'Vuestro' en la Biblia
A Jehová de los ejércitos, á él santificad: sea él vuestro temor, y él sea vuestro miedo.
Y será anulado vuestro concierto con la muerte, y vuestro acuerdo con el sepulcro no será firme: cuando pasare el turbión del azote, seréis de él hollados.
Concebisteis hojarascas, aristas pariréis: el soplo de vuestro fuego os consumirá.
Decid á los de corazón apocado: Confortaos, no temáis: he aquí que vuestro Dios viene con venganza, con pago: el mismo Dios vendrá, y os salvará.
Y díjoles Isaías: Diréis así á vuestro señor: Así dice Jehová: No temas por las palabras que has oído, con las cuales me han blasfemado los siervos del rey de Asiria.
CONSOLAOS, consolaos, pueblo mío, dice vuestro Dios.
Súbete sobre un monte alto, anunciadora de Sión; levanta fuertemente tu voz, anunciadora de Jerusalem; levántala, no temas; di á las ciudades de Judá: Veis aquí el Dios vuestro!
Así dice Jehová, Redentor vuestro, el Santo de Israel: Por vosotros envié á Babilonia, é hice descender fugitivos todos ellos, y clamor de Caldeos en las naves.
Yo Jehová, Santo vuestro, Criador de Israel, vuestro Rey.
He aquí que todos vosotros encendéis fuego, y estáis cercados de centellas: andad á la luz de vuestro fuego, y á las centellas que encendisteis. De mi mano os vendrá esto; en dolor seréis sepultados.
Mirad á Abraham vuestro padre, y á Sara que os parió; porque solo lo llamé, y bendíjelo, y multipliquélo.
Yo, yo soy vuestro consolador. ¿Quién eres tú para que tengas temor del hombre, que es mortal, del hijo del hombre, que por heno será contado?
¿Por qué gastáis el dinero no en pan, y vuestro trabajo no en hartura? Oidme atentamente, y comed del bien, y deleitaráse vuestra alma con grosura.
¿Por qué, dicen, ayunamos, y no hiciste caso; humillamos nuestras almas, y no te diste por entendido? He aquí que en el día de vuestro ayuno halláis lo que queréis, y todos demandáis vuestras haciendas.
Mas vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar su rostro de vosotros, para no oir.
Y dejaréis vuestro nombre por maldición á mis escogidos, y el Señor Jehová te matará; y á sus siervos llamará por otro nombre.
Y veréis, y alegraráse vuestro corazón, y vuestros huesos reverdecerán como la hierba: y la mano de Jehová para con sus siervos será conocida, y se airará contra sus enemigos.
Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra, que yo hago, permanecen delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra simiente y vuestro nombre.
Resultados de Búsqueda por Versiones
- J2000 (19)
- LBDA (23)
- RV (18)
- SEV (19)
- RV1909 (18)
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (31)
- Éxodo (13)
- Levítico (37)
- Números (9)
- Deuteronomio (56)
- Josué (30)
- Jueces (5)
- 1 Samuel (13)
- 2 Samuel (2)
- 1 Reyes (4)
- 2 Reyes (6)
- 1 Crónicas (4)
- 2 Crónicas (10)
- Esdras (3)
- Nehemías (2)
- Job (2)
- Salmos (10)
- Isaías (18)
- Jeremías (19)
- Ezequiel (13)
- Daniel (2)
- Oseas (1)
- Joel (9)
- Amós (3)
- Hageo (2)
- Zacarías (1)
- Malaquías (1)