'Pecadores' en la Biblia
Y los hombres de Sodoma eran malos y pecadores contra el SEÑOR en gran manera.
Y he aquí, vosotros os habéis levantado en lugar de vuestros padres, prole de hombres pecadores, para añadir aún más a la ardiente ira del SEÑOR contra Israel.
Y el SEÑOR te envió en una misión, y dijo: ``Ve, y destruye por completo a los pecadores, los amalecitas, y lucha contra ellos hasta que sean exterminados."
¿Cuán bienaventurado es el hombre que no anda en el consejo de los impíos, ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se sienta en la silla de los escarnecedores,
Por tanto, no se sostendrán los impíos en el juicio, ni los pecadores en la congregación de los justos.
Bueno y recto es el SEÑOR; por tanto, El muestra a los pecadores el camino.
No juntes mi alma con pecadores, ni mi vida con hombres sanguinarios,
{Entonces} enseñaré a los transgresores tus caminos, y los pecadores se convertirán a ti.
Sean consumidos de la tierra los pecadores, y los impíos dejen de ser. Bendice, alma mía, al SEÑOR. ¿Aleluya!
Hijo mío, si los pecadores te quieren seducir, no consientas.
A los pecadores los persigue el mal, pero los justos serán recompensados con el bien.
No envidie tu corazón a los pecadores, antes {vive} siempre en el temor del SEÑOR;
Pero los transgresores y los pecadores serán aplastados a una, y los que abandonan al SEÑOR perecerán.
He aquí, el día del SEÑOR viene, cruel, con furia y ardiente ira, para convertir en desolación la tierra y exterminar de ella a sus pecadores.
Aterrados están los pecadores en Sion, el temblor se ha apoderado de los impíos. ¿Quién de nosotros habitará con el fuego consumidor? ¿Quién de nosotros habitará con las llamas eternas?
A espada morirán todos los pecadores de mi pueblo, los que dicen: ``No nos alcanzará ni se nos acercará la desgracia."
Y sucedió que estando El sentado {a la mesa} en la casa, he aquí, muchos recaudadores de impuestos y pecadores llegaron y se sentaron {a la mesa} con Jesús y sus discípulos.
Y cuando vieron {esto,} los fariseos dijeron a sus discípulos: ¿Por qué come vuestro Maestro con los recaudadores de impuestos y pecadores?
Mas id, y aprended lo que significa: ``MISERICORDIA QUIERO Y NO SACRIFICIO"; porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores.
Vino el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: ``Mirad, un hombre glotón y bebedor de vino, amigo de recaudadores de impuestos y de pecadores." Pero la sabiduría se justifica por sus hechos.
Entonces vino* a los discípulos y les dijo*: ¿Todavía estáis durmiendo y descansando? He aquí, ha llegado la hora, y el Hijo del Hombre es entregado en manos de pecadores.
Y sucedió que estando Jesús sentado {a la mesa} en casa de Leví, muchos recaudadores de impuestos y pecadores estaban comiendo con Jesús y sus discípulos; porque había muchos de ellos que le seguían.
Al ver los escribas de los fariseos que El comía con pecadores y recaudadores de impuestos, decían a sus discípulos: ¿Por qué El come y bebe con recaudadores de impuestos y pecadores?
Al oír {esto,} Jesús les dijo*: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los que están enfermos; no he venido a llamar a justos, sino a pecadores.
Vino* por tercera vez, y les dijo*: ¿Todavía estáis durmiendo y descansando? Basta ya; ha llegado la hora; he aquí, el Hijo del Hombre es entregado en manos de los pecadores.
Y los fariseos y sus escribas se quejaban a los discípulos de Jesús, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con los recaudadores de impuestos y con los pecadores?
No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento.
Si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman.
Si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo.
Si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores prestan a los pecadores para recibir de ellos la misma {cantidad.}
Ha venido el Hijo del Hombre, que come y bebe, y decís: ``Mirad, un hombre glotón y bebedor de vino, amigo de recaudadores de impuestos y de pecadores."
Respondiendo {Jesús,} les dijo: ¿Pensáis que estos galileos eran {más} pecadores que todos los {demás} galileos, porque sufrieron esto?
Todos los recaudadores de impuestos y los pecadores se acercaban a Jesús para oírle;
y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este recibe a los pecadores y come con ellos.
diciendo que el Hijo del Hombre debía ser entregado en manos de hombres pecadores, y ser crucificado, y al tercer día resucitar.
Sabemos que Dios no oye a los pecadores; pero si alguien teme a Dios y hace su voluntad, a éste oye.
Pero Dios demuestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno los muchos serán constituidos justos.
Nosotros {somos} judíos de nacimiento y no pecadores de entre los gentiles;
Pero si buscando ser justificados en Cristo, también nosotros hemos sido hallados pecadores, ¿es Cristo, entonces, ministro de pecado? ¡De ningún modo!
reconociendo esto: que la ley no ha sido instituida para el justo, sino para los transgresores y rebeldes, para los impíos y pecadores, para los irreverentes y profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas,
Palabra fiel y digna de ser aceptada por todos: Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, entre los cuales yo soy el primero.
Porque convenía que tuviéramos tal sumo sacerdote: santo, inocente, inmaculado, apartado de los pecadores y exaltado más allá de los cielos,
Considerad, pues, a aquel que soportó tal hostilidad de los pecadores contra sí mismo, para que no os canséis ni os desaniméis en vuestro corazón.
Acercaos a Dios, y El se acercará a vosotros. Limpiad vuestras manos, pecadores; y vosotros de doble ánimo, purificad vuestros corazones.
para ejecutar juicio sobre todos, y para condenar a todos los impíos de todas sus obras de impiedad, que han hecho impíamente, y de todas las cosas ofensivas que pecadores impíos dijeron contra El.