'Verano' en la Biblia
Todavía serán todos los tiempos de la tierra; es a saber sementera, y siega, y frío y calor, verano e invierno, y día y noche, no cesarán.
Y se llegó Aod a él, el cual estaba sentado solo en una sala de verano. Y Aod dijo: Tengo palabra de Dios para ti. El entonces se levantó de la silla.
Y salido él, vinieron sus siervos, los cuales viendo las puertas de la sala cerradas, dijeron: Por ventura él cubre sus pies en la sala de verano.
Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; se volvió mi verdor en sequedades de verano. (Selah.)
Tú estableciste todos los términos de la tierra; el verano y el invierno tú los formaste.
prepara en el verano su comida y en el tiempo de la siega recoge su mantenimiento.
El que recoge en el verano es hijo entendido; el que duerme en el tiempo de la siega es hijo que avergüenza.
Como la nieve en el verano, y la lluvia en la siega, así conviene al loco la honra.
Las hormigas, pueblo no fuerte, y en el verano preparan su comida;
Y serán dejados todos a las aves de los montes, y a las bestias de la tierra; sobre ellos tendrán el verano las aves; e invernarán todas las bestias de la tierra.
y será la flor caduca de la hermosura de su gloria, que está sobre la cabeza del valle fértil, como la breva temprana, que viene primero que los otros frutos del verano, la cual, viéndola el que la mira, se la traga tan luego como la tiene a mano.
Se pasó la siega, se acabó el verano, y nosotros no hemos sido salvos.
Entonces fue también desmenuzado el hierro, el barro cocido, el bronce, la plata y el oro, y se tornaron como tamo de las eras del verano; y los levantó el viento, y nunca más se les halló lugar. Mas la piedra que hirió a la imagen, fue hecha un gran monte, que llenó toda la tierra.
Y heriré la Casa del invierno con la Casa del verano, y las casas de marfil perecerán; y muchas casas serán taladas, dijo el SEÑOR.
El SEÑOR me enseñó así: Y he aquí un canastillo de fruta de verano.
Y dijo: ¿Qué ves, Amós? Y dije: Un canastillo de fruta de verano. Y el SEÑOR me dijo: Ha venido el fin sobre mi pueblo Israel; nunca más le pasaré.
¡Ay de mí! Que he venido a ser como cuando han cogido los frutos del verano, como cuando han rebuscado después de la vendimia, que no queda racimo para comer; mi alma deseó los primeros frutos.
Acontecerá también en aquel día, que saldrán de Jerusalén aguas vivas; la mitad de ellas hacia el mar oriental, y la otra mitad hacia el mar occidental, en verano y en invierno.
Del árbol de la higuera aprended la comparación: Cuando ya su rama se enternece, y las hojas brotan, sabéis que el verano está cerca.
De la higuera aprended la semejanza: Cuando su rama ya se hace tierna, y brota hojas, conocéis que el verano está cerca.
Cuando ya brotan, viéndolos, de vosotros mismos entendéis que el verano está ya cerca.