16 Versículo de la Biblia sobre Mejillas
Versículos Más Relevantes
Amargamente llora en la noche, y las lágrimas {corren} por sus mejillas; no hay quien la consuele entre todos sus amantes. Todos sus amigos la han traicionado, se le han convertido en enemigos.
Han abierto contra mí su boca, con injurias me han abofeteado; a una se aglutinan contra mí.
Pero yo os digo: no resistáis al que es malo; antes bien, a cualquiera que te abofetee en la mejilla derecha, vuélvele también la otra.
que dé la mejilla al que lo hiere; que se sacie de oprobios.
Agrúpate ahora en tropas, hija de guerreros; han puesto sitio contra nosotros. Con una vara herirán en la mejilla al juez de Israel.
Entonces le escupieron en el rostro y le dieron de puñetazos; y otros le abofeteaban,
Cuando dijo esto, uno de los alguaciles que estaba cerca, dio una bofetada a Jesús, diciendo: ¿Así respondes al sumo sacerdote? Jesús le respondió: Si he hablado mal, da testimonio de lo que {he hablado} mal; pero si {hablé} bien, ¿por qué me pegas?
Al que te hiera en la mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, no le niegues tampoco la túnica.
Di mis espaldas a los que {me} herían, y mis mejillas a los que {me} arrancaban la barba; no escondí mi rostro de injurias y esputos.
Entonces Hanún tomó a los siervos de David, les rasuró la mitad de la barba, les cortó los vestidos por la mitad hasta las caderas, y los despidió. Cuando {le} avisaron a David, envió a encontrarlos, porque los hombres estaban sumamente avergonzados. Y el rey {les} dijo: Quedaos en Jericó hasta que os crezca la barba, y {después} volved.
Entonces Hanún tomó a los siervos de David y los rapó, les cortó los vestidos por la mitad hasta las caderas, y los despidió. Y {algunos} fueron y le avisaron a David acerca de los hombres. Y él envió {gente} a su encuentro, porque los hombres estaban muy humillados. Y el rey dijo: Quedaos en Jericó hasta que os crezca la barba, y {después} volved.
Sus mejillas, como eras de bálsamo, {como} riberas de hierbas aromáticas; sus labios son lirios que destilan mirra líquida.
¿Levántate, SEÑOR! ¡Sálvame, Dios mío! Porque tú hieres a todos mis enemigos en la mejilla; rompes los dientes de los impíos.
Y este será el derecho de los sacerdotes {de parte} del pueblo, de los que ofrecen {como} sacrificio buey u oveja: darán para el sacerdote la espaldilla, las quijadas y el cuajar.
Entonces se acercó Sedequías, hijo de Quenaana, y golpeó a Micaías en la mejilla y dijo: ¿Cómo es que el Espíritu del SEÑOR pasó de mí para hablarte a ti?
Tópicos sobre Mejillas
Heriste mejillas
Salmos 3:7¿Levántate, SEÑOR! ¡Sálvame, Dios mío! Porque tú hieres a todos mis enemigos en la mejilla; rompes los dientes de los impíos.