'Espada' en la Biblia
``En vano he herido a sus hijos, No han aceptado corrección. La espada de ustedes ha devorado a sus profetas Como león destructor.
Entonces dije: `` ¡Ah, Señor DIOS! Ciertamente has engañado en gran manera a este pueblo y a Jerusalén, diciendo: `Paz tendrán,' cuando tienen la espada al cuello."
Han mentido acerca del SEÑOR Y dijeron: ``El no {existe}. Ninguna calamidad vendrá sobre nosotros, Y no veremos ni espada ni hambre.
Devorará tu cosecha y tu pan, Devorará a tus hijos y a tus hijas, Devorará tus ovejas y tus vacas, Devorará tus viñas y tus higueras; A espada destruirá tus ciudades fortificadas en que confías.
No salgas al campo Ni andes por el camino, Porque espada tiene el enemigo, {Hay} terror por todas partes.
"Los esparciré entre naciones que ni ellos ni sus padres conocieron, y enviaré tras ellos la espada hasta aniquilarlos."
Así, pues, dice el SEÑOR de los ejércitos: ``Voy a castigarlos. Los jóvenes morirán a espada, sus hijos e hijas morirán de hambre,
Sobre todas las alturas desoladas del desierto Han venido destructores, Porque la espada del SEÑOR devora De un extremo de la tierra al otro; No hay paz para nadie.
"Cuando ayunen, no escucharé su clamor; cuando ofrezcan holocausto y ofrenda de cereal, no los aceptaré; sino que con espada, con hambre y con pestilencia los destruiré."
Pero yo dije: `` ¡Ah, Señor DIOS! Los profetas les dicen: `No verán espada ni tendrán hambre, sino que les daré paz verdadera en este lugar.'"
"Por tanto, así dice el SEÑOR: `En cuanto a los profetas que profetizan en Mi nombre sin que Yo los haya enviado, y que dicen: ``No habrá espada ni hambre en esta tierra," a espada y de hambre esos profetas perecerán.'
"También el pueblo a quien profetizan estará tirado por las calles de Jerusalén a causa del hambre y de la espada. No habrá quien los entierre a ellos, ni a sus mujeres, ni a sus hijos, ni a sus hijas, pues derramaré sobre ellos su maldad.
Si salgo al campo, Veo muertos a espada; Y si entro en la ciudad, Hay enfermedades por el hambre. Porque tanto el profeta como el sacerdote Andan errantes en una tierra que no conocen.'"
"Y cuando te digan: ` ¿Adónde iremos?' les responderás: `Así dice el SEÑOR: ``Los {destinados} para la muerte, a la muerte; Los {destinados} para la espada, a la espada; Los {destinados} para el hambre, al hambre, Y los {destinados} para el cautiverio, al cautiverio."'
``Y enviaré sobre ellos cuatro clases {de males}," declara el SEÑOR: ``la espada para matar, los perros para despedazar, y las aves del cielo y las bestias de la tierra para devorar y destruir.
Languidece la que dio a luz siete {hijos}; Exhala su alma. Se puso su sol siendo aún de día, Ha sido avergonzada y humillada. A sus sobrevivientes los entregaré a la espada Delante de sus enemigos," declara el SEÑOR.
``De enfermedades crueles morirán; no serán llorados ni sepultados. Serán como estiércol sobre la superficie de la tierra. A espada y por hambre serán acabados, y sus cadáveres servirán de alimento para las aves del cielo y para las bestias de la tierra."
Por tanto, entrega sus hijos al hambre, Y abandónalos al poder de la espada. Que se queden sus mujeres sin hijos y viudas; Sean sus maridos asesinados, Sus jóvenes heridos a espada en la batalla.
"Y haré nulo el consejo de Judá y de Jerusalén en este lugar, y los haré caer a espada delante de sus enemigos y a mano de los que buscan su vida, y entregaré sus cadáveres por alimento a las aves del cielo y a las bestias de la tierra.
"Porque así dice el SEÑOR: `Te voy a convertir en terror para ti mismo y para todos tus amigos; ellos caerán por la espada de tus enemigos, y tus ojos lo verán. Entregaré a todo Judá en manos del rey de Babilonia, y él los llevará como desterrados a Babilonia y los matará a espada.
"Y después," declara el SEÑOR, ``a Sedequías, rey de Judá, a sus siervos, al pueblo y a los que sobrevivan en esta ciudad de la pestilencia, de la espada y del hambre, los entregaré en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, en manos de sus enemigos y en manos de los que buscan sus vidas; y él los herirá a filo de espada. No los perdonará ni les tendrá piedad ni compasión."'
"El que se quede en esta ciudad morirá a espada, de hambre y de pestilencia; pero el que salga y se entregue a los Caldeos que los sitian, vivirá, y tendrá su propia vida como botín.
~`Y enviaré sobre ellos espada, hambre y pestilencia hasta que sean exterminados de la tierra que les di a ellos y a sus padres.'"
"Ellas beberán y se tambalearán y enloquecerán a causa de la espada que enviaré en medio de ellas."
``Tú les dirás: `Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: ``Beban, embriáguense, vomiten, cáiganse y no se levanten a causa de la espada que Yo enviaré en medio de ustedes."'
"Porque Yo comienzo a causar mal en {esta} ciudad que se llama por Mi nombre, ¿y quedarán ustedes sin castigo alguno? No quedarán sin castigo, porque llamo a la espada contra todos los habitantes de la tierra," declara el SEÑOR de los ejércitos.'
Ha llegado el estruendo hasta el fin de la tierra, Porque el SEÑOR tiene un pleito contra las naciones; Entra en juicio contra toda carne; A los impíos, los entrega a la espada,' declara el SEÑOR."
El ha abandonado como un león Su guarida, Porque su tierra se ha convertido en horror Por el furor de la {espada} opresora, Y a causa de Su ardiente ira."
Y trajeron a Urías de Egipto y lo llevaron al rey Joacim, quien lo mató a espada y echó su cadáver a la fosa común.
"Y sucederá que la nación o el reino que no sirva a Nabucodonosor, rey de Babilonia, y que no ponga su cuello bajo el yugo del rey de Babilonia, a esa nación castigaré con espada, con hambre y con pestilencia," declara el SEÑOR, ``hasta que Yo la haya destruido por su mano.
" ¿Por qué han de morir, tú y tu pueblo, por la espada, el hambre y la pestilencia, tal como ha hablado el SEÑOR de la nación que no sirva al rey de Babilonia?
así dice el SEÑOR de los ejércitos: `Yo envío contra ellos la espada, el hambre y la pestilencia, y los pondré como higos reventados que de podridos no se pueden comer.
~`Los perseguiré con la espada, con el hambre y con la pestilencia, y los haré motivo de espanto para todos los reinos de la tierra, para que sean maldición, horror, burla y oprobio entre todas las naciones adonde los he arrojado.
Así dice el SEÑOR: ``Ha hallado gracia en el desierto El pueblo que escapó (sobrevivió) de la espada: Israel, cuando iba en busca de su reposo."
~`Los terraplenes de asalto han llegado a la ciudad para tomarla. La ciudad va a ser entregada en manos de los Caldeos que pelean contra ella, por causa de la espada, el hambre y la pestilencia. Lo que habías hablado ha venido a ser, y Tú {lo} estás viendo.
``Ahora pues, así dice el SEÑOR, Dios de Israel, en cuanto a esta ciudad de la cual ustedes dicen: `Va a ser entregada en mano del rey de Babilonia por la espada, por el hambre y por la pestilencia.'
"Porque así dice el SEÑOR, Dios de Israel, acerca de las casas de esta ciudad y acerca de las casas de los reyes de Judá, las cuales han sido derribadas {para hacer defensas} contra los terraplenes de asalto y contra la espada:
"Sin embargo oye la palabra del SEÑOR, oh Sedequías, rey de Judá. Así dice el SEÑOR acerca de ti: `No morirás a espada;
``Por tanto, así dice el SEÑOR: `Ustedes no Me han obedecido, al no proclamar libertad cada uno a su hermano y cada uno a su prójimo. Por eso proclamo contra ustedes libertad,' declara el SEÑOR `a la espada, a la pestilencia y al hambre; y haré de ustedes motivo de espanto para todos los reinos de la tierra.
``Así dice el SEÑOR: `El que se quede en esta ciudad morirá a espada, de hambre o de pestilencia, pero el que se pase a los Caldeos, vivirá y tendrá su vida por botín y seguirá viviendo.'
"Porque ciertamente te libraré, y no caerás a espada; antes bien, tendrás tu vida por botín, porque confiaste en Mí," declara el SEÑOR.'"
se levantó Ismael, hijo de Netanías, y los diez hombres que estaban con él, e hirieron a espada a Gedalías, hijo de Ahicam, hijo de Safán, y mataron al que el rey de Babilonia había puesto para gobernar sobre la tierra.
entonces sucederá que la espada que ustedes temen, los alcanzará allí en la tierra de Egipto, y el hambre que les preocupa, les seguirá de cerca allí {en} Egipto, y allí morirán.
``Así pues, todos los hombres que se obstinen en ir a Egipto para residir allí, morirán a espada, de hambre y de pestilencia. No les quedará sobreviviente ni quien escape del mal que voy a traer sobre ellos."'"
Ahora pues, sépanlo bien, que morirán a espada, de hambre y de pestilencia en el lugar adonde desean ir a residir.
"Vendrá y herirá la tierra de Egipto; los que sean para la muerte, a la muerte, los que para el cautiverio, al cautiverio, y los que para la espada, a la espada.
~`Quitaré el remanente de Judá que ha decidido entrar en la tierra de Egipto para residir allí, y serán acabados en la tierra de Egipto; caerán a espada, por el hambre serán acabados. Tanto el pequeño como el grande morirán a espada y de hambre. Serán {motivo} de maldición, de horror, de imprecación y de oprobio.
~`Castigaré a los que moran en la tierra de Egipto, como he castigado a Jerusalén, con espada, con hambre y con pestilencia.
"Pero desde que dejamos de quemar sacrificios a la reina del cielo y de derramarle libaciones, carecemos de todo, y por la espada y por el hambre hemos sido acabados."
`Pues Yo velo sobre ellos para mal y no para bien, y serán acabados todos los hombres de Judá que están en la tierra de Egipto por la espada y por el hambre hasta que sean totalmente exterminados.
~`Y los que escapen de la espada, pocos en número, volverán de la tierra de Egipto a la tierra de Judá. Entonces sabrá todo el remanente de Judá que ha ido a la tierra de Egipto para residir allí, qué palabra ha de permanecer, si la Mía o la de ellos.
Pero aquel día es para el Señor, DIOS de los ejércitos, Día de venganza, para vengarse de Sus enemigos; La espada devorará y se saciará Y se empapará con su sangre; Pues habrá una matanza para el Señor, DIOS de los ejércitos, En la tierra del norte, junto al Río Eufrates.
``Anuncien en Egipto y háganlo oír en Migdol, Háganlo oír también en Menfis y en Tafnes; Digan: `Ponte en pie y prepárate, Porque la espada ha devorado a los que te rodean.'
Han tropezado muchas veces; En verdad, han caído uno sobre otro. Entonces dijeron: `Levántate y volvamos A nuestro pueblo y a nuestra tierra natal, Ante la espada opresora.'
¡Ay, espada del SEÑOR! ¿Hasta cuándo estarás inquieta? Vuélvete a tu vaina, Reposa y cálmate.
Ya no hay alabanza para Moab, En Hesbón han tramado mal contra ella: `Vengan y quitémosla de entre las naciones.' También tú, Madmena, serás silenciada, La espada te seguirá.
Maldito el que hace la obra del SEÑOR con engaño; Maldito el que retrae su espada de la sangre.
Destrozaré a Elam delante de sus enemigos Y delante de los que buscan sus vidas; Traeré sobre ellos calamidad, El ardor de Mi ira,' declara el SEÑOR, `y enviaré tras ellos la espada Hasta que los haya acabado.
Exterminen de Babilonia al sembrador Y al que maneja la hoz en tiempo de la siega; Ante la espada opresora, Cada uno volverá a su pueblo, Cada uno huirá a su tierra.
Pasen a espada todos sus novillos; Que desciendan al matadero. ¡Ay de ellos, porque ha llegado su día, La hora de su castigo!
Espada contra los Caldeos," declara el SEÑOR, ``y contra los habitantes de Babilonia, Contra sus oficiales y sus sabios.
Espada contra los impostores (falsos profetas, oráculos sacerdotes), y se volverán necios. Espada contra sus valientes, y serán destrozados.
Espada contra sus caballos y contra sus carros, Y contra todos los extranjeros que están en medio de ella, Y serán como mujeres. Espada contra sus tesoros, y serán saqueados.
Los que escaparon de la espada, Caminen, no se detengan; Acuérdense desde lejos del SEÑOR, Y venga Jerusalén a su memoria.