'Judá' en la Biblia
Concibió una vez más y dio a luz un hijo, y dijo: Esta vez alabaré al SEÑOR; así que le puso por nombre Judá; y dejó de dar a luz.
Hijos de Lea: Rubén, el primogénito de Jacob, después Simeón, Leví, Judá, Isacar y Zabulón.
Y Judá dijo a sus hermanos: ¿Qué ganaremos con matar a nuestro hermano y ocultar su sangre?
Sucedió por aquel tiempo que Judá se separó de sus hermanos, y visitó a un adulamita llamado Hira.
Y allí vio Judá a la hija de un cananeo llamado Súa; la tomó, y se llegó a ella.
Entonces Judá tomó mujer para Er su primogénito, la cual se llamaba Tamar.
Pero Er, primogénito de Judá, era malvado ante los ojos del SEÑOR, y el SEÑOR le quitó la vida.
Entonces Judá dijo a Onán: Llégate a la mujer de tu hermano, y cumple con ella tu deber como cuñado, y levanta descendencia a tu hermano.
Entonces Judá dijo a su nuera Tamar: Quédate viuda en casa de tu padre hasta que crezca mi hijo Sela; pues pensaba: Temo que él muera también como sus hermanos. Así que Tamar se fue y se quedó en casa de su padre.
Pasaron muchos días y murió la hija de Súa, mujer de Judá. Y pasado el duelo, Judá subió a los trasquiladores de sus ovejas en Timnat, él y su amigo Hira adulamita.
Cuando la vio Judá, pensó que {era} una ramera, pues se había cubierto el rostro.
Cuando Judá envió el cabrito por medio de su amigo el adulamita, para recobrar la prenda de mano de la mujer, no la halló.
Y él volvió donde Judá, y {le} dijo: No la encontré; y además, los hombres del lugar dijeron: ``Aquí no ha habido ninguna ramera."
Entonces Judá dijo: Que se quede con las prendas, para que no seamos causa de burla. Ya ves que envié este cabrito, y tú no la has encontrado.
Y sucedió que como a los tres meses, informaron a Judá, diciendo: Tu nuera Tamar ha fornicado, y he aquí, ha quedado encinta a causa de las fornicaciones. Entonces Judá dijo: Sacadla y que sea quemada.
Judá {los} reconoció, y dijo: Ella es más justa que yo, por cuanto yo no la di {por mujer} a mi hijo Sela. Y no volvió a tener más relaciones con ella.
Pero Judá le respondió, diciendo: Aquel hombre claramente nos advirtió: ``No veréis mi rostro si vuestro hermano no está con vosotros."
Y Judá dijo a su padre Israel: Envía al muchacho conmigo, y nos levantaremos e iremos, para que vivamos y no perezcamos, tanto nosotros como tú y nuestros pequeños.
Cuando Judá llegó con sus hermanos a casa de José, él estaba aún allí, y ellos cayeron a tierra delante de él.
Entonces dijo Judá: ¿Qué podemos decir a mi señor? ¿Qué podemos hablar y cómo nos justificaremos? Dios ha descubierto la iniquidad de tus siervos; he aquí, somos esclavos de mi señor, tanto nosotros como aquel en cuyo poder fue encontrada la copa.
Entonces Judá se le acercó, y dijo: Oh señor mío, permite a tu siervo hablar una palabra a los oídos de mi señor, y que no se encienda tu ira contra tu siervo, pues tú eres como Faraón mismo.
Los hijos de Judá: Er, Onán, Sela, Fares y Zara (pero Er y Onán murieron en la tierra de Canaán). Y los hijos de Fares fueron Hezrón y Hamul.
Y {Jacob} envió a Judá delante de sí a José, para indicar delante de él {el camino} a Gosén; y llegaron a la tierra de Gosén.
A ti Judá, te alabarán tus hermanos; tu mano en la cerviz de tus enemigos; se inclinarán a ti los hijos de tu padre.
Cachorro de león es Judá; de la presa, hijo mío, has subido. Se agazapa, se echa como león, o como leona, ¿quién lo despertará?
El cetro no se apartará de Judá, ni la vara de gobernante de entre sus pies, hasta que venga Siloh, y a él {sea dada} la obediencia de los pueblos.
Mira, he llamado por nombre a Bezaleel, hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá.
Entonces Moisés dijo a los hijos de Israel: Mirad, el SEÑOR ha llamado por nombre a Bezaleel, hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá.
Y Bezaleel, hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá, hizo todo lo que el SEÑOR había mandado a Moisés.
De los hijos de Judá, {fueron contados por} su registro genealógico, por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, de veinte años arriba, todo {el que podía} salir a la guerra;
los enumerados de la tribu de Judá {fueron} setenta y cuatro mil seiscientos.
Los que acampen al oriente, hacia la salida del sol, {serán los} de la bandera del campamento de Judá, según sus ejércitos. El jefe de los hijos de Judá, Naasón, hijo de Aminadab,
El total de los enumerados del campamento de Judá: ciento ochenta y seis mil cuatrocientos, según sus ejércitos. Ellos partirán primero.
Y el que presentó su ofrenda el primer día fue Naasón, hijo de Aminadab, de la tribu de Judá.
La bandera del campamento de los hijos de Judá, según sus ejércitos, partió primero, con Naasón, hijo de Aminadab, al frente de su ejército;
de la tribu de Judá, Caleb, hijo de Jefone;
Los hijos de Judá: Er y Onán; pero Er y Onán murieron en la tierra de Canaán.
Y los hijos de Judá según sus familias fueron: de Sela, la familia de los selaítas; de Fares, la familia de los faresitas; de Zera, la familia de los zeraítas.
Estas son las familias de Judá según los que fueron contados en ellas: setenta y seis mil quinientos.
Y estos son los nombres de los hombres: de la tribu de Judá, Caleb, hijo de Jefone.
Cuando pases el Jordán, éstos estarán sobre el monte Gerizim para bendecir al pueblo: Simeón, Leví, Judá, Isacar, José y Benjamín.
En cuanto a Judá, esto dijo: Escucha, oh SEÑOR, la voz de Judá, y tráelo a su pueblo. Con sus manos luchó por ellos; sé tú su ayuda contra sus adversarios.
todo Neftalí, la tierra de Efraín y de Manasés, toda la tierra de Judá hasta el mar Occidental,
Mas los hijos de Israel fueron infieles en cuanto al anatema, porque Acán, hijo de Carmi, hijo de Zabdi, hijo de Zera, de la tribu de Judá, tomó de las cosas dedicadas al anatema; y la ira del SEÑOR se encendió contra los hijos de Israel.
Y Josué se levantó muy de mañana, e hizo acercar a Israel por tribus, y fue designada la tribu de Judá.
Mandó acercar a las familias de Judá, y fue designada la familia de los de Zera; e hizo acercar a la familia de Zera, hombre por hombre, y Zabdi fue designado.
Mandó acercar su casa hombre por hombre; y fue designado Acán, hijo de Carmi, hijo de Zabdi, hijo de Zera, de la tribu de Judá.
Y por aquel tiempo Josué fue y destruyó a los anaceos de la región montañosa, de Hebrón, de Debir, de Anab, de toda la región montañosa de Judá y de toda la región montañosa de Israel. Josué los destruyó por completo con sus ciudades.
Entonces los hijos de Judá vinieron a Josué en Gilgal, y Caleb, hijo de Jefone cenezeo, le dijo: Tú sabes lo que el SEÑOR dijo a Moisés, hombre de Dios, acerca de ti y de mí en Cades-barnea.
La {parte} que tocó en suerte a la tribu de los hijos de Judá conforme a sus familias, llegaba hasta la frontera de Edom, hacia el sur, hasta el desierto de Zin al extremo sur.
El límite occidental {era} el mar Grande, es decir, {su} costa. Este es el límite alrededor de los hijos de Judá conforme a sus familias.
Y dio a Caleb, hijo de Jefone, una porción entre los hijos de Judá, según el mandato del SEÑOR a Josué, {es decir,} Quiriat-arba, {siendo Arba} el padre de Anac, es decir, Hebrón.
Esta es la heredad de la tribu de los hijos de Judá conforme a sus familias.
Y las ciudades al extremo de la tribu de los hijos de Judá, hacia la frontera de Edom en el sur, fueron: Cabseel, Edar, Jagur,
Mas a los jebuseos, habitantes de Jerusalén, los hijos de Judá no pudieron expulsarlos; por tanto, los jebuseos habitan hasta hoy en Jerusalén con los hijos de Judá.
Y la dividirán en siete partes; Judá se quedará en su territorio en el sur, y la casa de José se quedará en su territorio en el norte.
Y salió la suerte de la tribu de los hijos de Benjamín conforme a sus familias, y el territorio de su suerte estaba entre los hijos de Judá y los hijos de José.
Y el límite doblaba {allí} y se extendía hacia el sur por el lado occidental, desde el monte que está frente a Bet-horón hacia el sur; y terminaba en Quiriat-baal, es decir, Quiriat-jearim, ciudad de los hijos de Judá. Este {era} el límite occidental.
La segunda suerte tocó a Simeón, a la tribu de los hijos de Simeón conforme a sus familias, y su heredad estaba en medio de la heredad de los hijos de Judá.
La heredad de los hijos de Simeón {se tomó} de la porción de los hijos de Judá, porque la porción de los hijos de Judá era demasiado grande para ellos; los hijos de Simeón recibieron, pues, heredad en medio de la heredad de Judá.
Entonces el límite doblaba al occidente hacia Aznot-tabor, y de allí seguía a Hucoc; alcanzaba a Zabulón en el sur, tocaba a Aser en el occidente y a Judá en el Jordán hacia el oriente.
Y ellos separaron a Cedes en Galilea, en la región montañosa de Neftalí, y a Siquem en la región montañosa de Efraín, y a Quiriat-arba, es decir, Hebrón, en la región montañosa de Judá.
Y la suerte cayó en las familias de los coatitas. Y a los hijos del sacerdote Aarón, que eran de los levitas, les tocaron en suerte trece ciudades de la tribu de Judá, de la tribu de Simeón y de la tribu de Benjamín;
Les dieron estas ciudades que {aquí} se mencionan por nombre, de la tribu de los hijos de Judá y de la tribu de los hijos de Simeón;
Les dieron Quiriat-arba, {siendo Arba} el padre de Anac, es decir, Hebrón, en la región montañosa de Judá, con las tierras de pasto alrededor.
Y el SEÑOR respondió: Judá subirá; he aquí, yo he entregado el país en sus manos.
Entonces Judá dijo a su hermano Simeón: Sube conmigo al territorio que me ha tocado, para que peleemos contra los cananeos; yo también iré contigo al territorio que te ha tocado. Y Simeón fue con él.
Subió Judá, y el SEÑOR entregó en sus manos a los cananeos y a los ferezeos, y derrotaron a diez mil hombres en Bezec.
Y pelearon los hijos de Judá contra Jerusalén y la tomaron, la pasaron a filo de espada y prendieron fuego a la ciudad.
Después descendieron los hijos de Judá a pelear contra los cananeos que vivían en la región montañosa, en el Neguev y en las tierras bajas.
Y Judá marchó contra los cananeos que habitaban en Hebrón (el nombre de Hebrón antes {era} Quiriat-arba); e hirieron a Sesai, a Ahimán y a Talmai.
Y los descendientes del ceneo, suegro de Moisés, subieron de la ciudad de las palmeras con los hijos de Judá, al desierto de Judá que está al sur de Arad; y fueron y habitaron con el pueblo.
Entonces Judá fue con Simeón su hermano, y derrotaron a los cananeos que vivían en Sefat, y la destruyeron por completo. Por eso pusieron por nombre a la ciudad, Horma.
Y Judá tomó a Gaza con su territorio, a Ascalón con su territorio y a Ecrón con su territorio.
El SEÑOR estaba con Judá, que tomó posesión de la región montañosa, pero no pudo expulsar a los habitantes del valle porque éstos tenían carros de hierro.
Y los hijos de Amón cruzaron el Jordán para pelear también contra Judá, contra Benjamín y contra la casa de Efraín, y se angustió Israel en gran manera.
Subieron los filisteos y acamparon en Judá, y se esparcieron por Lehi.
Y los hombres de Judá dijeron: ¿Por qué habéis subido contra nosotros? Y ellos dijeron: Hemos subido para prender a Sansón a fin de hacerle como él nos ha hecho.
Tres mil hombres de Judá descendieron a la hendidura de la peña de Etam, y dijeron a Sansón: ¿No sabes que los filisteos reinan sobre nosotros? ¿Qué, pues, es esto que nos has hecho? Y él les dijo: Como ellos me hicieron, así les he hecho.
Y había un joven de Belén de Judá, de la familia de Judá, que era levita y forastero allí.
Y el hombre salió de la ciudad, de Belén de Judá, para residir donde encontrara {lugar;} y mientras proseguía su camino, llegó a la región montañosa de Efraín, a la casa de Micaía.
Y Micaía le dijo: ¿De dónde vienes? Y él le respondió: Soy un levita de Belén de Judá; y voy a residir donde encuentre {lugar.}
Subieron y acamparon en Quiriat-jearim en Judá. Por tanto, llamaron aquel lugar Mahané-dan hasta hoy; he aquí, está al occidente de Quiriat-jearim.
En aquellos días, cuando no había rey en Israel, había un levita que residía en la parte más remota de la región montañosa de Efraín, el cual tomó para sí una concubina de Belén de Judá.
Pero su concubina cometió adulterio contra él, y ella se fue de su lado, a la casa de su padre en Belén de Judá, y estuvo allí por espacio de cuatro meses.
Y él le dijo: Estamos pasando de Belén de Judá a la parte más remota de la región montañosa de Efraín, {pues} soy de allí. Fui hasta Belén de Judá, y {ahora} voy a mi casa, pero no hay quien me reciba en su casa.
Los hijos de Israel se levantaron, subieron a Betel, y consultaron a Dios, y dijeron: ¿Quién de nosotros subirá primero a pelear contra los hijos de Benjamín? Entonces el SEÑOR dijo: Judá {subirá} primero.
Aconteció que en los días en que gobernaban los jueces, hubo hambre en el país. Y un hombre de Belén de Judá fue a residir en los campos de Moab con su mujer y sus dos hijos.
Aquel hombre se llamaba Elimelec, y su mujer se llamaba Noemí. Los nombres de sus dos hijos {eran} Mahlón y Quelión, efrateos de Belén de Judá. Y llegaron a los campos de Moab y allí se quedaron.
Salió, pues, del lugar donde estaba, y sus dos nueras con ella, y se pusieron en camino para volver a la tierra de Judá.
Además, sea tu casa como la casa de Fares, el que Tamar dio a luz a Judá, por medio de la descendencia que el SEÑOR te dará de esta joven.
Y los contó en Bezec, y los hijos de Israel eran trescientos mil y los hombres de Judá treinta mil.
Entonces Saúl convocó al pueblo, y los contó en Telaim: doscientos mil soldados de a pie, y diez mil hombres de Judá.
Los filisteos reunieron sus ejércitos para la guerra, y se concentraron en Soco, que pertenece a Judá; y acamparon entre Soco y Azeca, en Efes-damim.
David {era} hijo del efrateo de Belén de Judá, llamado Isaí, y {éste} tenía ocho hijos. Isaí en los días de Saúl era {ya} viejo, avanzado {en años} entre los hombres.
Y levantándose los hombres de Israel y de Judá, gritaron y persiguieron a los filisteos hasta el valle y hasta las puertas de Ecrón. Los filisteos muertos yacían a lo largo del camino a Saaraim, aun hasta Gat y Ecrón.
Pero todo Israel y Judá amaba a David, porque él salía y entraba delante de ellos.
Y el profeta Gad dijo a David: No te quedes en el refugio; vete y entra en la tierra de Judá. Y David se fue y entró en el bosque de Haret.