'Su' en la Biblia
Oíd, pueblos todos: está atenta, tierra, y todo lo que en ella hay: y el Señor Jehová, el Señor desde su santo templo sea testigo contra vosotros.
Porque he aquí, Jehová sale de su lugar, y descenderá, y hollará sobre las alturas de la tierra.
Porque su llaga es dolorosa, que llegó hasta Judá; llegó hasta la puerta de mi pueblo, hasta Jerusalén.
Pásate desnuda con vergüenza, oh moradora de Safir: la moradora de Saanán no salió al llanto de Bet-esel: tomará de vosotros su tardanza.
¡Ay de los que piensan iniquidad, y de los que fabrican el mal en sus camas! Cuando viene la mañana lo ponen en obra, porque tienen en su mano el poder.
Y codiciaron las heredades, y las robaron; y casas, y las tomaron; oprimieron al hombre y a su casa, al hombre y a su heredad.
De cierto te reuniré todo, oh Jacob; ciertamente recogeré el remanente de Israel; los reuniré como ovejas de Bosra, como rebaño en medio de su aprisco; harán estruendo por la multitud de hombres.
Subirá rompedor delante de ellos; romperán y pasarán la puerta, y saldrán por ella: y su rey pasará delante de ellos, y a la cabeza de ellos Jehová.
A vosotros que aborrecéis lo bueno y amáis lo malo, que les arrancáis su piel y su carne de sobre sus huesos;
que coméis asimismo la carne de mi pueblo, y les desolláis su piel de sobre ellos y les quebráis sus huesos, y los hacéis pedazos como para la olla, y como carne en caldero.
Entonces clamarán a Jehová y no les responderá; antes esconderá de ellos su rostro en aquel tiempo, por cuanto hicieron malvadas obras.
Y serán avergonzados los profetas, y se confundirán los adivinos; y ellos todos cubrirán su labio, porque no hay respuesta de Dios.
Mas yo estoy lleno de poder del Espíritu de Jehová, y de juicio, y de fortaleza, para denunciar a Jacob su rebelión, y a Israel su pecado.
Y cada uno se sentará debajo de su vid y debajo de su higuera, y no habrá quien amedrente; porque la boca de Jehová de los ejércitos lo ha hablado.
Ahora también muchas naciones se han juntado contra ti, y dicen: Sea profanada, y vean nuestros ojos su deseo sobre Sión.
Mas ellos no conocieron los pensamientos de Jehová, ni entendieron su consejo; por lo cual los juntó como gavillas en la era.
Levántate y trilla, hija de Sión, porque tu cuerno tornaré de hierro, y tus uñas de bronce, y desmenuzarás muchos pueblos; y consagrarás a Jehová su despojo, y sus riquezas al Señor de toda la tierra.
Y Él estará, y apacentará con el poder de Jehová, con la majestad del nombre de Jehová su Dios; y permanecerán; porque ahora Él será engrandecido hasta los fines de la tierra.
Oíd, montes, y fuertes fundamentos de la tierra, el pleito de Jehová; porque Jehová tiene controversia con su pueblo, y altercará con Israel.
Con lo cual sus ricos se llenaron de rapiña, y sus moradores hablaron mentira, y su lengua es engañosa en su boca.
Faltó el misericordioso de la tierra, y ninguno hay recto entre los hombres: todos acechan por sangre; cada cual arma red a su hermano.
Para completar la maldad con ambas manos, el príncipe demanda, y el juez juzga por recompensa; el grande, habla el antojo de su alma, y lo confirman.
El mejor de ellos es como el abrojo, y el más recto, como el zarzal; el día de tus atalayas y de tu visitación viene; ahora será su confusión.
Porque el hijo deshonra al padre, la hija se levanta contra la madre, la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre son los de su propia casa.
La ira de Jehová soportaré, porque pequé contra Él, hasta que juzgue mi causa y haga mi juicio; Él me sacará a luz; veré su justicia.
Las naciones verán, y quedarán confundidas de todo su poderío; pondrán la mano sobre su boca, ensordecerán sus oídos.
Lamerán el polvo como la serpiente; saldrán de su agujeros como los gusanos de la tierra, temblarán en sus encierros; tendrán pavor de Jehová nuestro Dios, y temerán a causa de ti.
¿Qué Dios como tú, que perdonas la maldad, y olvidas el pecado del resto de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque es amador de misericordia.