'Sana' en la Biblia
Yo dije: Oh SEÑOR, ten piedad de mí; sana mi alma, porque contra ti he pecado.
Has hecho temblar la tierra, la has hendido; sana sus hendiduras, porque se tambalea.
El es el que perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus enfermedades;
sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas.
Hay quien habla sin tino como golpes de espada, pero la lengua de los sabios sana.
Pero Jesús, volviéndose y viéndola, dijo: Hija, ten ánimo, tu fe te ha sanado. Y al instante la mujer quedó sana.
Entonces dijo* al hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y le fue restaurada, sana como la otra.
Entonces, respondiendo Jesús, le dijo: Oh mujer, grande es tu fe; que te suceda como deseas. Y su hija quedó sana desde aquel momento.
Y mirándolos en torno con enojo, entristecido por la dureza de sus corazones, dijo* al hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y su mano quedó sana.
Y {Jesús} le dijo: Hija, tu fe te ha sanado; vete en paz y queda sana de tu aflicción.
Y después de mirarlos a todos a su alrededor, dijo al hombre: Extiende tu mano. Y él lo hizo {así,} y su mano quedó sana.
Y Pedro le dijo: Eneas, Jesucristo te sana; levántate y haz tu cama. Y al instante se levantó.
para los inmorales, homosexuales, secuestradores, mentirosos, los que juran en falso, y para cualquier otra cosa que es contraria a la sana doctrina,
Porque vendrá tiempo cuando no soportarán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oídos, acumularán para sí maestros conforme a sus propios deseos;
reteniendo la palabra fiel que es conforme a la enseñanza, para que sea capaz también de exhortar con sana doctrina y refutar a los que contradicen.
Pero en cuanto a ti, enseña lo que está de acuerdo con la sana doctrina:
{con} palabra sana {e} irreprochable, a fin de que el adversario se avergüence al no tener nada malo que decir de nosotros.