'Nada' en la Biblia
Es más preciosa que las joyas, Y nada de lo que deseas se compara con ella.
Conforme a la justicia son todas las palabras de mi boca, No hay en ellas nada torcido ni perverso.
La mujer insensata es alborotadora, Es simple y no sabe nada.
De nada sirven las riquezas el día de la ira, Pero la justicia libra de la muerte.
El alma del perezoso desea mucho, pero nada {consigue,} Sin embargo, el alma de los diligentes queda satisfecha.
Hay quien pretende ser rico, y nada tiene; Hay {quien} pretende ser pobre, y tiene una gran fortuna.
Desde el otoño, el perezoso no ara, Así que pide durante la cosecha, pero no hay nada.
Todo el día codicia, Mientras el justo da y nada retiene.
El que se asocia con un ladrón aborrece su propia vida; Oye el juramento, pero no dice nada.
Así es el proceder de la mujer adúltera: Come, se limpia la boca, Y dice: ``No he hecho nada malo."