Jesús le dijo*: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí.

No se turbe vuestro corazón; creed en Dios, creed también en mí.

Y yo rogaré al Padre, y El os dará otro Consolador para que esté con vosotros para siempre;

Si me amáis, guardaréis mis mandamientos.

Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, El os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que os he dicho.

La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.

Jesús respondió, y le dijo: Si alguno me ama, guardará mi palabra; y mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos con él morada.

En la casa de mi Padre hay muchas moradas; si no {fuera así,} os lo hubiera dicho; porque voy a preparar un lugar para vosotros.

En verdad, en verdad os digo: el que cree en mí, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores que éstas hará, porque yo voy al Padre.

Jesús le dijo*: ¿Tanto tiempo he estado con vosotros, y {todavía} no me conoces, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo dices tú: ``Muéstranos al Padre"?

El que tiene mis mandamientos y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama será amado por mi Padre; y yo lo amaré y me manifestaré a él.

{es decir,} el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque ni le ve ni le conoce, {pero} vosotros sí le conocéis porque mora con vosotros y estará en vosotros.

Y si me voy y preparo un lugar para vosotros, vendré otra vez y os tomaré conmigo; para que donde yo estoy, {allí} estéis también vosotros.

Y todo lo que pidáis en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.

Oísteis que yo os dije: ``Me voy, y vendré a vosotros." Si me amarais, os regocijaríais porque voy al Padre, ya que el Padre es mayor que yo.

¿No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os digo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí es el que hace las obras.

Felipe le dijo*: Señor, muéstranos al Padre, y nos basta.

No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.

No hablaré mucho más con vosotros, porque viene el príncipe de este mundo, y él no tiene nada en mí;

Si me hubierais conocido, también hubierais conocido a mi Padre; desde ahora le conocéis y le habéis visto.

Si me pedís algo en mi nombre, yo {lo} haré.

Creedme que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí; y si no, creed por las obras mismas.

En ese día conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.

Y os lo he dicho ahora, antes que suceda, para que cuando suceda, creáis.

pero para que el mundo sepa que yo amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vámonos de aquí.

Y conocéis el camino adonde voy.

Un poco más de tiempo y el mundo no me verá más, pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis.

Tomás le dijo*: Señor, {si} no sabemos adónde vas, ¿cómo vamos a conocer el camino?

Estas cosas os he dicho estando con vosotros.

Judas (no el Iscariote) le dijo*: Señor, ¿y qué ha pasado que te vas a manifestar a nosotros y no al mundo?

El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que oís no es mía, sino del Padre que me envió.