'Hablan' en la Biblia
y oirás lo que hablan; y entonces tus manos se esforzarán, y descenderás contra el campamento. Y él descendió con Fura su criado a los puestos avanzados de los hombres armados que estaban en el campamento.
Destruirás a los que hablan mentira; al hombre sanguinario y engañador abominará Jehová.
Mentira habla cada uno con su prójimo; Hablan con labios lisonjeros y con doblez de corazón.
Encerrados están con su grosura; con su boca hablan soberbiamente.
No me arrebates a una con los malos, y con los obradores de iniquidad; los cuales hablan paz con su prójimo, pero la maldad está en su corazón.
Enmudezcan los labios mentirosos, que hablan contra el justo cosas duras, con soberbia y menosprecio.
Porque no hablan paz; y contra los mansos de la tierra piensan palabras engañosas.
Y si vienen a verme, hablan mentira; su corazón acumula iniquidad para sí; y al salir fuera, la divulgan.
Pero el rey se alegrará en Dios; será alabado cualquiera que por Él jura; porque la boca de los que hablan mentira, será cerrada.
Porque mis enemigos hablan contra mí; y los que acechan mi alma, consultaron juntamente.
Blasfeman, y hablan con maldad de hacer violencia; hablan con altanería.
Sea éste el pago de parte de Jehová para los que me calumnian, y para los que hablan mal contra mi alma.
Tienen boca, mas no hablan; tienen ojos, mas no ven;
manos tienen, mas no palpan; tienen pies, mas no andan; ni hablan con su garganta;
tienen boca, mas no hablan; tienen ojos, mas no ven;
para librarte del mal camino, de los hombres que hablan perversidades;
Hay quienes hablan como dando estocadas de espada; mas la lengua de los sabios es medicina.
porque su corazón trama violencia, e iniquidad hablan sus labios.
Se lo echan sobre los hombros, lo llevan, y lo colocan en su lugar; allí se está, y no se mueve de su sitio. Le hablan, y tampoco responde, ni libra de la tribulación.
No hay quien clame por la justicia, ni quien juzgue por la verdad; confían en vanidad, y hablan vanidades; conciben trabajo, y dan a luz iniquidad.
Escuché y oí; pero no hablan derecho, no hay hombre que se arrepienta de su mal, diciendo: ¿Qué he hecho? Cada cual se volvió a su carrera, como caballo que arremete con ímpetu a la batalla.
Erguidos están como palmera, pero no hablan; necesitan ser llevados porque no pueden andar. No tengáis temor de ellos, porque no pueden hacer mal, ni para hacer bien tienen poder.
Así dice Jehová de los ejércitos: No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan: os hacen vanos; hablan visión de su corazón, no de la boca de Jehová.
Y vosotros no prestéis oído a vuestros profetas, ni a vuestros adivinos, ni a vuestros soñadores, ni a vuestros agoreros, ni a vuestros encantadores, que os hablan diciendo: No serviréis al rey de Babilonia.
No escuchéis las palabras de los profetas que os hablan, diciendo: No serviréis al rey de Babilonia; porque os profetizan mentira.
Hijo de hombre, los que habitan aquellos desiertos en la tierra de Israel, hablan diciendo: Abraham era uno, y poseyó la tierra; pues nosotros somos muchos; a nosotros es dada la tierra en posesión.
Y vosotros lo habéis profanado cuando decís: Inmunda es la mesa de Jehová; y cuando hablan que su alimento es despreciable.
Y estaban atónitos y maravillados, diciéndose unos a otros: Mirad, ¿no son galileos todos estos que hablan?
¿Tienen todos dones de sanidad? ¿Todos hablan lenguas? ¿Interpretan todos?
De manera que, si toda la iglesia se reúne en un lugar, y todos hablan en lenguas, y entran indoctos o incrédulos, ¿no dirán que estáis locos?
queriendo ser doctores de la ley, sin entender ni lo que hablan, ni lo que afirman.
Pero éstos, como bestias brutas naturalmente nacidas para presa y destrucción, hablan mal de cosas que no entienden, y perecerán en su propia corrupción,
Ellos son del mundo; por eso hablan del mundo, y el mundo los oye.