'Salen' en la Biblia
E hizo arrodillar los camellos fuera de la ciudad, junto a un pozo de agua, a la hora de la tarde, a la hora en que salen las doncellas por agua.
He aquí yo estoy junto a la fuente de agua, y las hijas de los varones de esta ciudad salen por agua.
Y si alguno vende a su hija por sierva, ella no saldrá {libre} como salen los siervos.
tres copas en forma de almendras en una caña, una manzana y una flor; y tres copas, en forma de almendras en la otra caña, una manzana y una flor; así pues, en las seis cañas que salen del candelero.
Habrá una manzana debajo de las dos cañas, de lo mismo, otra manzana debajo de las otras dos cañas, de lo mismo, otra manzana debajo de las otras dos cañas de lo mismo, en las seis cañas que salen del candelero.
y velad; y he aquí, si las hijas de Silo salen a tomar parte en las danzas, entonces saldréis de las viñas y tomaréis cada uno una mujer de las hijas de Silo, y volved a la tierra de Benjamín.
Se mostraron, pues, ambos a la guarnición de los filisteos, y los filisteos dijeron: He aquí los hebreos, que salen de las cavernas en que se habían escondido.
Y aconteció a la vuelta de un año, en el tiempo que salen los reyes a la guerra, que David envió a Joab, y a sus siervos con él, y a todo Israel; y destruyeron a los amonitas, y pusieron cerco a Rabá; mas David se quedó en Jerusalén.
Los extranjeros desfallecen, y salen temblando de sus fortalezas.
Y las otras dos partes de vosotros, es a saber, todos los que salen el sábado, tendréis la guardia de la Casa del SEÑOR junto al rey.
Y aconteció que en la primavera, en el tiempo en que los reyes salen {a la guerra,} Joab sacó el ejército y devastó la tierra de los hijos de Amón, y fue y puso sitio a Rabá; pero David se quedó en Jerusalén. Y Joab hirió a Rabá y la destruyó.
Porque al ver mi alimento salen mis gemidos, y mis clamores se derraman como agua.
A manera de un árbol, está verde delante del sol, y sus renuevos salen sobre su huerto;
Salen sus chiquitos como manada de ovejas, y sus hijos andan saltando.
He aquí, como asnos monteses en el desierto, salen a su obra madrugando para robar; el desierto es su mantenimiento y de sus hijos.
Sus hijos son sanos, crecen con el grano; salen y nunca más vuelven a ellas.
De su boca salen hachas de fuego, centellas de fuego proceden.
Los extranjeros desfallecen, y salen temblando de sus fortalezas.
No estés entre los que dan fianzas, entre los que salen de fiadores de préstamos.
las langostas, no tienen rey, y salen todas acuadrilladas;
He aquí, el SEÑOR tiene uno valiente y fuerte que viene como turbión de granizo, y como torbellino trastornador; como ímpetu de recias aguas que salen de madre, con fuerza de mano derriba a tierra.
Carga de las bestias del mediodía: Por tierra de tribulacion y de angustia, de donde salen la leona y el leon, la vibora y la serpiente que vuela, llevan sobre lomos de jumentos sus riquezas, y sus tesoros sobre corcovas de camellos, a un pueblo que no le
Así me dijo el SEÑOR: Ve, y ponte a la puerta de los hijos del pueblo, por la cual entran y salen los reyes de Judá, y a todas las puertas de Jerusalén,
¿No salen de la boca del Altísimo tanto el mal como el bien?
Y comerás pan de cebada cocido debajo de la ceniza; y lo cocerás con los estiércoles que salen del hombre, delante de los ojos de ellos.
Saca tu equipaje como equipaje del destierro, de día, ante sus ojos. Entonces sal tú por la tarde, ante sus ojos, como los que salen al destierro.
Y me dijo: Estas aguas salen a la región del oriente, y descenderán al desierto, y entrarán en el mar; y entradas en el mar, recibirán sanidad las aguas.
Y junto al arroyo, en su ribera de una parte y de otra, crecerá todo árbol de fruto de comer; su hoja nunca caerá, ni faltará su fruto; a sus meses madurará, porque sus aguas salen del Santuario; y su fruto será para comer, y su hoja para medicina.
{Su} resplandor es como la luz; tiene rayos {que salen} de su mano, y allí se oculta su poder.
Y el ángel me respondió, y me dijo: Estos son los cuatro espíritus de los cielos, que salen de donde están delante del Señor de toda la tierra.
Con uno de ellos salen los caballos negros hacia la tierra del norte, y los blancos salen tras ellos, mientras los tordos salen hacia la tierra del sur.
Entonces me llamó y me habló, diciendo: Mira, los que salen hacia la tierra del norte aplacan mi espíritu en la tierra del norte.
Los que las compran las matan y salen impunes, y el que las vende dice: `` ¿Bendito sea el SEÑOR, porque me he enriquecido!"; y ni sus propios pastores se compadecen de ellas.
Porque del corazón salen los malos pensamientos: muertes, adulterios, fornicaciones, hurtos, falsos testimonios, maledicencias.
Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios,
Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre.
Y hubo espanto en todos, y hablaban unos a otros, diciendo: ¿Qué palabra es ésta, que con autoridad y potencia manda a los espíritus inmundos, y salen?
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