'Pues' en la Biblia
- 1.Gé 1:27-Gé 34:21
- 2.Gé 35:4-Éx 14:9
- 3.Éx 16:3-Números 13:17
- 4.Números 14:9-Deuteronomio 23:7
- 5.Deuteronomio 24:4-Jueces 3:1
- 6.Jueces 3:4-Rut 3:17
- 7.Rut 4:6-1 Samuel 18:8
- 8.1 Samuel 18:11-2 Samuel 6:10
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- 11.2 Reyes 3:2-1 Crónicas 23:27
- 12.1 Crónicas 24:5-2 Crónicas 30:18
- 13.2 Crónicas 30:25-Job 17:3
- 14.Job 17:10-Salmos 79:7
- 15.Salmos 86:2-Isaías 19:12
- 16.Isaías 21:16-Jeremías 11:14
- 17.Jeremías 11:17-Jeremías 51:6
- 18.Jeremías 51:26-Daniel 5:16
- 19.Daniel 6:8-Zacarías 8:19
- 20.Zacarías 9:5-Marcos 6:14
- 21.Marcos 6:17-Lucas 22:2
- 22.Lucas 22:13-Juan 21:13
- 23.Hechos 1:5-Romanos 3:9
- 24.Romanos 3:20-1 Corintios 9:9
- 25.1 Corintios 9:10-Gálatas 2:6
- 26.Gálatas 2:19-Hebreos 3:19
- 27.Hebreos 4:1-Apocalipsis 14:4
- 28.Apocalipsis 14:15-Apocalipsis 21:25
Sólo que no os rebeléis contra el SEÑOR, ni tengáis miedo de la gente de la tierra, pues serán presa nuestra. Su protección les ha sido quitada, y el SEÑOR está con nosotros; no les tengáis miedo.
Pero Moisés respondió al SEÑOR: Entonces lo oirán los egipcios, pues tú sacaste a este pueblo de en medio de ellos con tu poder,
Ahora, pues, yo te ruego que sea magnificada la fortaleza del Señor, como lo hablaste, diciendo:
No subáis, no sea que seáis derribados delante de vuestros enemigos, pues el SEÑOR no está entre vosotros.
Porque el amalecita y el cananeo están allí delante de vosotros, y caeréis a espada; pues por cuanto os habéis retraído de seguir al SEÑOR, también el SEÑOR no está con vosotros.
``Entonces el sacerdote hará expiación por toda la congregación de los hijos de Israel, y serán perdonados, pues fue un error. Cuando presenten su ofrenda, una ofrenda encendida al SEÑOR, y su ofrenda por el pecado delante del SEÑOR por su error,
será perdonada toda la congregación de los hijos de Israel, y el extranjero que reside entre ellos, pues {sucedió} a todo el pueblo por error.
y se juntaron contra Moisés y Aarón, y les dijeron: Basta ya de vosotros, porque toda la congregación, todos ellos son santos, y en medio de ellos está el SEÑOR; ¿por qué, pues, os levantáis vosotros sobre la congregación del SEÑOR?
Por tanto, tú y todo tu séquito sois los que os juntáis contra el SEÑOR; pues Aarón, ¿qué es, para que contra él murmuréis?
Se retiraron, pues, de los alrededores de las tiendas de Coré, Datán y Abiram; y Datán y Abiram salieron {y} se pusieron a la puerta de sus tiendas, junto con sus mujeres, sus hijos y sus pequeños.
Y dijo Moisés: En esto conoceréis que Jehová me ha enviado para que hiciese todas estas obras; pues no las hice de mi propio corazón.
Y todos los israelitas que {estaban} alrededor de ellos huyeron a sus gritos, pues decían: ¡No sea que la tierra nos trague!
Di a Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, que levante los incensarios de en medio de la hoguera, pues son santos; y esparce allí las brasas.
Aarón {lo} tomó como Moisés le había dicho, y corrió hacia el medio de la asamblea, pues he aquí que la plaga ya había comenzado entre el pueblo. Y echó el incienso e hizo expiación por el pueblo.
Después Aarón regresó a Moisés a la puerta de la tienda de reunión, pues la plaga había sido detenida.
Habló, pues, Moisés a los hijos de Israel, y todos los jefes de ellos le dieron varas, una por cada jefe según sus casas paternas; doce varas, con la vara de Aarón entre sus varas.
Se juntarán, pues, contigo, y tendrán la guarda del tabernáculo del testimonio en todo el servicio del tabernáculo; y ningún extraño se acercará a vosotros.
Y lo comeréis en cualquier lugar, vosotros y vuestra familia; pues es vuestra remuneración por vuestro ministerio en el tabernáculo del testimonio.
¿Por qué, pues, has traído al pueblo del SEÑOR a este desierto, para que nosotros y nuestros animales muramos aquí?
No quiso, pues, Edom dejar pasar a Israel por su término, y así se apartó Israel de él.
Aarón será reunido a su pueblo; pues no entrará en la tierra que yo di a los hijos de Israel, por cuanto fuisteis rebeldes a mi mandamiento en las aguas de Meriba.
Y el pueblo habló contra Dios y Moisés: ¿Por qué nos habéis sacado de Egipto para morir en el desierto? Pues no hay comida ni agua, y detestamos este alimento tan miserable.
De allí partieron y acamparon al otro lado del Arnón, que está en el desierto {y} que sale del territorio de los amorreos, pues el Arnón es la frontera de Moab, entre Moab y los amorreos.
Ven pues, ahora, te ruego, maldíceme este pueblo, porque es más fuerte que yo; por ventura podré yo herirle, y echarlo de la tierra; pues yo sé que el que tú bendijeres, será bendito, y el que tú maldijeres, será maldito.
He aquí, este pueblo que ha salido de Egipto, cubre la faz de la tierra; ven pues, ahora, y maldícemelo; por ventura podré pelear con él, y echarlo.
porque sin duda te honraré mucho, y haré todo lo que me dijeres; ven, pues ahora, maldíceme a este pueblo.
Y el furor de Dios se encendió porque él iba; y el ángel de Jehová se puso en el camino por adversario suyo. Iba, pues, él montado sobre su asna, y con él dos mozos suyos.
Y Balaam dijo al ángel del SEÑOR: He pecado, pues no sabía que tú estabas en el camino para enfrentarte a mí. Pero ahora, si te desagrada, me volveré.
Ahora pues, huye a tu lugar. Yo dije que te colmaría de honores, pero mira, el SEÑOR te ha privado de honores.
pues ellos os han sido hostiles con sus engaños, con los que os engañaron en el asunto de Peor, y en el asunto de Cozbi, hija del jefe de Madián, su hermana, que fue muerta el día de la plaga por causa de Peor.
Y los contados de los levitas fueron veintitrés mil, todo varón de un mes en adelante. Pues no fueron contados entre los hijos de Israel, ya que ninguna heredad les fue dada entre los hijos de Israel.
Pues fuisteis rebeldes a mi dicho en el desierto de Zin, en la rencilla de la congregación, para santificarme en las aguas a ojos de ellos. Estas son las aguas de Meriba de Cades en el desierto de Zin.
Matad, pues, ahora todos los machos entre los niños; matad también toda mujer que haya conocido varón carnalmente.
De la mitad, pues, para los hijos de Israel, Moisés tomó uno de cada cincuenta, así de las personas como de los animales, y los dio a los levitas, que tenían la guarda del tabernáculo del SEÑOR; como el SEÑOR lo había mandado a Moisés.
Recibieron, pues, Moisés y el sacerdote Eleazar, el oro de los tribunos y centuriones, y lo trajeron al tabernáculo del testimonio, por memoria de los hijos de Israel delante del SEÑOR.
Pues cuando subieron hasta el valle de Escol, y vieron la tierra, desalentaron a los hijos de Israel para que no entraran a la tierra que el SEÑOR les había dado.
sino Caleb, hijo de Jefone cenezeo, y Josué, hijo de Nun, pues ellos {sí} han seguido fielmente al SEÑOR."
Pues si dejáis de seguirle, otra vez os abandonará en el desierto, y destruiréis a todo este pueblo.
Porque no tendremos heredad con ellos al otro lado del Jordán y más allá, pues nuestra heredad nos ha tocado de este lado del Jordán, al oriente.
Y Moisés escribió sus salidas por sus partidas por dicho del SEÑOR. Estas, pues, son sus partidas por sus salidas.
Pues los egipcios estaban enterrando a todos los primogénitos que Jehová había dado muerte de entre ellos; también sobre sus dioses Jehová ejecutó juicios.
Partieron, pues, los hijos de Israel de Ramesés, y asentaron campamento en Sucot.
Pues la tribu de los hijos de Rubén ha recibido {lo suyo} según sus casas paternas, y la tribu de los hijos de Gad según sus casas paternas y la media tribu de Manasés han recibido su posesión.
De las ciudades, pues, que daréis, tendréis seis ciudades de refugio.
Pues en su ciudad de refugio habitará hasta que muera el sumo sacerdote; y después que muriere el sumo sacerdote, el homicida volverá a la tierra de su posesión.
No contaminéis, pues, la tierra donde habitáis, en medio de la cual yo habito; porque yo el SEÑOR habito en medio de los hijos de Israel.
Así, ninguna heredad de los hijos de Israel será traspasada de tribu a tribu, pues los hijos de Israel retendrán cada uno la heredad de la tribu de sus padres.
De esta manera, ninguna heredad será traspasada de una tribu a otra tribu, pues las tribus de los hijos de Israel retendrán cada una su propia heredad.
pues Maala, Tirsa, Hogla, Milca y Noa, las hijas de Zelofehad, se casaron con los hijos de sus tíos.
Os mandé, pues, en aquel tiempo, todo lo que habíais de hacer.
excepto Caleb, hijo de Jefone; él la verá, y a él y a sus hijos daré la tierra que ha pisado, pues él ha seguido fielmente al SEÑOR."
Y el SEÑOR me dijo: Diles: No subáis, ni peleéis, pues no estoy entre vosotros; para que no seáis heridos delante de vuestros enemigos.
pues el SEÑOR tu Dios te ha bendecido en toda obra de tus manos; él sabe que andas por este gran desierto; estos cuarenta años el SEÑOR tu Dios ha estado contigo; y ninguna cosa te ha faltado.
Pasamos, pues, de largo a nuestros hermanos, los hijos de Esaú que habitan en Seir, lejos del camino de Arabá, lejos de Elat y de Ezión-geber. Y nos volvimos, y pasamos por el camino del desierto de Moab.
Entonces el SEÑOR me dijo: ``No molestes a Moab, ni los provoques a la guerra, porque no te daré nada de su tierra por posesión, pues he dado Ar a los hijos de Lot por posesión.
``Y cuando llegues frente a los hijos de Amón, no los molestes ni los provoques, porque no te daré nada de la tierra de los hijos de Amón en posesión, pues se la he dado a los hijos de Lot por heredad."
Volvimos, pues, y subimos por el camino de Basán, y Og, rey de Basán, nos salió al encuentro con todo su pueblo para pelear en Edrei.
Tomamos posesión, pues, de esta tierra en aquel tiempo. Desde Aroer, que está en el valle del Arnón, y la mitad de la región montañosa de Galaad y sus ciudades, se la di a los rubenitas y a los gaditas.
Ahora pues, oh Israel, oye los estatutos y derechos que yo os enseño, haciendo los cuales viviréis, y entraréis, y heredaréis la tierra que el SEÑOR el Dios de vuestros padres os da.
Vuestros ojos han visto lo que hizo el SEÑOR en el caso de Baal-peor, pues a todo hombre que siguió a Baal-peor, el SEÑOR tu Dios lo destruyó de en medio de ti.
Guardadlos, pues, y ponedlos por obra; porque ésta es vuestra sabiduría y vuestra inteligencia en ojos de los pueblos, los cuales oirán todos estos estatutos, y dirán: Ciertamente esta nación grande es un pueblo sabio y entendido.
Os acercasteis, pues, y permanecisteis al pie del monte, y el monte ardía en fuego hasta el mismo cielo: oscuridad, nube y densas tinieblas.
Guardad, pues, mucho vuestras almas; porque ninguna figura visteis el día que el SEÑOR habló con vosotros de en medio del fuego;
Guardaos, pues, no sea que olvidéis el pacto que el SEÑOR vuestro Dios hizo con vosotros, y os hagáis imagen tallada en forma de cualquier cosa que el SEÑOR tu Dios te ha prohibido.
Pues el SEÑOR tu Dios es Dios compasivo; no te abandonará, ni te destruirá, ni olvidará el pacto que El juró a tus padres.
Pregunta, pues, ahora de los tiempos pasados, que han sido antes de ti, desde el día que creó Dios al hombre sobre la tierra, y pregunta desde un extremo del cielo al otro, si se ha hecho cosa semejante a esta gran cosa, o se haya oído otra como ella.
Aprende pues, hoy, y reflexiona en tu corazón que el SEÑOR es el único Dios arriba en el cielo, y abajo sobre la tierra; no hay otro.
Así pues, guardarás sus estatutos y sus mandamientos que yo te ordeno hoy, a fin de que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, y para que prolongues tus días sobre la tierra que el SEÑOR tu Dios te da para siempre.
Esta, pues, es la ley que Moisés propuso delante de los hijos de Israel.
Ahora pues, ¿por qué moriremos? Que este gran fuego nos consumirá; si volvemos a oír la voz del SEÑOR nuestro Dios, moriremos.
Guardad, pues, que hagáis como el SEÑOR vuestro Dios os ha mandado; no os apartéis a diestra ni a siniestra.
Estos, pues, son los mandamientos, estatutos, y derechos que el SEÑOR vuestro Dios mandó que os enseñara que hagáis en la tierra a la cual pasáis vosotros para heredarla.
Oye, pues, oh Israel, y guarda que los hagas, para que te vaya bien, y seáis muy multiplicados, (como te ha dicho el SEÑOR el Dios de tus padres) en la tierra que destila leche y miel.
El SEÑOR no puso su amor en vosotros ni os escogió por ser vosotros más numerosos que otro pueblo, pues erais el más pequeño de todos los pueblos;
Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia á los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta las mil generaciones;
Las esculturas de sus dioses quemarás en el fuego: no codiciarás plata ni oro de sobre ellas para tomarlo para ti, porque no tropieces en ello, pues es abominación á Jehová tu Dios;
Y no traerás cosa abominable a tu casa, pues serás anatema como ella; ciertamente la aborrecerás y la abominarás, pues es anatema.
Guardarás, pues, los mandamientos del SEÑOR tu Dios, andando en sus caminos, y temiéndole.
Sepas, pues, hoy, que el SEÑOR tu Dios es el que pasa delante de ti, fuego consumidor, que los destruirá y humillará delante de ti; y tú los echarás, y los destruirás luego, como el SEÑOR te ha dicho.
No pienses en tu corazón, cuando el SEÑOR tu Dios los haya echado de delante de tu presencia, diciendo: Por mi justicia me ha metido el SEÑOR a heredar esta tierra; pues por la impiedad de estos gentiles el SEÑOR los echa de delante de ti.
Comprende, pues, que no {es} por tu justicia {que} el SEÑOR tu Dios te da esta buena tierra para poseerla, pues eres un pueblo de dura cerviz.
Postréme, pues, delante de Jehová cuarenta días y cuarenta noches que estuve postrado; porque Jehová dijo que os había de destruir.
Hice, pues, un arca de madera de acacia y labré dos tablas de piedra como las anteriores, y subí al monte con las dos tablas en mi mano.
Ahora, pues, Israel, ¿qué pide el SEÑOR tu Dios de ti, sino que temas al SEÑOR tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma;
Circuncidad, pues, el prepucio de vuestro corazón, y no endurezcáis más vuestra cerviz.
Amaréis, pues, al extranjero; porque extranjeros fuisteis vosotros en tierra de Egipto.
Amarás, pues, al SEÑOR tu Dios, y guardarás su ordenanza, y sus estatutos y sus derechos y sus mandamientos, todos los días.
Guardad, pues, todos los mandamientos que yo os mando hoy, para que seáis esforzados, y entréis y heredéis la tierra, a la cual pasáis para heredarla;
Guardaos, pues, que vuestro corazón no sea engañado, y os apartéis, y sirváis a dioses ajenos, y os inclinéis a ellos;
Grabad, pues, estas mis palabras en vuestro corazón y en vuestra alma; atadlas como una señal a vuestra mano, y serán por insignias entre vuestros ojos.
Guardaréis, pues, que hagáis todos los estatutos y derechos que yo doy delante de vosotros hoy.
No harás así al SEÑOR tu Dios; porque todo lo que el SEÑOR aborrece, hicieron ellos a sus dioses; pues aun a sus hijos e hijas quemaban en el fuego a sus dioses.
Pero éstos no comeréis de entre los que rumian o de entre los que tienen la pezuña dividida en dos: el camello, el conejo y el damán; pues aunque rumian, no tienen la pezuña dividida; para vosotros serán inmundos.
Pues el SEÑOR tu Dios te bendecirá como te ha prometido, y tú prestarás a muchas naciones, pero tú no tomarás prestado; y tendrás dominio sobre muchas naciones, pero ellas no tendrán dominio sobre ti.
Y sucederá que si él te dice: ``No me iré de tu lado", porque te ama a ti y a tu casa, pues le va bien contigo,
Además, {el rey} no tendrá muchos caballos, ni hará que el pueblo vuelva a Egipto para tener muchos caballos, pues el SEÑOR te ha dicho: ``Jamás volveréis por ese camino."
No tendrán, pues, heredad entre sus hermanos: el SEÑOR es su heredad, como él les ha dicho.
Cuando sities una ciudad por muchos días, peleando contra ella para tomarla, no destruirás sus árboles metiendo el hacha contra ellos; no los talarás, pues de ellos puedes comer. Porque, ¿es acaso el árbol del campo un hombre para que le pongas sitio?
su cuerpo no colgará del árbol toda la noche, sino que ciertamente lo enterrarás el mismo día (pues el colgado es maldito de Dios), para que no contamines la tierra que el SEÑOR tu Dios te da en heredad.
No aborrecerás al idumeo, pues es tu hermano; no aborrecerás al egipcio, porque extranjero fuiste en su tierra.
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- 16.Isaías 21:16-Jeremías 11:14
- 17.Jeremías 11:17-Jeremías 51:6
- 18.Jeremías 51:26-Daniel 5:16
- 19.Daniel 6:8-Zacarías 8:19
- 20.Zacarías 9:5-Marcos 6:14
- 21.Marcos 6:17-Lucas 22:2
- 22.Lucas 22:13-Juan 21:13
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- 24.Romanos 3:20-1 Corintios 9:9
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