'Otro' en la Biblia
Y se fue por otro camino, no regresó por el camino por donde había ido a Betel.
Y {el otro} le respondió: ``Yo también soy profeta como tú, y un ángel me habló por palabra del SEÑOR, diciendo: `Tráelo contigo a tu casa, para que coma pan y beba agua.'" {Pero} le estaba mintiendo.
Y dividieron la tierra entre ellos para recorrerla; Acab se fue solo por un camino, y Abdías se fue solo por otro.
"Que nos den, pues, dos novillos. Que escojan un novillo para ellos y lo despedacen, y lo coloquen sobre la leña, pero que no {le} pongan fuego {debajo;} y yo prepararé el otro novillo y lo colocaré sobre la leña, y no {le} pondré fuego.
Entonces él respondió a los mensajeros de Ben Adad: ``Digan a mi señor el rey: `Haré todo lo que mandaste a tu siervo la primera vez, pero esto {otro} no lo puedo hacer.'" Se fueron los mensajeros y le llevaron la respuesta.
Y cierto hombre de los hijos de los profetas dijo a otro por palabra del SEÑOR: ``Te ruego que me hieras." Pero el hombre se negó a herirlo.
Entonces halló a otro hombre y le dijo: ``Te ruego que me hieras." Y el hombre le dio un golpe, hiriéndolo.
"Y el SEÑOR dijo: ` ¿Quién persuadirá a Acab para que suba y caiga en Ramot de Galaad?' Y uno decía de una manera, y otro de otra.
De nuevo el rey envió a él otro capitán de cincuenta con sus cincuenta que {le} habló: ``Hombre de Dios, así dice el rey: `Desciende inmediatamente.'"
Entonces Elías tomó su manto, lo dobló y golpeó las aguas, y {éstas} se dividieron a uno y a otro lado, y los dos pasaron por tierra seca.
Y tomando el manto de Elías que se le había caído, golpeó las aguas, y dijo: `` ¿Dónde está el SEÑOR, el Dios de Elías?" Y cuando él golpeó también las aguas, éstas se dividieron a uno y a otro lado, y Eliseo pasó.
Entonces Eliseo volvió y caminó por la casa de un lado para otro, y subió y se tendió sobre él; y el niño estornudó siete veces y abrió sus ojos.
Había cuatro leprosos a la entrada de la puerta, y se dijeron el uno al otro: `` ¿Por qué estamos aquí sentados esperando la muerte?
Porque el Señor había hecho que el ejército de los Arameos oyera estruendo de carros y ruido de caballos, el estruendo de un gran ejército, de modo que se dijeron el uno al otro: ``Ciertamente el rey de Israel ha tomado a sueldo contra nosotros a los reyes de los Hititas y a los reyes de los Egipcios, para que vengan contra nosotros."
Entonces se dijeron el uno al otro: ``No estamos haciendo bien. Hoy es día de buenas nuevas, pero nosotros estamos callados; si esperamos hasta la luz de la mañana, nos vendrá castigo. Vamos pues, ahora, y entremos a dar la noticia a la casa del rey."
Entonces Jehú envió {aviso} por todo Israel y vinieron todos los adoradores de Baal, y no quedó ninguno que no viniera. Y cuando entraron en la casa de Baal, la casa de Baal se llenó de un extremo al otro.
Además, Manasés derramó muchísima sangre inocente hasta llenar a Jerusalén de un extremo a otro, aparte de su pecado con el que hizo pecar a Judá para que hiciera lo malo ante los ojos del SEÑOR.
Y antes de él no hubo rey como él que se volviera al SEÑOR con todo su corazón, con toda su alma y con todas sus fuerzas, conforme a toda la ley de Moisés, ni otro como él se levantó después de él.
También había cantores, jefes de {casas} paternas de los Levitas, {que habitaban} en las cámaras {del templo,} libres {de todo otro servicio,} porque estaban ocupados en su trabajo día y noche.
Del otro lado del Jordán de los Rubenitas y Gaditas y de la media tribu de Manasés, {había} 120,000 con toda {clase} de armas de guerra para la batalla.
Y vagaban de nación en nación Y de un reino a otro pueblo,
Al ver los Arameos que habían sido derrotados por Israel, enviaron mensajeros, y trajeron a los Arameos que {estaban} al otro lado del Río (Eufrates), con Sofac, comandante del ejército de Hadad Ezer, al frente de ellos.
Y las alas de los dos querubines medían 9 metros; el ala de uno, de 2.25 metros, tocaba la pared de la casa, y {su} otra ala, de 2.25 metros, tocaba el ala del otro querubín.
Y el ala del otro querubín, de 2.25 metros, tocaba la pared de la casa; y {su} otra ala, de 2.25 metros, se unía al ala del primer querubín.
Y doce leones estaban allí de pie en las seis gradas a uno y otro lado; nada semejante se hizo para ningún {otro} reino.
"Y el SEÑOR dijo: ` ¿Quién persuadirá a Acab, rey de Israel, para que suba y caiga en Ramot de Galaad?' Y uno decía de una manera, y otro de otra.
Entonces se encendió la ira del SEÑOR contra Amasías, y le envió un profeta que le dijo: `` ¿Por qué has buscado a los dioses de {otro} pueblo que no pudieron librar a su propio pueblo de tu mano?"
Pero Necao le envió mensajeros, diciéndole: `` ¿Qué tenemos que ver el uno con el otro, oh rey de Judá? No {vengo} hoy contra ti, sino contra la casa con la que estoy en guerra, y Dios me ha ordenado que me apresure. Por tu propio bien, deja de {oponerte a} Dios, que está conmigo, para que El no te destruya."
y las demás naciones que el grande y noble Asnapar deportó y estableció en la ciudad de Samaria, y en el resto {de la provincia} al otro lado del Río (Eufrates). Y ahora
esta es la copia de la carta que le enviaron: ``Al rey Artajerjes, de sus siervos, los hombres {de la provincia} al otro lado del Río: Y ahora
{Entonces} el rey envió respuesta al gobernador Rehum, al escriba Simsai, y a sus demás compañeros que habitan en Samaria y en las demás {provincias} al otro lado del Río: ``Paz. Y ahora
En aquel tiempo Tatnai, gobernador de {la provincia} al otro lado del Río (Eufrates), y Setar Boznai y sus compañeros vinieron a ellos y les hablaron así: `` ¿Quién les dio orden de reedificar este templo y de terminar este edificio?"
{Esta es} la copia de la carta que Tatnai, gobernador de {la provincia} al otro lado del río, y Setar Boznai y sus compañeros los oficiales que {estaban} al otro lado del río, enviaron al rey Darío.
Ahora pues, Tatnai, gobernador de {la provincia} al otro lado del Río (Eufrates), Setar Boznai, y sus compañeros, los oficiales del otro lado del río, aléjense de allí.
"Además, éste es mi decreto en cuanto a lo que han de hacer por estos ancianos de Judá en la reedificación de esta casa de Dios: del tesoro real de los tributos del otro lado del río se han de pagar todos los gastos a este pueblo, y esto sin demora.
Entonces Tatnai, gobernador de {la provincia} al otro lado del Río (Eufrates), Setar Boznai y sus compañeros llevaron a cabo {el decreto} con toda exactitud, tal como el rey Darío había ordenado.
Entonces entregaron los edictos del rey a los sátrapas del rey, y a los gobernadores del otro lado del Río (Eufrates); y éstos apoyaron al pueblo y a la casa de Dios.
que por medio de Tus siervos los profetas nos ordenaste: `La tierra a la cual ustedes entran para poseerla es una tierra inmunda con la impureza de los pueblos de estas tierras, con sus abominaciones que la han llenado de un extremo a otro, {y} con su impureza.
Y dije a los nobles, a los oficiales y al resto del pueblo: ``La obra es grande y extensa, y estamos separados en la muralla, lejos el uno del otro.
"Porque si permaneces callada en este tiempo, alivio y liberación vendrán de otro lugar para los Judíos, pero tú y la casa de tu padre perecerán. ¿Y quién sabe si para una ocasión como ésta tú habrás llegado a ser reina?"
Mientras estaba éste hablando, vino otro y dijo: ``Fuego de Dios cayó del cielo y quemó las ovejas y a los criados y los consumió; sólo yo escapé para contárse{lo a usted."}
Mientras éste estaba hablando, vino otro y dijo: ``Los Caldeos formaron tres cuadrillas, se lanzaron sobre los camellos y se los llevaron, y mataron a los criados a filo de espada. Sólo yo escapé para contárse{lo a usted."}
Mientras éste estaba hablando, vino otro y dijo: ``Sus hijos y sus hijas estaban comiendo y bebiendo vino en la casa del hermano mayor,
y entonces vino un gran viento del otro lado del desierto y azotó las cuatro esquinas de la casa, y {ésta} cayó sobre los jóvenes y murieron; sólo yo escapé para contárse{lo a usted."}
Y el SEÑOR dijo a Satanás: `` ¿Te has fijado en Mi siervo Job? Porque no hay otro como él sobre la tierra; es un hombre intachable (íntegro), recto, temeroso de Dios y apartado del mal. El todavía conserva su integridad a pesar de que tú me incitaste contra él para que lo arruinara sin causa."
Al cual yo mismo contemplaré, Y a quien mis ojos verán y no {los de} otro. ¡Desfallece mi corazón dentro de mí!
Mientras otro muere con alma amargada, Y sin haber probado nada bueno.
Que yo siembre y otro coma, Y sean arrancadas mis cosechas.
Que muela para otro mi mujer, Y otros se encorven sobre ella.
Se multiplicarán las aflicciones de aquéllos que han corrido tras otro {dios}; No derramaré yo sus libaciones de sangre, Ni sus nombres pronunciarán mis labios.
{Un} día transmite el mensaje al {otro} día, Y {una} noche a {la otra} noche revela sabiduría.
De un extremo de los cielos es su salida, Y su curso hasta el otro extremo de ellos; Y no hay nada que se esconda de su calor.
Un abismo llama a {otro} abismo a la voz de Tus cascadas; Todas Tus ondas y Tus olas han pasado sobre mí.
Sino que Dios es el Juez; A uno humilla y a otro ensalza.
Cuando vagaban de nación en nación, {Y} de un reino a otro pueblo,
Sean pocos sus días, {Y} que otro tome su cargo.
Justo {parece} el primero que defiende su causa {Hasta} que otro viene y lo examina.
``Un poco de dormir, otro poco de dormitar, Otro poco de cruzar las manos para descansar,"
Discute tu caso con tu prójimo Y no descubras el secreto de otro,
El hierro con hierro se afila, Y un hombre aguza a otro.
Porque la suerte de los hijos de los hombres y la suerte de los animales es la misma: como muere el uno así muere el otro. Todos tienen un mismo aliento {de vida;} el hombre no tiene ventaja sobre los animales, porque todo es vanidad.
Porque si uno de ellos cae, el otro levantará a su compañero; Pero ¡ay del que cae cuando no hay otro que lo levante!
Si ves la opresión del pobre y la negación del derecho y de la justicia en la provincia, no te sorprendas del hecho, porque un oficial vigila sobre {otro} oficial, y {hay oficiales} superiores sobre ellos.
Alégrate en el día de la prosperidad, Y en el día de la adversidad considera: Dios ha hecho tanto el uno como el otro Para que el hombre no descubra nada {que suceda} después de él.
¿Quién es como el sabio? ¿Y quién {otro} sabe la explicación de un asunto? La sabiduría del hombre ilumina su rostro Y hace que la dureza de su rostro cambie.
Todo esto he visto, y he puesto mi corazón en toda obra que se hace bajo el sol, cuando el hombre domina a {otro} hombre para su mal.
Y el pueblo será oprimido, El uno por el otro y cada cual por su prójimo. El joven se alzará contra el anciano, Y el indigno contra el honorable.
Ese día {el otro} se indignará, diciendo: ``No seré el sanador {de ustedes}, Porque en mi casa no hay ni pan ni manto; No deben nombrarme jefe del pueblo."
Y el uno al otro daba voces, diciendo: ``Santo, Santo, Santo, es el SEÑOR de los ejércitos, Llena está toda la tierra de Su gloria."
Pero no habrá {más} melancolía (tristeza) para la que estaba en angustia. Como en tiempos pasados El trató con desprecio a la tierra de Zabulón y a la tierra de Neftalí, pero después {la} hará gloriosa por el camino del mar al otro lado del Jordán, Galilea de los Gentiles (de las naciones).
Todos se aterrarán; Dolores y angustias se apoderarán {de ellos,} Como mujer de parto se retorcerán; Se mirarán el uno al otro con asombro, Rostros en llamas {serán} sus rostros.
Por tanto, la abundancia {que} han adquirido y almacenado Se la llevan al otro lado del arroyo Arabim (de los Sauces).
Yo soy el SEÑOR, ése es Mi nombre; Mi gloria a otro no daré, Ni Mi alabanza a imágenes talladas.
``Ustedes son Mis testigos," declara el SEÑOR, ``y Mi siervo a quien he escogido, Para que {Me} conozcan y crean en Mí, Y entiendan que Yo soy. Antes de Mí no fue formado {otro} dios, Ni después de Mí {lo} habrá.
Este dirá: `Yo soy del SEÑOR,' Otro invocará el nombre de Jacob, Y otro escribirá {en} su mano: `Del SEÑOR {soy}' Dirá, como un alto honor, el nombre de Israel.
No tiemblen ni teman; ¿No se {lo} he hecho oír y {lo} he anunciado desde hace tiempo? Ustedes son Mis testigos. ¿Hay {otro} dios fuera de Mí, O hay {otra} Roca? No conozco {ninguna.}'"
Yo soy el SEÑOR, y no hay ningún otro; Fuera de Mí no hay Dios. Yo te fortaleceré, aunque no Me has conocido,
Para que se sepa que desde el nacimiento del sol hasta donde se pone, No hay ninguno fuera de Mí. Yo soy el SEÑOR, y no hay otro.
Así dice el SEÑOR: ``Los productos de Egipto, la mercadería de Cus (Etiopía) Y los Sabeos, hombres de gran estatura, Pasarán a ti y tuyos serán. Detrás de ti caminarán, pasarán encadenados Y ante ti se inclinarán. Te suplicarán: `Ciertamente Dios está contigo y no hay ningún otro, Ningún otro dios.'"
Porque así dice el SEÑOR, que creó los cielos; (el Dios que formó la tierra y la hizo, La estableció {y} no la hizo un lugar desolado, {Sino que} la formó para ser habitada): ``Yo soy el SEÑOR y no hay ningún otro.
Vuélvanse a Mí y sean salvos, todos los términos de la tierra; Porque Yo soy Dios, y no hay ningún otro.
Acuérdense de las cosas anteriores ya pasadas, Porque Yo soy Dios, y no hay otro; {Yo soy} Dios, y no hay ninguno como Yo,
Por amor Mío, por amor Mío, lo haré, Porque ¿cómo podría ser profanado {Mi nombre?} Mi gloria, pues, no la daré a otro.
Y dejarán su nombre como maldición a Mis escogidos. El Señor DIOS te matará, Pero Mis siervos serán llamados por otro nombre.
No edificarán para que otro habite, Ni plantarán para que otro coma; Porque como los días de un árbol, {así serán} los días de Mi pueblo, Y Mis escogidos disfrutarán de la obra de sus manos.
Dios dice: ``Si un hombre se divorcia de su mujer, Y ella se va de su lado Y llega a ser de otro hombre, ¿Volverá él a ella? ¿No quedará esa tierra totalmente profanada? Pues tú eres una ramera {con} muchos amantes, Y sin embargo, vuelves a Mí," declara el SEÑOR.
``Por tanto, vienen días," declara el SEÑOR ``cuando no se dirá más Tofet, ni Valle de Ben Hinom, sino el Valle de la Matanza; porque enterrarán en Tofet por no haber {otro} lugar.
Sobre todas las alturas desoladas del desierto Han venido destructores, Porque la espada del SEÑOR devora De un extremo de la tierra al otro; No hay paz para nadie.
"O en otro momento, puedo hablar acerca de una nación o de un reino, de edificar y de plantar;
y les dirás: `Así dice el SEÑOR de los ejércitos: ``De igual manera romperé Yo a este pueblo y a esta ciudad, como quien rompe una vasija de alfarero, que no se puede reparar más; y {los} enterrarán en Tofet por no haber {otro} lugar donde enterrar{los}.
"Te arrojaré a ti y a la madre que te dio a luz a otro país donde no nacieron, y allí morirán.
"Por tanto, estoy contra los profetas," declara el SEÑOR, ``que se roban Mis palabras el uno al otro.
``En aquel día los muertos por el SEÑOR estarán desde un extremo de la tierra hasta el otro. No los llorarán, ni los recogerán, ni los sepultarán; serán como estiércol sobre la superficie de la tierra.
¡Ay! Porque grande es aquel día, No hay otro semejante a él. Es tiempo de angustia para Jacob, Mas de ella será librado.
``Vuelve a tomar otro rollo y escribe en él todas las palabras que antes había en el primer rollo que quemó Joacim, rey de Judá.
Entonces Jeremías tomó otro rollo y se lo dio al escriba Baruc, hijo de Nerías, y éste escribió en él al dictado de Jeremías todas las palabras del libro que Joacim, rey de Judá, había quemado en el fuego, y aun se le añadieron muchas palabras semejantes.
Han tropezado muchas veces; En verdad, han caído uno sobre otro. Entonces dijeron: `Levántate y volvamos A nuestro pueblo y a nuestra tierra natal, Ante la espada opresora.'