'Paladar' en la Biblia
Si hay iniquidad en mi lengua; o si mi paladar no discierne los tormentos.
Ciertamente el oído prueba las palabras, y el paladar gusta las viandas.
si le parecía bien, y no lo dejaba, sino que lo detenía entre su paladar;
la voz de los principales se ocultaba, y su lengua se pegaba a su paladar;
que ni aun entregué al pecado mi paladar, pidiendo maldición para su alma;
He aquí, ahora abro mi boca, en mi paladar habla mi lengua.
Porque el oído prueba las palabras, como el paladar gusta para comer.
Como un tiesto se secó mi vigor, y mi lengua se pegó a mi paladar; y me has puesto en el polvo de la muerte.
¡Cuán dulces han sido a mi paladar tus dichos! Más que la miel a mi boca.
Mi lengua se pegue a mi paladar, si de ti no me acordare; si no ensalzare a Jerusalén como preferente asunto de mi alegría.
Porque los labios de la mujer extraña destilan miel, y su paladar es más blando que el aceite;
Porque mi paladar hablará verdad, y mis labios abominan la impiedad.
Come, hijo mío, de la miel, porque es buena, y del panal dulce a tu paladar;
Como el manzano entre los árboles silvestres, así es mi amado entre los hijos; bajo su sombra deseé sentarme, y su fruto fue dulce a mi paladar.
Su paladar, dulcísimo: y todo él codiciable. Tal es mi amado, tal es mi compañero, oh doncellas de Jerusalén.
y tu paladar como el buen vino, que se entra a mi amado suavemente, y hace hablar los labios de los que duermen.
Dálet: La lengua del niño de pecho, de sed se pegó a su paladar; los cachorros pidieron pan, y no hubo quien lo partiere.
Y haré que se pegue tu lengua a tu paladar, y estarás mudo, y para que no los reprendas, porque son casa rebelde.