Cantares 1:2

¡Oh si él me besara con ósculos de su boca! Porque mejores son tus amores que el vino.

Cantares 4:10

¡Cuán hermosos son tus amores, hermana mía, esposa mía! ¡Cuánto mejores que el vino tus amores, y el olor de tus ungüentos que todas las especias aromáticas!

Salmos 63:3-5

Porque mejor es tu misericordia que la vida; mis labios te alabarán.

Cantares 1:4

Atráeme; en pos de ti correremos. Me metió el rey en sus cámaras; nos gozaremos y alegraremos en ti; nos acordaremos de tus amores más que del vino; los rectos te aman.

Génesis 27:26-27

Y le dijo Isaac su padre: Acércate ahora, y bésame, hijo mío.

Génesis 29:11

Y Jacob besó a Raquel, y alzó su voz, y lloró.

Génesis 45:15

Y besó a todos sus hermanos, y lloró sobre ellos: y después sus hermanos hablaron con él.

Salmos 2:12

Besad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino, cuando se encendiere un poco su furor. Bienaventurados todos los que en Él confían.

Salmos 36:7

¡Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus alas.

Cantares 2:4

Me llevó a la casa del banquete, y su bandera sobre mí fue amor.

Cantares 5:16

Su paladar, dulcísimo: y todo él codiciable. Tal es mi amado, tal es mi amigo, oh doncellas de Jerusalén.

Cantares 7:6

¡Qué hermosa eres, y cuán suave, oh amor deleitoso!

Cantares 7:9

y tu paladar como el buen vino, que se entra a mi amado suavemente, y hace hablar los labios de los que duermen.

Cantares 7:12

Levantémonos de mañana a las viñas; veamos si brotan las vides, si se abre el cierne, si han florecido los granados; allí te daré mis amores.

Cantares 8:1-2

¡Oh que fueras tú como mi hermano, que mamó los pechos de mi madre; así, al encontrarte afuera yo te besaría, y no me menospreciarían!

Isaías 25:6

Y Jehová de los ejércitos hará en este monte a todos los pueblos banquete de grosuras, banquete de vinos añejos, de gruesos tuétanos, y de vinos añejos bien refinados.

Isaías 55:1-2

A todos los sedientos: Venid a las aguas; y los que no tienen dinero, venid, comprad, y comed. Venid, comprad, sin dinero y sin precio, vino y leche.

Mateo 26:26

Y mientras comían, Jesús tomó el pan, y lo bendijo, y lo partió y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo.

Lucas 15:20

Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, su padre lo vio, y fue movido a misericordia; y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó.

Hechos 21:7

Y nosotros, cumplida la navegación, vinimos de Tiro a Tolemaida; y habiendo saludado a los hermanos, nos quedamos con ellos un día.

1 Pedro 5:14

Saludaos unos a otros con ósculo de amor. Paz a todos vosotros los que estáis en Cristo Jesús. Amén.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)