'Días' en la Biblia
Dios es el que juzga al justo; y Dios está airado todos los días contra el impío.
Vida te demandó, y le diste largura de días eternamente y para siempre.
Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa de Jehová moraré por largos días.
Una cosa he demandado de Jehová, ésta buscaré: Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo.
¿Quién es el hombre que desea vida, que desea muchos días para ver el bien?
Conoce Jehová los días de los perfectos; y la heredad de ellos será para siempre.
No serán avergonzados en el mal tiempo; y en los días de hambre serán saciados.
Hazme saber, Jehová, mi fin, y cuál sea la medida de mis días; sepa yo cuán frágil soy.
He aquí diste a mis días término corto, y mi edad es como nada delante de ti: Ciertamente el hombre, aun en su mejor estado, es completa vanidad. (Selah)
Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, mientras me dicen todos los días: ¿Dónde está tu Dios?
«Al Músico principal; para los hijos de Coré: Masquil» Oh Dios, con nuestros oídos hemos oído, nuestros padres nos han contado la obra que hiciste en sus días, en los tiempos antiguos.
¿Por qué he de temer en los días de adversidad, cuando la iniquidad de mis acechadores me rodee?
Mas tú, oh Dios, los harás descender al pozo de la destrucción: Los hombres sanguinarios y engañadores no llegarán a la mitad de sus días: Pero yo confiaré en ti.
Todos los días pervierten mis palabras; contra mí son todos sus pensamientos para mal.
Días sobre días añadirás al rey; sus años serán como generación y generación.
En sus días florecerá la justicia, y abundancia de paz hasta que no haya luna.
Consideraba los días desde el principio, los años de los siglos.
Por tanto, consumió sus días en vanidad, y sus años en tribulación.
Y estableceré su simiente para siempre, y su trono como los días de los cielos.
Has acortado los días de su juventud; le has cubierto de afrenta. (Selah)
Porque todos nuestros días declinan a causa de tu ira; acabamos nuestros años como un pensamiento.
Los días de nuestra edad son setenta años; y en los más robustos son ochenta años, con todo, su fortaleza es molestia y trabajo; porque es cortado presto, y volamos.
Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.
De mañana sácianos de tu misericordia; y cantaremos y nos alegraremos todos nuestros días.
Alégranos conforme a los días que nos afligiste, y los años que vimos el mal.
para darle reposo de los días de aflicción, en tanto que para el impío se cava el hoyo.
Porque mis días se han consumido como humo; y mis huesos cual tizón están quemados.
Mis días son como la sombra que se va; y me he secado como la hierba.
Él debilitó mi fuerza en el camino; acortó mis días.
Dije: Dios mío, no me cortes en la mitad de mis días; por generación de generaciones son tus años.
El hombre, como la hierba son sus días, florece como la flor del campo;
Sean pocos sus días; tome otro su oficio.
¿Cuántos son los días de tu siervo? ¿Cuándo harás juicio contra los que me persiguen?
Jehová te bendiga desde Sión, y veas el bien de Jerusalén todos los días de tu vida;
Me acordé de los días antiguos; meditaba en todas tus obras, reflexionaba en las obras de tus manos.
El hombre es semejante a la vanidad: Sus días son como la sombra que pasa.