Si habéis, pues, resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.

Entonces, como escogidos de Dios, santos y amados, revestíos de tierna compasión, bondad, humildad, mansedumbre y paciencia;

Que la palabra de Cristo habite en abundancia en vosotros, con toda sabiduría enseñándoos y amonestándoos unos a otros con salmos, himnos {y} canciones espirituales, cantando a Dios con acción de gracias en vuestros corazones.

Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres,

Por tanto, considerad los miembros de vuestro cuerpo terrenal como muertos a la fornicación, la impureza, las pasiones, los malos deseos y la avaricia, que es idolatría.

Y todo lo que hacéis, de palabra o de hecho, {hacedlo} todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias por medio de El a Dios el Padre.

Mujeres, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor.

Y que la paz de Cristo reine en vuestros corazones, a la cual en verdad fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos.

soportándoos unos a otros y perdonándoos unos a otros, si alguno tiene queja contra otro; como Cristo os perdonó, así también {hacedlo} vosotros.

No mintáis los unos a los otros, puesto que habéis desechado al viejo hombre con sus {malos} hábitos,

Pues la ira de Dios vendrá sobre los hijos de desobediencia por causa de estas cosas,

Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.

Pero ahora desechad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, maledicencia, lenguaje soez de vuestra boca.

y os habéis vestido del nuevo {hombre,} el cual se va renovando hacia un verdadero conocimiento, conforme a la imagen de aquel que lo creó;

Siervos, obedeced en todo a vuestros amos en la tierra, no para ser vistos, como los que quieren agradar a los hombres, sino con sinceridad de corazón, temiendo al Señor.

en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas.

Cuando Cristo, nuestra vida, sea manifestado, entonces vosotros también seréis manifestados con El en gloria.

{una renovación} en la cual no hay {distinción entre} griego y judío, circunciso e incircunciso, bárbaro, escita, esclavo {o} libre, sino que Cristo es todo, y en todos.

Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.

Porque el que procede con injusticia sufrirá las consecuencias del mal que ha cometido, y eso, sin acepción de personas.

sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia. Es a Cristo el Señor a quien servís.

Hijos, sed obedientes a vuestros padres en todo, porque esto es agradable al Señor.

Y sobre todas estas cosas, {vestíos de} amor, que es el vínculo de la unidad.

Maridos, amad a vuestras mujeres y no seáis ásperos con ellas.

Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten.