'Mal' en la Biblia
Lávense, límpiense, Quiten la maldad de sus obras de delante de Mis ojos. Cesen de hacer el mal.
La expresión de sus rostros testifica contra ellos, Y como Sodoma publican su pecado. No {lo} encubren. ¡Ay de ellos!, Porque han traído mal sobre sí mismos.
¡Ay del impío! {Le irá} mal, Porque lo que él merece se le hará.
¡Ay de los que llaman al mal bien y al bien mal, Que tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas, Que tienen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!
~`Porque Aram ha tramado mal contra ti, {junto con} Efraín y el hijo de Remalías, y han dicho:
Los canales olerán mal, Disminuirán y se secarán las corrientes de Egipto; La caña y el junco se marchitarán.
Porque el violento tendrá su fin, el insolente será acabado, Y serán cortados todos los que se desvelan {para hacer} el mal;
Pero El también es sabio, y traerá el mal, Y no se retractará de Sus palabras; Sino que se levantará contra la casa de los malhechores Y contra la ayuda de los que obran iniquidad.
Pues el necio habla necedades, Y su corazón se inclina hacia el mal, Para practicar la impiedad y hablar falsedad contra el SEÑOR, Para mantener con hambre al hambriento Y para privar de bebida al sediento.
El que anda en justicia y habla con sinceridad, El que rehúsa la ganancia injusta, Y se sacude las manos para que no retengan soborno; El que se tapa los oídos para no oír del derramamiento de sangre, Y cierra los ojos para no ver el mal.
Pero un mal vendrá sobre ti Que no sabrás impedir; Caerá sobre ti un desastre Que no podrás remediar. Vendrá de repente sobre ti Una destrucción que no conoces.
¿Por qué cuando vine no había nadie, {Y} cuando llamé no había quien respondiera? ¿Acaso es tan corta Mi mano que no puede rescatar, O no tengo poder para librar? Con Mi reprensión seco el mar, Convierto los ríos en desierto. Sus peces huelen mal por falta de agua, Mueren de sed.
Cuán bienaventurado es el hombre que hace esto, Y el hijo del hombre que a ello se aferra; Que guarda el día de reposo sin profanarlo, Y guarda su mano de hacer mal alguno."
El justo perece, y no hay quien se preocupe; Los hombres piadosos son arrebatados, sin que nadie comprenda. Porque el justo es arrebatado ante el mal,
Sus pies corren al mal, Y se apresuran a derramar sangre inocente. Sus pensamientos son pensamientos de iniquidad, Desolación y destrucción hay en sus caminos.
Sí, falta la verdad, Y el que se aparta del mal es hecho presa. Y {lo} vio el SEÑOR, Y desagradó a Sus ojos que no hubiera derecho.
"El lobo y el cordero pastarán juntos, y el león, como el buey, comerá paja, y para la serpiente el polvo será su alimento. No harán mal ni dañarán en todo Mi santo monte," dice el SEÑOR.