'Montes' en la Biblia
Y las aguas aumentaron más y más sobre la tierra, y fueron cubiertos todos los altos montes que hay debajo de todos los cielos.
Quince codos por encima subieron las aguas después que los montes habían sido cubiertos.
Y en el mes séptimo, el día diecisiete del mes, el arca descansó sobre los montes de Ararat.
Las aguas fueron decreciendo paulatinamente hasta el mes décimo; {y} el {día} primero del mes décimo, se vieron las cimas de los montes.
Y el valle de Sidim estaba lleno de pozos de asfalto; y el rey de Sodoma y el de Gomorra huyeron y cayeron allí. Y los demás huyeron a los montes.
Y él será hombre {indómito} como asno montés; su mano {será} contra todos, y la mano de todos contra él, y habitará al oriente de todos sus hermanos.
Subió Lot de Zoar y habitó en los montes, y sus dos hijas con él, pues tenía miedo de quedarse en Zoar. Y habitó en una cueva, él y sus dos hijas.
Y {Dios} dijo: Toma ahora a tu hijo, tu único, a quien amas, a Isaac, y ve a la tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré.
tomó a sus parientes consigo y lo persiguió {por} siete días; y lo alcanzó en los montes de Galaad.
Alcanzó, pues, Labán a Jacob. Y Jacob había plantado su tienda en la región montañosa, y Labán y sus parientes acamparon en los montes de Galaad.
¿Por qué han de hablar los egipcios, diciendo: ``Con malas {intenciones} los ha sacado, para matarlos en los montes y para exterminarlos de la faz de la tierra"? Vuélvete del ardor de tu ira, y desiste de {hacer} daño a tu pueblo.
Y comenzó su profecía, y dijo: Desde Aram me ha traído Balac, rey de Moab, desde los montes del oriente: ``Ven, y maldíceme a Jacob; ven, y condena a Israel."
Porque desde la cumbre de las peñas lo veo, y desde los montes lo observo. He aquí, {es} un pueblo {que} mora aparte, y {que} no será contado entre las naciones.
Partieron de Almón-diblataim y acamparon en los montes de Abarim, frente a Nebo.
Partieron de los montes de Abarim y acamparon en las llanuras de Moab, junto al Jordán, {frente a} Jericó.
una tierra donde comerás el pan sin escasez, donde nada te faltará; una tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes puedes sacar cobre.
sino que la tierra a la cual entráis para poseerla, tierra de montes y valles, bebe el agua de las lluvias del cielo.
Destruiréis completamente todos los lugares donde las naciones que desposeeréis sirven a sus dioses: sobre los montes altos, sobre las colinas y debajo de todo árbol frondoso.
el ciervo, la gacela, el corzo, la cabra montés, el íbice, el antílope y el carnero montés.
porque fuego se ha encendido en mi ira, que quema hasta las profundidades del Seol, consume la tierra con su fruto, e incendia los fundamentos de los montes.
Sube a estos montes de Abarim, al monte Nebo, que está en la tierra de Moab frente a Jericó, y mira hacia la tierra de Canaán, la cual doy a los hijos de Israel en posesión.
con lo mejor de los montes antiguos y con lo escogido de los collados eternos;
Y aconteció que cuando se enteraron todos los reyes que {estaban} al otro lado del Jordán, en los montes, en los valles y en toda la costa del mar Grande hacia el Líbano, {los reyes} de los hititas, amorreos, cananeos, ferezeos, heveos y jebuseos,
Entonces los hombres de Gabaón enviaron {mensaje} a Josué al campamento de Gilgal, diciendo: No abandones a tus siervos; sube rápidamente a nosotros, sálvanos y ayúdanos, porque todos los reyes de los amorreos que habitan en los montes se han reunido contra nosotros.
Los montes se estremecieron ante la presencia del SEÑOR, aquel Sinaí, ante la presencia del SEÑOR, Dios de Israel.
Y los habitantes de Siquem pusieron emboscadas contra él en las cumbres de los montes y robaban a todos los que pasaban cerca de ellos por el camino; y se lo hicieron saber a Abimelec.
Al ver Gaal a la gente, dijo a Zebul: Mira, viene gente bajando de las cumbres de los montes. Pero Zebul le dijo: Estás viendo la sombra de los montes como {si fueran} hombres.
Y ella dijo a su padre: Que se haga esto por mí; déjame sola por dos meses, para que vaya yo a los montes y llore por mi virginidad, yo y mis compañeras.
Y él dijo: Ve, y la dejó ir por dos meses; y ella se fue con sus compañeras, y lloró su virginidad por los montes.
Ahora pues, no caiga mi sangre a tierra, lejos de la presencia del SEÑOR; porque el rey de Israel ha salido en busca de una pulga, como quien va a la caza de una perdiz en los montes.
Tu hermosura, oh Israel, ha perecido sobre tus montes. ¿Cómo han caído los valientes!
Oh montes de Gilboa, no haya sobre vosotros rocío ni lluvia, ni campos de ofrendas; porque allí fue deshonrado el escudo de los valientes, el escudo de Saúl, no ungido con aceite.
Entonces El dijo: Sal y ponte en el monte delante del SEÑOR. Y he aquí que el SEÑOR pasaba. Y un grande y poderoso viento destrozaba los montes y quebraba las peñas delante del SEÑOR; {pero} el SEÑOR no {estaba} en el viento. Después del viento, un terremoto; {pero} el SEÑOR no {estaba} en el terremoto.
Y los siervos del rey de Aram le dijeron: Sus dioses son dioses de los montes, por eso fueron más fuertes que nosotros; mejor peleemos contra ellos en la llanura, pues ¿no seremos más fuertes que ellos?
Entonces un hombre de Dios se acercó y habló al rey de Israel, y dijo: Así dice el SEÑOR: ``Porque los arameos han dicho: `El SEÑOR es un dios de los montes, pero no es un dios de los valles; por tanto, entregaré a toda esta gran multitud en tu mano, y sabrás que yo soy el SEÑOR.'"
Y él respondió: Vi a todo Israel esparcido por los montes, como ovejas sin pastor; y el SEÑOR dijo: ``Estos no tienen señor, que cada uno vuelva a su casa en paz."
``Por mano de tus mensajeros has injuriado al Señor, y has dicho: `Con mis numerosos carros subí a las cumbres de los montes, a las partes más remotas del Líbano; corté sus altos cedros {y} sus mejores cipreses, y entré en su morada más lejana, en su más frondoso bosque.
También de los de Gad se pasaron a David en la fortaleza en el desierto, hombres fuertes y valientes, entrenados para la guerra, diestros con el escudo y la lanza, cuyos rostros eran como rostros de leones, y {eran} tan ligeros como las gacelas sobre los montes.
Y designó Salomón setenta mil hombres para llevar cargas, ochenta mil para labrar {piedra} en los montes y tres mil seiscientos para dirigirlos.
Puso setenta mil de ellos a llevar cargas, ochenta mil a labrar {piedras} en los montes y tres mil seiscientos {como} capataces para hacer trabajar al pueblo.
Y él respondió: Vi a todo Israel esparcido por los montes, como ovejas sin pastor; y el SEÑOR dijo: ``Estos no tienen señor; que cada uno vuelva a su casa en paz."
Hizo además lugares altos en los montes de Judá, haciendo que los habitantes de Jerusalén se prostituyeran y que Judá se desviara.
Y sacrificó y quemó incienso en los lugares altos, en los montes y debajo de todo árbol frondoso.
¿Acaso rebuzna el asno montés junto a {su} hierba, o muge el buey junto a su forraje?
{El es} el que remueve los montes, y {éstos} no saben {cómo} cuando los vuelca en su furor;
Y el hombre tonto se hará inteligente cuando el pollino de un asno montés nazca hombre.
Mojados están con los aguaceros de los montes, y se abrazan a la peña por falta de abrigo.
Pone {el hombre} su mano en el pedernal; vuelca de raíz los montes.
¿Quién dejó en libertad al asno montés? ¿Y quién soltó las ataduras del asno veloz,
Ciertamente alimento le traen los montes, y todas las bestias del campo retozan allí.
Entonces la tierra se estremeció y tembló; los cimientos de los montes temblaron y fueron sacudidos, porque El se indignó.
Tu justicia es como los montes de Dios; tus juicios son {como} profundo abismo. Tú preservas, oh SEÑOR, al hombre y al animal.
Por tanto, no temeremos aunque la tierra sufra cambios, y aunque los montes se deslicen al fondo de los mares;
{aunque} bramen {y} se agiten sus aguas, {aunque} tiemblen los montes con creciente enojo. (Selah)
Toda ave de los montes conozco, y mío es todo lo que en el campo se mueve.
tú, el que afirma los montes con su poder, ceñido de potencia;
¿Por qué miráis con envidia, oh montes de {muchos} picos, al monte que Dios ha deseado para morada suya? Ciertamente el SEÑOR habitará {allí} para siempre.
Traigan paz los montes al pueblo, y justicia los collados.
Haya abundancia de grano en la tierra, en las cumbres de los montes; su fruto se mecerá como {los cedros del} Líbano; y los de la ciudad florezcan como la hierba de la tierra.
Resplandeciente eres, más majestuoso que los montes de caza.
Los montes fueron cubiertos con su sombra, y los cedros de Dios con sus ramas.
El puerco montés la devora, y de ella se alimenta todo lo que se mueve en el campo.
Salmo de los hijos de Coré. Cántico.En los montes santos están sus cimientos.
Antes que los montes fueran engendrados, y nacieran la tierra y el mundo, desde la eternidad y hasta la eternidad, tú eres Dios.
en cuya mano están las profundidades de la tierra; suyas son también las cumbres de los montes.
Como cera se derritieron los montes ante la presencia del SEÑOR, ante la presencia del Señor de toda la tierra.
Batan palmas los ríos; a una canten jubilosos los montes
La cubriste con el abismo como con un vestido; las aguas estaban sobre los montes.
Se levantaron los montes, se hundieron los valles, al lugar que tú estableciste para ellos.
El hace brotar manantiales en los valles, corren entre los montes;
El riega los montes desde sus aposentos, del fruto de sus obras se sacia la tierra.
Los montes altos son para las cabras monteses; las peñas son refugio para los tejones.
El mira a la tierra, y ella tiembla; toca los montes, y humean.
Los montes saltaron como carneros, {y} los collados como corderitos.
{a vosotros,} montes, que saltáis como carneros, {y a vosotros,} collados, {que saltáis} como corderitos?
Cántico de ascenso gradual.Levantaré mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi socorro?
Como los montes rodean a Jerusalén, así el SEÑOR rodea a su pueblo desde ahora y para siempre.
Es como el rocío de Hermón, que desciende sobre los montes de Sion; porque allí mandó el SEÑOR la bendición, la vida para siempre.
Oh SEÑOR, inclina tus cielos y desciende; toca los montes para que humeen.
el que cubre de nubes los cielos, el que provee lluvia para la tierra, el que hace brotar la hierba en los montes.
los montes y todas las colinas; árboles frutales y todos los cedros;
Antes que los montes fueran asentados, antes que las colinas, fui engendrada,
{Cuando} la hierba desaparece se ve el retoño, y se recogen las hierbas de los montes;
¿Una voz! ¡Mi amado! He aquí, él viene, saltando por los montes, brincando por los collados.
Hasta que sople {la brisa} del día y huyan las sombras, vuelve, amado mío, y sé semejante a una gacela o a un cervatillo sobre los montes de Beter.
{Ven} conmigo desde el Líbano, esposa {mía}, ven conmigo desde el Líbano. Baja desde la cumbre del Amaná, desde la cumbre del Senir y del Hermón, desde las guaridas de leones, desde los montes de leopardos.
Apresúrate, amado mío, y sé como una gacela o un cervatillo sobre los montes de los aromas.
Y acontecerá en los postreros días, que el monte de la casa del SEÑOR será establecido como cabeza de los montes; se alzará sobre los collados, y confluirán a él todas las naciones.
contra todos los montes encumbrados, contra todos los collados elevados,
Por esta causa se ha encendido la ira del SEÑOR contra su pueblo, y ha extendido su mano contra ellos y los ha herido; los montes temblaron y sus cadáveres yacen como desecho en medio de las calles. Con todo esto, no se ha agotado su ira, y aún está extendida su mano.
Ruido de tumulto en los montes, como de mucha gente. Ruido de estruendo de reinos, de naciones reunidas. El SEÑOR de los ejércitos pasa revista al ejército para la batalla.
Quebrantaré a Asiria en mi tierra, y la pisotearé sobre mis montes. Entonces su yugo se les quitará de encima, y su carga será quitada de sus hombros.
Las naciones rugen como el rugido de muchas aguas, pero El las reprenderá y huirán lejos; serán perseguidas como el tamo de los montes delante del viento, y como polvo de torbellino delante del vendaval.
Todos vosotros, habitantes del mundo y moradores de la tierra, tan pronto como se alce la bandera sobre los montes, {la} veréis, y tan pronto como la trompeta sea tocada, {la} oiréis.
Juntos serán dejados para las aves de rapiña de los montes, y para las bestias de la tierra; pasarán allí el verano las aves de rapiña, y todas las bestias de la tierra allí invernarán.
`Por mano de tus siervos has injuriado al Señor, y has dicho: ``Con mis numerosos carros yo subí a las cumbres de los montes, a las partes más remotas del Líbano, y corté sus altos cedros {y} sus mejores cipreses; iré a su más alta cima, a su más frondoso bosque.
¿Quién midió las aguas en el hueco de su mano, con {su} palmo tomó la medida de los cielos, con un tercio de medida calculó el polvo de la tierra, pesó los montes con la báscula, y las colinas con la balanza?
He aquí, te he convertido en trillo nuevo, cortante, de doble filo; trillarás los montes y {los} harás polvo, y los collados dejarás como hojarasca.
Levanten {la voz} el desierto y sus ciudades, las aldeas donde habita Cedar. Canten de júbilo los habitantes de Sela, desde las cimas de los montes griten de alegría.