'Piedad' en la Biblia
Y viendo esto Pedro, respondió al pueblo: Varones israelitas, ¿por qué os maravilláis de esto? o ¿por qué ponéis los ojos en nosotros, como si por nuestro poder o piedad hubiésemos hecho andar a éste?
por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad.
sino con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan piedad.
Y sin contradicción, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne; justificado en el Espíritu; visto de los ángeles; predicado a los gentiles; creído en el mundo; recibido arriba en gloria.
Mas desecha las fábulas profanas y de viejas, y ejercítate para la piedad;
porque el ejercicio corporal para poco es provechoso; mas la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de la vida presente y de la venidera.
Si alguno enseña otra cosa, y no asiente a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad,
disputas perversas de hombres de mente corrompida, y privados de la verdad, que tienen la piedad por ganancia; apártate de los tales.
Pero gran ganancia es la piedad con contentamiento.
Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre.
teniendo apariencia de piedad, mas negando la eficacia de ella; a éstos evita.
Pablo, siervo de Dios, y apóstol de Jesucristo, conforme a la fe de los escogidos de Dios y el conocimiento de la verdad que es según la piedad,
Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de Aquél que nos ha llamado a gloria y virtud;
y al conocimiento, templanza, y a la templanza, paciencia, y a la paciencia, piedad;
y a la piedad, amor fraternal, y al amor fraternal, caridad.