'Hermosas' en la Biblia
viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, se tomaron mujeres, escogiendo entre todas.
y que del río subían siete vacas, hermosas a la vista, y muy gordas, y pacían en el prado:
Y que otras siete vacas subían tras ellas del río, de feo aspecto, y enjutas de carne, y se pararon cerca de las vacas hermosas a la orilla del río:
Y que las vacas de feo aspecto y enjutas de carne devoraban a las siete vacas hermosas y muy gordas. Y despertó Faraón.
Se durmió de nuevo, y soñó la segunda vez: Que siete espigas llenas y hermosas subían de una sola caña:
Y vi también en mi sueño, que siete espigas crecían en una misma caña, llenas y hermosas;
Y las espigas delgadas devoraban a las siete espigas hermosas: y lo he contado a los magos, mas no hay quien me lo interprete.
Las siete vacas hermosas siete años son; y las espigas hermosas son siete años: el sueño es uno mismo.
¡Cuán hermosas son tus tiendas, oh Jacob, tus habitaciones, oh Israel!
¿Diste tú hermosas alas al pavo real, o alas y plumas al avestruz?
Y en toda la tierra no había mujeres tan hermosas como las hijas de Job; y les dio su padre herencia entre sus hermanos.
Hermosas son tus mejillas entre los pendientes, tu cuello entre los collares.
Ha llegado a mis oídos de parte de Jehová de los ejércitos, que las muchas casas han de quedar asoladas, sin morador las grandes y hermosas.
Porque te olvidaste del Dios de tu salvación, y no te acordaste de la Roca de tu fortaleza; por tanto plantarás plantas hermosas, y sembrarás sarmiento extraño.
Tomaste también tus hermosas joyas de mi oro y de mi plata, que yo te había dado, y te hiciste imágenes de hombre, y fornicaste con ellas.
Y te entregaré en mano de ellos; y destruirán tus lugares altos, y derribarán tus altares, y te despojarán de tus ropas, y se llevarán tus hermosas joyas, y te dejarán desnuda y descubierta.
Y te despojarán de tus vestidos, y tomarán tus hermosas joyas.
Y se oyó en ella voz de compañía en holganza; y con los varones de la gente común fueron traídos los sabeos del desierto; y pusieron brazaletes sobre sus manos, y hermosas coronas sobre sus cabezas.
Porque habéis llevado mi plata y mi oro, y mis cosas preciosas y hermosas metisteis en vuestros templos;
Por tanto, pues que vejáis al pobre y recibís de él carga de trigo; edificasteis casas de piedra labrada, mas no las habitaréis; plantasteis hermosas viñas, mas no beberéis el vino de ellas.
En aquel tiempo las doncellas hermosas y los jóvenes desmayarán de sed.
Y a unos que hablaban del templo, de que estaba adornado de hermosas piedras y dones, dijo: