El Señor no se tarda {en cumplir} su promesa, según algunos entienden la tardanza, sino que es paciente para con vosotros, no queriendo que nadie perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento.

y diciendo: ¿Dónde está la promesa de su venida? Porque desde que los padres durmieron, todo continúa tal como estaba desde el principio de la creación.

Pero ante todo sabed esto, que ninguna profecía de la Escritura es {asunto} de interpretación personal,

pues ninguna profecía fue dada jamás por un acto de voluntad humana, sino que hombres inspirados por el Espíritu Santo hablaron de parte de Dios.

Pues su divino poder nos ha concedido todo cuanto concierne a la vida y a la piedad, mediante el verdadero conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia,

Pero se levantaron falsos profetas entre el pueblo, así como habrá también falsos maestros entre vosotros, los cuales encubiertamente introducirán herejías destructoras, negando incluso al Señor que los compró, trayendo sobre sí una destrucción repentina.

al conocimiento, dominio propio, al dominio propio, perseverancia, y a la perseverancia, piedad,

pues de esta manera os será concedida ampliamente la entrada al reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

a la piedad, fraternidad y a la fraternidad, amor.

antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A El {sea} la gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.

Pero el día del Señor vendrá como ladrón, en el cual los cielos pasarán con gran estruendo, y los elementos serán destruidos con fuego intenso, y la tierra y las obras {que hay} en ella serán quemadas.

Y {así} tenemos la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en prestar atención como a una lámpara que brilla en el lugar oscuro, hasta que el día despunte y el lucero de la mañana aparezca en vuestros corazones.

Pues estas {virtudes,} al estar en vosotros y al abundar, no os dejarán ociosos ni estériles en el verdadero conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.

por medio de las cuales nos ha concedido sus preciosas y maravillosas promesas, a fin de que por ellas lleguéis a ser partícipes de {la} naturaleza divina, habiendo escapado de la corrupción que hay en el mundo por {causa de la} concupiscencia.

Y considero justo, mientras esté en este cuerpo, estimularos recordándoos estas cosas,

Pero, amados, no ignoréis esto: que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.

sabiendo que mi separación del cuerpo {terrenal} es inminente, tal como me lo ha declarado nuestro Señor Jesucristo.

Porque si Dios no perdonó a los ángeles cuando pecaron, sino que los arrojó al infierno y los entregó a fosos de tinieblas, reservados para juicio;

Por esta razón también, obrando con toda diligencia, añadid a vuestra fe, virtud, y a la virtud, conocimiento;

Porque el que carece de estas {virtudes} es ciego {o} corto de vista, habiendo olvidado {la} purificación de sus pecados pasados.

Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que han recibido una fe como la nuestra, mediante la justicia de nuestro Dios y Salvador, Jesucristo:

Porque cuando os dimos a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo, no seguimos fábulas ingeniosamente inventadas, sino que fuimos testigos oculares de su majestad.

Ante todo, sabed esto: que en los últimos días vendrán burladores, con {su} sarcasmo, siguiendo sus propias pasiones,

Pero, según su promesa, nosotros esperamos nuevos cielos y nueva tierra, en los cuales mora la justicia.

Pues cuando El recibió honor y gloria de Dios Padre, la majestuosa Gloria le hizo esta declaración: Este es mi Hijo amado en quien me he complacido;

También yo procuraré con diligencia, que en todo tiempo, después de mi partida, podáis recordar estas cosas.

Asimismo en todas {sus} cartas habla en ellas de esto; en las cuales hay algunas cosas difíciles de entender, que los ignorantes e inestables tuercen--como también {tuercen} el resto de las Escrituras--para su propia perdición.

Gracia y paz os sean multiplicadas en el conocimiento de Dios y de Jesús nuestro Señor.

y nosotros mismos escuchamos esta declaración, hecha desde el cielo cuando estábamos con El en el monte santo.

y considerad la paciencia de nuestro Señor {como} salvación, tal como os escribió también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le fue dada.

Así que, hermanos, sed tanto más diligentes para hacer firme vuestro llamado y elección {de parte de Dios;} porque mientras hagáis estas cosas nunca tropezaréis;

el Señor, {entonces,} sabe rescatar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos bajo castigo para el día del juicio,

pero los cielos y la tierra actuales están reservados por su palabra para el fuego, guardados para el día del juicio y de la destrucción de los impíos.

Porque si después de haber escapado de las contaminaciones del mundo por el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, de nuevo son enredados en ellas y vencidos, su condición postrera viene a ser peor que la primera.

Amados, esta es ya la segunda carta que os escribo, en las cuales, como recordatorio, despierto en vosotros vuestro sincero entendimiento,

(porque {ese} justo, por lo que veía y oía mientras vivía entre ellos, diariamente sentía {su} alma justa atormentada por sus hechos inicuos),

esperando y apresurando la venida del día de Dios, en el cual los cielos serán destruidos por fuego y los elementos se fundirán con intenso calor!

si rescató al justo Lot, abrumado por la conducta sensual de hombres libertinos

Pero éstos, como animales irracionales, nacidos como criaturas de instinto para ser capturados y destruidos, blasfemando de lo que ignoran, serán también destruidos con la destrucción de esas criaturas,

cuando los ángeles, que son mayores en fuerza y en potencia, no pronuncian juicio injurioso contra ellos delante del Señor.

Abandonando el camino recto, se han extraviado, siguiendo el camino de Balaam, el {hijo} de Beor, quien amó el pago de la iniquidad,

Tienen los ojos llenos de adulterio y nunca cesan de pecar; seducen a las almas inestables; tienen un corazón ejercitado en la avaricia; {son} hijos de maldición.

sufriendo el mal como pago de {su} iniquidad. Cuentan por deleite andar en placeres disolutos durante el día; son manchas e inmundicias, deleitándose en sus engaños mientras banquetean con vosotros.

para que recordéis las palabras dichas de antemano por los santos profetas, y el mandamiento del Señor y Salvador {declarado} por vuestros apóstoles.

Muchos seguirán su sensualidad, y por causa de ellos, el camino de la verdad será blasfemado;

pero fue reprendido por su transgresión, {pues} una muda bestia de carga, hablando con voz humana, reprimió la locura del profeta.

Pues hablando con arrogancia y vanidad, seducen mediante deseos carnales, por sensualidad, a los que hace poco escaparon de los que viven en el error.

Estos son manantiales sin agua, bruma impulsada por una tormenta, para quienes está reservada la oscuridad de las tinieblas.

Les ha sucedido a ellos según el proverbio verdadero: EL PERRO VUELVE A SU PROPIO VOMITO, y: La puerca lavada, {vuelve} a revolcarse en el cieno.

Pues hubiera sido mejor para ellos no haber conocido el camino de la justicia, que habiéndolo conocido, apartarse del santo mandamiento que les fue dado.

Puesto que todas estas cosas han de ser destruidas de esta manera, ¡qué clase de personas no debéis ser vosotros en santa conducta y en piedad,

Pues cuando dicen esto, no se dan cuenta de que los cielos existían desde hace mucho tiempo, y también la tierra, surgida del agua y establecida entre las aguas por la palabra de Dios,

si no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, un predicador de justicia, con otros siete, cuando trajo el diluvio sobre el mundo de los impíos;

Les prometen libertad, mientras que ellos mismos son esclavos de la corrupción, pues uno es esclavo de aquello que le ha vencido.

Por tanto, siempre estaré listo para recordaros estas cosas, aunque vosotros {ya las} sabéis y habéis sido confirmados en la verdad que está presente {en vosotros}.

si condenó a la destrucción las ciudades de Sodoma y Gomorra, reduciéndo{las} a cenizas, poniéndo{las} de ejemplo para los que habrían de vivir impíamente después;

Por tanto, amados, sabiendo esto de antemano, estad en guardia, no sea que arrastrados por el error de hombres libertinos, caigáis de vuestra firmeza;

y en {su} avaricia os explotarán con palabras falsas. El juicio de ellos, desde hace mucho tiempo no está ocioso, ni su perdición dormida.

Por tanto, amados, puesto que aguardáis estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por El en paz, sin mancha e irreprensibles,

especialmente a los que andan tras la carne en {sus} deseos corrompidos y desprecian la autoridad. Atrevidos {y} obstinados, no tiemblan cuando blasfeman de las majestades angélicas,

por lo cual el mundo de entonces fue destruido, siendo inundado con agua;