Cántico. Salmo de los hijos de Coré.Grande es el SEÑOR, y muy digno de ser alabado en la ciudad de nuestro Dios, su santo monte.

Porque este es Dios, nuestro Dios por siempre jamás; El nos guiará hasta la muerte.

Hermoso en {su} elevación, el gozo de toda la tierra es el monte Sion, {en} el extremo norte, la ciudad del gran Rey.

En tu misericordia, oh Dios, hemos meditado, en medio de tu templo.

Andad por Sion e id alrededor de ella; contad sus torres;

Oh Dios, como es tu nombre, así es tu alabanza hasta los confines de la tierra; llena de justicia está tu diestra.

Dios en sus palacios se dio a conocer como baluarte.

Con el viento solano tú destrozas las naves de Tarsis.

Pues, he aquí, los reyes se reunieron; pasaron juntos.

Como lo hemos oído, así {lo} hemos visto en la ciudad del SEÑOR de los ejércitos, en la ciudad de nuestro Dios; Dios la afirmará para siempre. (Selah)

Allí se apoderó de ellos un temblor; dolor como el de mujer que está de parto.

considerad atentamente sus murallas, recorred sus palacios, para que {lo} contéis a la generación venidera.

Alégrese el monte Sion, regocíjense las hijas de Judá, a causa de tus juicios.

Ellos {la} vieron {y} quedaron pasmados; se aterrorizaron {y} huyeron alarmados.