro santificador.
Ni saldrá del santuario, ni ensuciará el santuario de su Dios; porque la corona del aceite de la unción de su Dios está sobre él. Yo soy el SEÑOR.
Habla a Aarón, y dile: El varón de tu simiente en sus generaciones, en el cual hubiere falta, no se acercará para ofrecer el pan de su Dios.
Ningún varón de la simiente de Aarón sacerdote, en el cual hubiere falta, se acercará para ofrecer las ofrendas encendidas del SEÑOR. Hay falta en él; no se acercará a ofrecer el pan de su Dios.
El pan de su Dios, de lo santísimo y de las cosas santificadas, comerá.
Y de mano de hijo de extranjero no ofreceréis el pan de vuestro Dios de todas estas cosas; porque su corrupción está en ellas; hay en ellas falta, no se os aceptarán.
que os saqué de la tierra de Egipto, para ser vuestro Dios. Yo soy el SEÑOR.
Y no comeréis pan, ni grano tostado, ni espiga fresca, hasta este mismo día, hasta que hayáis ofrecido la ofrenda de vuestro Dios; estatuto perpetuo es por vuestras edades en todas vuestras habitaciones.
Y cuando segareis la mies de vuestra tierra, no acabarás de segar el rincón de tu campo, ni espigarás tu siega; para el pobre, y para el extranjero la dejarás. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Ninguna obra haréis en este mismo día; porque es día de expiaciones, para reconciliaros delante del SEÑOR vuestro Dios.
Y tomaréis el primer día gajos con fruto de algún árbol hermoso, ramos de palmas, y ramas de árboles espesos, y sauces de los arroyos; y os regocijaréis delante del SEÑOR vuestro Dios por siete días.
para que sepan vuestros descendientes que en tabernáculos hice yo habitar a los hijos de Israel, cuando los saqué de la tierra de Egipto. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Y a los hijos de Israel hablarás, diciendo: Cualquier varón que dijere mal a su Dios, llevará su iniquidad.
Un mismo derecho tendréis; como el extranjero, así será el natural; porque yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
Y no engañe ninguno a su prójimo; mas tendrás temor de tu Dios; porque yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
No tomarás usura de él, ni aumento; mas tendrás temor de tu Dios, y tu hermano vivirá contigo.
Yo soy el SEÑOR vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto, para daros la tierra de Canaán, para ser vuestro Dios.
No te enseñorearás de él con dureza, mas tendrás temor de tu Dios.
Porque míos son los hijos de Israel; son esclavos míos, a los cuales saqué de la tierra de Egipto. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
No haréis para vosotros ídolos, ni escultura, ni os levantaréis título, ni pondréis en vuestra tierra piedra pintada para inclinaros a ella; porque yo soy el SEÑOR vuestro Dios.
y andaré entre vosotros, y yo seré vuestro Dios, y vosotros seréis mi pueblo.
Yo soy el SEÑOR vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto, para que no fueseis sus esclavos; y rompí las coyundas de vuestro yugo, y os he hecho andar con el rostro alto.
Y aun con todo esto, estando ellos en tierra de sus enemigos, yo no los desecharé, ni los abominaré para consumirlos, invalidando mi pacto con ellos; porque yo el SEÑOR soy su Dios.
Antes me acordaré de ellos por el pacto antiguo, cuando los saqué de la tierra de Egipto a los ojos de los gentiles, para ser su Dios: Yo soy el SEÑOR.