'Salir' en la Biblia
Y aconteció que cuando Dios destruyó las ciudades del valle, se acordó Dios de Abraham e hizo salir a Lot de en medio de la destrucción, cuando destruyó las ciudades donde habitaba Lot.
Y sucedió que cuando Dios me hizo salir errante de la casa de mi padre, yo le dije a ella: ``Este es el favor que me harás: a cualquier lugar que vayamos, dirás de mí: `Es mi hermano.'"
Y José se apresuró {a salir,} pues se sintió profundamente conmovido a causa de su hermano y buscó {donde} llorar; y entró en {su} aposento y lloró allí.
José no pudo ya contenerse delante de todos los que estaban junto a él, y exclamó: Haced salir a todos de mi lado. Y no había nadie con él cuando José se dio a conocer a sus hermanos.
Y al salir de la presencia de Faraón, se encontraron con Moisés y Aarón, que los estaban esperando.
Ve, habla a Faraón, rey de Egipto, para que deje salir a los hijos de Israel de su tierra.
Tú hablarás todo lo que yo te mande, y Aarón tu hermano hablará a Faraón, para que deje salir de su tierra a los hijos de Israel.
Entonces dijo Moisés: He aquí, voy a salir de tu presencia y rogaré al SEÑOR que los enjambres de insectos se alejen mañana de Faraón, de sus siervos y de su pueblo; pero que Faraón no vuelva a obrar con engaño, no dejando ir al pueblo a ofrecer sacrificios al SEÑOR.
Pero Faraón endureció su corazón también esta vez y no dejó salir al pueblo.
Y Moisés y Aarón hicieron todas estas maravillas en presencia de Faraón; con todo, el SEÑOR endureció el corazón de Faraón, y {éste} no dejó salir de su tierra a los hijos de Israel.
Vais a salir hoy, en el mes de Abib.
de veinte años arriba, todos {los que pueden} salir a la guerra en Israel, tú y Aarón los contaréis por sus ejércitos.
De los hijos de Rubén, primogénito de Israel, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, uno por uno, todo varón de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Simeón, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, sus enumerados, según el número de nombres, uno por uno, todo varón de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Gad, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Judá, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Isacar, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Zabulón, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de José: de los hijos de Efraín, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Manasés, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Benjamín, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Dan, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Aser, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
De los hijos de Neftalí, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
Y todos los enumerados de los hijos de Israel por sus casas paternas, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra en Israel,
Levantad un censo de toda la congregación de los hijos de Israel de veinte años arriba por sus casas paternas, todo el que en Israel pueda salir a la guerra.
que salga y entre delante de ellos, y que los haga salir y entrar a fin de que la congregación del SEÑOR no sea como ovejas que no tienen pastor.
Si hay en medio de ti un hombre inmundo a causa de una emisión nocturna, debe salir fuera del campamento; no volverá a entrar al campamento.
Porque todos los del pueblo que salieron fueron circuncidados, pero todos los del pueblo que nacieron en el desierto, por el camino, después de salir de Egipto, no habían sido circuncidados.
Todavía estoy tan fuerte como el día en que Moisés me envió; como era entonces mi fuerza, así es ahora mi fuerza para la guerra, y para salir y para entrar.
Y él tomó a su gente, la dividió en tres compañías y puso emboscada en el campo; cuando miró y vio al pueblo salir de la ciudad, se levantó contra ellos y los mató.
Y los hijos de Benjamín, de sus ciudades, se reunieron en Guibeá para salir a combatir contra los hijos de Israel.
y Finees, hijo de Eleazar, hijo de Aarón, estaba delante de ella para {ministrar} en aquellos días), diciendo: ¿Volveré a salir otra vez a combatir contra los hijos de mi hermano Benjamín, o desistiré? Y el SEÑOR dijo: Subid, porque mañana lo entregaré en tu mano.
Cuando Saúl vio a David salir contra el filisteo, dijo a Abner, el comandante del ejército: Abner, ¿de quién es hijo este joven? Y Abner dijo: Por tu vida, oh rey, no sé.
Aquis llamó a David y le dijo: Vive el SEÑOR que tú {has sido} recto; tu salir y tu entrar en el ejército conmigo son agradables a mis ojos, pues no he hallado mal en ti desde el día en que te pasaste a mí hasta hoy. Sin embargo, no eres agradable a los ojos de los príncipes.
David, pues, se levantó temprano, él y sus hombres, para salir por la mañana y regresar a la tierra de los filisteos. Y los filisteos subieron a Jezreel.
Pero el pueblo dijo: No debes salir; porque si tenemos que huir, no harán caso de nosotros; aunque muera la mitad de nosotros, no harán caso de nosotros. Pero tú vales {por} diez mil de nosotros; ahora pues, será mejor que tú {estés listo} para ayudarnos desde la ciudad.
Y ahora, SEÑOR Dios mío, has hecho a tu siervo rey en lugar de mi padre David, aunque soy un muchacho y no sé cómo salir ni entrar.
Y él le dijo: Así dice el SEÑOR: ``Porque has dejado salir de {tu} mano al hombre a quien yo había destinado a la destrucción, he aquí, tu vida responderá por su vida y tu pueblo por su pueblo."
Y los capitanes de centenas hicieron conforme a todo lo que había ordenado el sacerdote Joiada. Y cada uno de ellos tomó sus hombres, los que habían de entrar en el día de reposo, junto con los que habían de salir el día de reposo, y vinieron al sacerdote Joiada.
``Pero conozco tu sentarte, tu salir y tu entrar, y tu furor contra mí.
Todos estos {fueron} hijos de Jediael, conforme a los jefes de sus casas paternas, diecisiete mil doscientos hombres fuertes y valientes, que estaban listos para salir con el ejército a la guerra.
Dame ahora sabiduría y conocimiento, para que pueda salir y entrar delante de este pueblo; porque, ¿quién podrá juzgar a este pueblo tuyo tan grande?
Y habitó Josafat en Jerusalén, y volvió a salir por entre el pueblo, desde Beerseba hasta la región montañosa de Efraín, y los hizo volver al SEÑOR, Dios de sus padres.
Y los levitas y todo Judá hicieron conforme a todo lo que había ordenado el sacerdote Joiada. Cada uno de ellos tomó sus hombres, los que habían de entrar en el día de reposo, junto con los que habían de salir el día de reposo, porque el sacerdote Joiada no despidió a {ninguno} de los grupos.
Y el sumo sacerdote Azarías y todos los sacerdotes lo miraron, y he aquí, {tenía} lepra en la frente; y le hicieron salir de allí a toda prisa, y también él mismo se apresuró a salir, porque el SEÑOR lo había herido.
Cuando el rey volvió del jardín del palacio al lugar donde estaban bebiendo vino, Amán se había dejado caer sobre el lecho donde {se hallaba} Ester. Entonces el rey dijo: ¿Aún se atreve a hacer violencia a la reina estando yo en la casa? Al salir la palabra de la boca del rey, cubrieron el rostro a Amán.
¿Por qué no morí yo al nacer, {o} expiré al salir del vientre?
para volver tu espíritu contra Dios y dejar salir de tu boca {tales} palabras?
hizo salir corrientes de la peña, e hizo descender aguas como ríos.
Has alejado de mí mis amistades, me has hecho objeto de repugnancia para ellos; encerrado estoy y no puedo salir.
{Al} salir el sol se esconden, y se echan en sus guaridas.
Ciertamente sufrirá el que sale fiador por un extraño, pero el que odia salir fiador está seguro.
El sol sale y el sol se pone, a su lugar se apresura, y de allí {vuelve} a salir.
Pues las estrellas del cielo y sus constelaciones no destellarán su luz; se oscurecerá el sol al salir, y la luna no irradiará su luz.
Porque he aquí, el SEÑOR va a salir de su lugar para castigar la iniquidad de los habitantes de la tierra, y la tierra pondrá de manifiesto su sangre derramada y no ocultará más a sus asesinados.
`Pero conozco tu sentarte, tu salir y tu entrar, y tu furor contra mí.
Alzad a lo alto vuestros ojos y ved quién ha creado estos {astros}: el que hace salir en orden a su ejército, {y} a todos llama por {su} nombre. Por la grandeza de su fuerza y la fortaleza de su poder no falta ni uno.
el que hace salir carro y caballo, ejército y fuerza (a una se echarán {y} no se levantarán, como pabilo han sido apagados {y} extinguidos):
({Esto sucedió} después de salir de Jerusalén el rey Jeconías y la reina madre, los oficiales de la corte, los príncipes de Judá y de Jerusalén, los artífices y los herreros.)
Con muro me ha cercado y no puedo salir, ha hecho pesadas mis cadenas.
Y sucedió que al salir el sol, dispuso Dios un sofocante viento solano, y el sol hirió la cabeza de Jonás y él desfallecía, y deseaba con {toda} su alma morir, diciendo: Mejor me es la muerte que la vida.
La haré salir --declara el SEÑOR de los ejércitos-- y entrará en casa del ladrón y en casa del que jura por mi nombre en falso; y pasará la noche dentro de su casa y la consumirá junto con sus maderas y sus piedras.
para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos; porque El hace salir su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos.
Y al salir ellos de allí, he aquí, le trajeron un mudo endemoniado.
Y cualquiera que no os reciba ni oiga vuestras palabras, al salir de esa casa o de esa ciudad, sacudid el polvo de vuestros pies.
Pero al salir aquel siervo, encontró a uno de sus consiervos que le debía cien denarios, y echándole mano, {lo} ahogaba, diciendo: ``Paga lo que debes."
Volvió a salir como a la hora sexta y a la novena, e hizo lo mismo.
Al salir de Jericó, le siguió una gran multitud.
E inmediatamente, al salir del agua, vio que los cielos se abrían, y que el Espíritu como paloma descendía sobre El;
Y en cualquier lugar que no os reciban ni os escuchen, al salir de allí, sacudid el polvo de la planta de vuestros pies en testimonio contra ellos.
Volviendo a salir de la región de Tiro, pasó por Sidón y {llegó} al mar de Galilea, atravesando la región de Decápolis.
Y El les dijo: Esta clase con nada puede salir, sino con oración.
Y cuando atardecía, solían salir fuera de la ciudad.
{Es} como un hombre que se fue de viaje, {y} al salir de su casa dejó a sus siervos encargados, {asignándole} a cada uno su tarea, y ordenó al portero que estuviera alerta.
Y en cuanto a los que no os reciban, al salir de esa ciudad, sacudid el polvo de vuestros pies en testimonio contra ellos.
Al día siguiente Jesús se propuso salir para Galilea, y encontró* a Felipe, y le dijo*: Sígueme.
Y Natanael le dijo: ¿Puede algo bueno salir de Nazaret? Felipe le dijo*: Ven, y ve.
Pero habiéndoles ordenado salir fuera del concilio, deliberaban entre sí,
Al salir ellos del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y no lo vio más el eunuco, que continuó su camino gozoso.
Mas Pedro, haciendo salir a todos, se arrodilló y oró, y volviéndose al cadáver, dijo: Tabita, levántate. Y ella abrió los ojos, y al ver a Pedro, se incorporó.
Al salir Pablo y Bernabé, la gente les rogaba que el siguiente día de reposo les hablaran de estas cosas.
no {me refería a} la gente inmoral de este mundo, o a los avaros y estafadores, o a los idólatras, porque entonces tendríais que salir del mundo.
Porque no queremos que ignoréis, hermanos, acerca de nuestra aflicción sufrida en Asia, porque fuimos abrumados sobremanera, más allá de nuestras fuerzas, de modo que hasta perdimos la esperanza de {salir con} vida.
Y vi {salir} de la boca del dragón, de la boca de la bestia y de la boca del falso profeta, a tres espíritus inmundos semejantes a ranas;